Efectivamente, 2020 marcó un antes y un después en nuestra vida. No hablamos sólo de la forma en la que nos relacionamos, las actividades de ocio que realizamos o cómo viajamos, también están cambiando los modelos de trabajo. El teletrabajo es una de las tendencias más evidentes que, junto con los espacios flexibles y la importancia de la conciliación, están redirigiendo el ámbito laboral hacia una filosofía más centrada en el empleado. 

Para conseguir que las compañías se adapten a esta nueva normalidad no pueden pasar desapercibidas acciones para mejorar la salud y el bienestar de los trabajadores, aumentar la colaboración de los equipos, promover el desarrollo tecnológico o redefinir los espacios.

David Vega es CEO de Lexington, una empresa "pionera" en el sector de los espacios flexibles, cuenta. Esto es lo que hoy denominamos y conocemos como coworking. Asegura que después del confinamiento aumentó la demanda de estos servicios, sobre todo, "desde el mes de septiembre, cuando se dio el pistoletazo de vuelta con la pandemia, la mayoría de las empresas empezaron a volver a las oficinas".

Y añade: "Nosotros, desde esa fecha, hemos tenido muchísimas contrataciones". Algo que se mantiene pues, actualmente, cuentan con una ocupación del 90% de sus oficinas. 

Pero no es lo único que está transformando el espacio donde trabajamos. Estos son algunos de los modelos de trabajo que se desarrollarán durante 2022 y que contribuirán a mejorar las condiciones de empleados y empresas.

1. Más colaboración

Las empresas ya se están adaptando a nuevos modelos en los que primen las estancias confortables y atractivas, pero, sobre todo, donde la colaboración sea la filosofía entre los empleados. "Lo que sí está ocurriendo, evidentemente, es que la oficina se está transformando a unos espacios mucho más de diseño para ofrecer espacios colaborativos y zonas de reunión", explica Vega.

Cada vez se apuesta más por el hot desking, un sistema que permite organizar tu oficina de tal manera que los empleados puedan involucrarse más en las tareas de forma colectiva, dejando a un lado los escritorios individuales. Este tipo de redistribuciones impulsa un clima positivo de trabajo y ayuda a aumentar la productividad. Se respira un mayor ambiente de equipo.

El 'hot desking' permite organizar tu oficina para facilitar la colaboración entre empleados

Asimismo, con esta redefinición, para crear un entorno más social, el equipo directivo mostrará más cercanía con el resto de empleados. Generar confianza en el equipo será esencial para que el espacio se convierta en un entorno de corresponsabilidad.

"Para atraer a los trabajadores a la oficina, esta tiene que tener algo más atractivo, sitios donde vienen las personas a tener reuniones, a formarse, a interactuar con compañeros, etcétera", cuenta Vega. Y aclara: "eso, evidentemente, exige y requiere de un rediseño del espacio de trabajo convencional".

2. 'Coworking'

Como ya se ha mencionado, la colaboración es una de las piezas claves de un coworking, pero sus ventajas no se encuentran sólo en eso. La contratación de espacios flexibles se ha incrementado después de la pandemia, pues las compañías buscan oficinas versátiles y con flexibilidad. 

Los contratos temporales de oficinas, evitando la larga duración que muchas veces se exige, es una de las características de estos entornos. En este sentido, Vega explica que en Lexington tienen "empresas con 100 puestos de trabajo contratados y contratos de 6 meses en 6 meses. Y si ocurre cualquier circunstancia sobrevenida, tienes un tiempo de reacción para no asumir los gastos que representan los costes de alquiler de oficina".

El cliente se olvida completamente de los gastos de oficina y puede centrarse en su actividad principal, con lo cual, "se producen ahorros de costes, pero, sobre todo, de eficiencia", señala Vega.

Además, las sinergias que pueden llegar a producirse entre los usuarios de estos espacios también es destacable, generándose networking o incluso nuevos negocios.

3. Salud y bienestar

Cuidar el bienestar de los trabajadores e implantar políticas de flexibilidad en su horario, ubicación y forma de trabajo, es una filosofía que también se está comenzando a implantar, evitando situaciones como la dificultad de concentración, la imposibilidad de teletrabajar o el estrés.

En este caso, la conciliación también se considera un factor importante. Según el estudio Responsabilidad Familiar Corporativa de la Comunidad de Madrid de 2019, realizado por el Centro Internacional Trabajo y Familia del IESE y Alares, "el 61% de los empleados en la Comunidad de Madrid cree que su entorno laboral dificulta la conciliación entre trabajo y vida personal y familiar". 

Asimismo, el informe demuestra que respecto a las políticas de apoyo familiar, "los trabajadores madrileños echan en falta permisos de paternidad y maternidad más amplios, subsidios para el cuidado de hijos o personas dependientes y servicios de guardería en el centro de trabajo". Lo que demuestra que instaurar medidas de igualdad y corresponsabilidad también son necesarias.

Estas acciones contribuyen a mejorar el estado de ánimo de plantilla, pues es evidente que el buen humor permite focalizar mejor las tareas, aumentando la productividad. Contar con un servicio de salud que vigile estas conductas y un equipo que realmente se preocupe por el bienestar y la salud mental de los empleados, evitará la desmotivación y el descontento.

4. Trabajo híbrido

Este, sin duda, se ha convertido en uno de los modelos más debatidos y queridos por muchas empresas después del confinamiento. El teletrabajo permite que los equipos no tengan que ir siempre a la oficina, pudiendo trabajar desde su hogar o cualquier otro lugar. 

En este sentido, Vega destaca, lo que llama, trabajo en remoto: "cuando hablamos de teletrabajo sólo se piensa en trabajar desde casa como una alternativa a la oficina. Y nosotros entendemos que para muchas empresas el trabajo en remoto, significa que puede ser, o bien, desde casa del trabajador o desde lo que se denomina terceros espacios". Y en este caso, volvemos a la importancia de espacios flexibles o coworking.

Los empleados están valorando más la oportunidad de teletrabajar desde zonas rurales

Si cada trabajador puede tomar la decisión de acudir o no la oficina dependiendo del día y situación, define una clara filosofía de empresa adaptada a los principios que se están empezando a hacer cada vez más evidentes en el ámbito laboral. 

Además de eliminar el desplazamiento, que puede ayudar a disminuir la emisión de CO₂, también es cierto que los empleados están valorando más la oportunidad de teletrabajar desde zonas rurales, donde consideran que pueden tener mejor calidad de vida.

Y así lo demostraba la encuesta realizada por Escapadarural.com en 2021, donde el  68% de las personas consideraba que el modelo de teletrabajo en entornos rurales aumenta la productividad.

5. Mejor desarrollo tecnológico

Según el informe de Economía Digital en España, elaborado por Adigital y Boston Consulting Group, la digitalización de la economía española creció 3 puntos y alcanzó el 22% del PIB en 2020 a consecuencia de la necesidad de acelerar la digitalización tras la pandemia. Desde Lexington explican que esto se refleja en las necesidades de las empresas y sus trabajadores, que requieren una comunicación fluida y mecanismos de organización ágiles.

Ya estén en casa o en la oficina, los empleados deben contar con equipos tecnológicos adecuados que mejoren la optimización del trabajo y la intercomunicación entre todos los niveles de una empresa.

"Teníamos la tecnología, pero no la estábamos aprovechando. Esto ha sido un acelerador para que todas las empresas incorporemos mucha tecnología que nos está permitiendo poder teletrabajar o trabajar en remoto", cuenta Vega.

Mientras antes planteábamos todas las reuniones mediante un encuentro presencial, ahora se tiene en cuenta que muchos puedan acceder de forma virtual. "Esto exige incorporar salas con tecnologías adaptadas", concluye el experto.

6. La importancia de las 'soft skills'

Los modelos de contratación también están cambiando. Ahora, las competencias digitales, las soft skills, la adaptación al cambio o la capacidad para afrontar nuevos retos de forma autónoma son algunas cualidades que más se buscan en los procesos de selección.

Las soft skills son una de las mejores aliadas para que el empleado pueda generar un ambiente de trabajo positivo, de cooperación y felicidad. Actualmente, aquellas que más se están demandando tienen que ver con la flexibilidad, capacidad de liderazgo, creatividad, pensamiento crítico, trabajo en equipo, organización o iniciativa.