Uno de los interrogantes que ronda la cabeza de los líderes mundiales es cómo atajar la pobreza en su forma más estructural. Y cuando uno piensa en pobreza, la imagen de los niños africanos es la que primero viene a la mente. África es el continente, sin incluir la Antártida, con la población más pobre del mundo. Pero, ¿por qué es así? Para encontrar respuesta, hemos preguntado a ChatGPT de OpenAI.
La pregunta de por qué África es pobre está llena de prejuicios y se presuponen dos cosas: que existe una sola realidad africana, por lo que los resultados que se arrojarán tratarán de explicar la situación socioeconómica de 54 países en unas pocas líneas de texto, y que se da una excepcionalidad que condena al continente a la corrupción, violencia y por consiguiente, a la pobreza.
"¿Por qué África es pobre?", le preguntamos al chatbot. Tras puntualizar la naturaleza diversa y multicultural del continente, la IA lista "los principales factores que contribuyen a la pobreza": la colonización, los conflictos armados, la dependencia de materias primas, la desigualdad económica y los problemas de gobernanza.
[10 películas sobre África que muestran la realidad del continente olvidado]
Esta respuesta autogenerada resume, de manera vaga y sin datos concretos, las causas profundas de la lamentable situación que vive un continente donde el 35,1% de la población vive por debajo del umbral de pobreza. Por eso, es pertinente matizarlas. Y eso es precisamente lo que realizaremos en ENCLAVE ODS.
¿Cuán pobre es África?
Para comprender la situación en la que se encuentra el continente africano es necesario dar cuenta de la pobreza. Definir la noción de pobreza y medirla no son sencillas tareas. Algunos países lo hacen en términos absolutos y otros en términos relativos, y las estimaciones que se realizan son sensibles a la conceptualización, la elección de determinados indicadores del bienestar, la unidad de medida y las tasas de paridad del poder adquisitivo.
Lo cierto es que África, hasta los años 80, tenía una tasa de pobreza extrema próxima a la del resto del mundo. Utilizando el umbral de pobreza de 1,90 dólares al día, la tasa de pobreza extrema de África en 1981 era 43,1% y la del resto del mundo del 42,8. En 2015, fecha en la que se renovó el compromiso para su erradicación con los ODS, la tasa de pobreza extrema de África era del 35,5%, alrededor de 6,8 veces superior a la media del resto del mundo.
Para medir la pobreza, el indicador con mayor aceptación es el introducido por el Banco Mundial en 1990: el umbral de pobreza. Por aquel entonces se estableció en 1,02 dólares por día. Desde 2017 estuvo en 1,90 dólares, y en septiembre de 2022 se actualizó a 2,15 dólares por día. Este parámetro tiene en cuenta el importe para satisfacer las necesidades mínimas de alimentación, vestido y alojamiento de una persona.
La última actualización de las estimaciones de pobreza realizada por el Banco Mundial dan cuenta de que en 2019 aproximadamente el 60% de las personas en situación de pobreza extrema del mundo vivían solo en el África subsahariana. O lo que es lo mismo, 39 millones de personas de esta región eran pobres. Y estas estimaciones no tienen en cuenta la situación económica derivada de la pandemia de la Covid-19.
¿Qué culpa tiene el colonialismo?
ChatGPT responsabiliza a las prácticas colonialistas de Europa de la situación de pobreza de África. "Los recursos de los países africanos se extrajeron y exportaron a Europa, lo que dejó a África en una situación de desventaja económica". Sin embargo, esta puede ser una afirmación demasiado categórica y burda.
En un artículo para el World Social Science Report 2016, el experto de las Naciones Unidas, James C. Murombedzi, señala que “los procesos expropiatorios asociados con la imposición de nuevas formas de propiedad y control ocasionaron la creación, o en algunos casos, el agravamiento de las desigualdades que han perdurado hasta nuestros días”. Junto a las nuevas formas de propiedad, el comercio de esclavos fue otro de los fenómenos que se relacionan.
El catedrático de economía Nathan Nunn estudió cómo el comercio de esclavos afecta al desarrollo económico ulterior. Se dio cuenta, tras analizar las estimaciones del número de esclavos exportados desde cada país en África durante la trata de esclavos, que "los países africanos que hoy son más pobres son aquellos de los que se llevaron más esclavos", escribió en el Quarterly Journal of Economics.
El lastre de la corrupción
“La gobernanza deficiente, la corrupción y la falta de transparencia” fue otra de las razones expuestas por el chatbot. Según el Informe sobre el Desarrollo Económico en África 2020 de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), África pierde anualmente unos 88.600 millones de dólares, el 3,7% de su producto interior bruto (PIB), en flujos financieros ilícitos.
[La guerra de Mali contada por malienses: corrupción, yihadismo y una espiral de violencia infinita]
Y la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD), en su Visión Estratégica para África 2030 lanzada en febrero de 2021, señala que los flujos financieros ilícitos siguen siendo un impedimento clave para que África alcance la Agenda 2030 y la Agenda 2063 de la Unión Africana.
Un reciente informe elaborado por la Comisión de la Unión Africana (CUA), la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África (CEPA), el Banco Africano de Desarrollo (BAfD) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) revela que para 2030, al menos 492 millones de africanos se encontrarán en una situación de pobreza extrema y al menos 350 millones de personas en 2050. Por lo que el ODS1 quedaría en papel mojado.
La corrupción es un mal que persigue al continente desde hace años. Según el último Índice de percepción de corrupción, elaborado cada año por la oenegé Transparencia Internacional (TI), los países africanos continúan a la cola de la lista: 10 están entre los últimos 20 puestos.
La corrupción y falta de instituciones sólidas se relaciona también con el conflicto. "Los conflictos y los problemas de seguridad han debilitado aún más las instituciones y socavado la capacidad de los Estados para responder con decisión a la corrupción”, señala el informe de TI.