O lideras o te quedas rezagado. La rueda de la sostenibilidad gira rápido y España no se queda atrás. Y eso se demuestra, por ejemplo, en el Madrid Design Festival 2022, que reúne al sector moda, decoración y movilidad para hablar de residuos, ecodiseño, y nuevas oportunidades.
Los tres sectores coinciden: en la anticipación está la clave para que se genere una buena economía circular. Y ser referente de ello es un orgullo como marca y país.
“A quien se está esforzando en el camino de la sostenibilidad el negocio le irá bien”, afirma Jesús Llinares, CEO de la empresa valenciana Andreu World, primer fabricante de mobiliario del mundo con una oferta 100% FSC. Y Nuez, la silla más sostenible del mundo, es uno de sus últimos aportes.
El secreto de su sostenibilidad es un ecodiseño que no emplea colas, es retapizable y desmontable para reparar y actualizar en cualquier momento y así prolongar su vida. Su base central es de madera FSC al 100% y su tapizado, Circular ONE®, se trata de un innovador tejido realizado a partir de plásticos de botellas PET y residuos textiles.
El material interior también es 100% reciclado y 100% reciclable. “No hay otro ejemplo en el mundo así. La silla se biodegrada en condiciones atmosféricas normales de la misma manera que lo haría una silla de madera”, explica, orgulloso, Llinares.
La silla se biodegrada en condiciones atmosféricas normales como lo haría una silla de madera”
Además, la silla lleva el apellido de una de las grandes del diseño patrio, Patricia Urquiola. “Para aplicar un enfoque circular no sólo me centré en los materiales, sino también en las posibilidades de desmontaje simplificadas que pueden prolongar el ciclo de vida del producto. Nuez Lounge BIO se crea con un termopolímero 100% reciclable de origen natural”, asegura su creadora.
¿Cuál es el coste de reciclar?, nos preguntamos. ¿Compensa el gasto de energía que conlleva el transformar los desechos o es igual que generarlos nuevos? Carol Blázquez, responsable de Innovación y Sostenibilidad de Ecoalf, tiene claro que compensa. Y que es bueno para nosotros y para el planeta.
Eso sí, no podemos olvidar, advierte, que “lo que hoy es sostenible, mañana ya no lo es”. Pues la sostenibilidad tiene que ver con los recursos que tiene el planeta. Blázquez aclara: “Hablamos de la necesidad de reciclar porque venimos de una economía lineal mediante la que, de forma, rápida extraemos recursos naturales, los convertimos en productos de usar y tirar, con ciclos de vida muy cortos, que rápidamente son residuos”.
Alargar estos ciclos y reducir residuos plásticos de los mares colocó a Ecoalf desde sus inicios en referentes de sostenibilidad marca España en el mundo. Sus prendas Because there is no planet B se realizan a partir de plástico de botellas PET, redes de pesca, neumáticos, procesos de regeneración de algodón y lana y posos del café para dar acabados e higiene de prendas. “El planeta da lo que da y le estamos exigiendo 2,5 veces más cada año de los recursos que de forma natural puede regenerar cada año. La respuesta a la circularidad no es solo el reciclado”, añade Blázquez.
“El plástico no es el demonio”, manifiesta. Y recuerda: “La paradoja es que estamos usando el plástico en objetos de usar y tirar con ciclos de vida muy cortos”.
Como ejemplo de que dar una segunda vida a los desechos es bueno para el planeta, Carlos Martínez, director de la marca MINI en España, nos habla de las pieles veganas y recicladas con las que ahora tapizan y de cómo minimizan desde el ecodiseño. “Ya no llevamos faros antiniebla aparte, sino que están integrados en una sola pieza junto con las luces y un 25% del acero utilizado es reciclado”, recuerda.
También nos habla de la necesidad de dejar pensar a los empleados para encontrar soluciones creativas. “Hemos convertido un desecho en un valor. Al pintar los coches siempre quedaban restos de pintura sobrantes en los tubos y ahora es el upcycling creativo con el que se pinta a mano y a tres colores el techo de los nuevos modelos”, explica Martínez.
“Ya no es sólo vender un producto, sino que se vea que detrás se ha hecho con sentido común. La sostenibilidad es una inversión ecológica pero también financiera. Inversiones que pueden parecer no rentables como reciclar baterías de litio, instalar motores eléctricos en Minis clásicos, o reciclar coches usados son imprescindibles para el negocio a largo plazo”, cuenta el director de MINI.
Y para seguir innovando con impacto positivo lanza el programa Premios MINI de diseño para apoyar y premiar aquellos proyectos e iniciativas que aporten soluciones sostenibles cuyo objetivo sea mejorar la vida en las ciudades. En la sostenibilidad van a haber dos extremos como afirma Jesús Llinares “o lideras o vas arrastras y nadie quiere quedarse atrás”.