La Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP26) que se celebra esta semana en Glasgow (Reino Unido) es una excelente oportunidad para pensar que el greenwashing de las empresas está llegando a su fin. Una regulación más estricta, el escrutinio de los inversores que piden más transparencia y que, de verdad, haya un plan de reducción de emisiones de CO₂ hace inviable esta estrategia de marketing.
El compromiso de las empresas para reducir a cero sus emisiones se ha acelerado en los últimos dos años. Casi un tercio (30%) de las mayores compañías europeas que cotizan en bolsa se han propuesto alcanzar esta reducción para 2050. Son las principales conclusiones del informe de Accenture Alcanzando las cero emisiones netas en 2050 (Reaching Net Zero by 2050).
En la última década, las empresas con objetivo cero redujeron sus emisiones un 10% de media, mientras que las que no tenían objetivos vieron aumentar sus emisiones.
Una mayor exigencia para que las empresas informen sobre sus riesgos climáticos será determinante en las decisiones de inversión
"La comunidad empresarial europea está más comprometida que nunca en la carrera hacia las cero emisiones, ya que el número de empresas que fijan públicamente sus objetivos ha crecido en los últimos dos años", señala Jean-Marc Ollagnier, presidente de Accenture en Europa. Llegar a la neutralidad en carbono en 2050 es posible si las empresas actúan con rapidez y decisión.
Los fondos, más exigentes
"Las esferas política, regulatoria, comercial y de consumo están colisionando y provocando un seísmo en cuyo epicentro se encuentra el carbono", advierte Abbie Llewellyn-Waters, responsable de Inversión sostenible en la gestora británica Jupiter AM.
La experta considera que la previsión se ha convertido en un elemento esencial para los inversores: "Estar preparado en las diferentes carteras y clases de activos para estos inevitables cambios en las políticas será determinante para las rentabilidades a largo plazo".
Para poder lograrlo, espera que "la divulgación de los riesgos relacionados con el clima se generalice y estandarice, y que mejore su calidad. Los mercados de capitales están cambiando y necesitamos un marco de inversión que mire al futuro".
Asimismo, la experta enfatiza la responsabilidad que tienen las empresas en esta cuestión: "Comprometerse a alcanzar la neutralidad en emisiones o cumplir con el Acuerdo de París es un primer paso importante, pero para convencernos realmente necesitamos ver un mayor número de empresas que presentan planes detallados, creíbles e irreversibles sobre cómo conseguirán una descarbonización sostenible".
Y afirma que "sin ello, estos compromisos corren el riesgo de ser promesas vacías y fácilmente revocables por futuros consejos de administración y los comités ejecutivos que se designen".
Mobeen Tahir, director asociado en el gestor de activos WisdomTree, por su parte, dice que "es probable que los gobiernos sigan allanando el camino para que la inversión privada impulse la innovación y financie la infraestructura. Para los inversores que adoptan una visión holística de la megatendencia, las oportunidades pueden ser infinitas".
Chris Iggo, CIO Core Investments de AXA Investment Managers, ve que "es importante que los inversores vean que la política avanza en la dirección correcta", en relación a los acuerdos a los que se llegue en esta COP26.
“A pesar de la postura particular de los gobiernos y de la política en torno a la COP26, existe un impulso considerable en el sector privado sobre el tema del cambio climático en Europa, en Estados Unidos y, más recientemente, incluso en Asia", advierte por su parte Ostrum AM (filial de Natixis Investment Managers).
Más allá de los compromisos gubernamentales, "es la sensibilización de la sociedad civil, las empresas y las autoridades locales la que hace posible que se produzcan avances concretos en la lucha contra el cambio climático".
Bruce Duguid - Jefe de Implicación Corporativa de EOS en Federated Hermes, considera que "es importante intensificar la implicación corporativa para garantizar que las empresas realicen cambios".
Casi un tercio de las mayores compañías europeas que cotizan en bolsa se han propuesto alcanzar la reducción de emisiones a cero para 2050
"Estos incluyen la supervisión demostrable del cambio climático por parte del consejo de administración, la remuneración de los ejecutivos alineada con el cumplimiento de los objetivos de cero emisiones, la ausencia de grupos de presión contrarios a los objetivos de París y la garantía de una 'transición justa' para los empleados y las partes interesadas", explica Duquid.
Y continúa: "Con el tiempo, queremos ver un aumento de los ingresos alineados con las taxonomías verdes, en línea con los requisitos de información sobre finanzas sostenibles".
Nueva estrategia empresarial
Otro informe, el de la consultora Bain & Company, “Beyond COP26: An Action Plan for CEOs” analiza cómo cada vez más empresas abordarán su propia transición en cuanto a sus emisiones de carbono con la misma orientación a resultados que cualquier otra transformación estratégica. Dependerá de cómo se aceleren las medidas globales para hacer frente al cambio climático.
En su opinión, muchas empresas han anunciado planes ambiciosos para reducir sus emisiones, en algunos casos hasta llegar a cero, pero son pocas las que están haciendo grandes progresos para convertir esos objetivos en acciones.
Y como los impuestos al CO₂ y los esquemas de comercio de emisiones globales de gases de efecto invernadero seguirán creciendo, propone cuatro iniciativas que podrían ayudar: integrar la transición del carbono en la estrategia, encontrar formas de rentabilizar las inversiones en la reducción de las emisiones de carbono, incorporar esta transición en el día a día del negocio e implicar a los mandos intermedios.
El ciudadano medio está cambiando su percepción y su conciencia sobre la amenaza que supone para su vida el cambio climático
Una regulación más estricta con las emisiones, una mayor exigencia para que las empresas informen sobre sus riesgos climáticos, objetivos más ambiciosos en reducción de emisiones y más holísticos (Alcance 1, 2 y 3) y el escrutinio de los inversores serán determinante en las decisiones de inversión.
La Iniciativa Net Zero Asset Managers reúne a 128 gestores de fondos con 43 billones de dólares bajo gestión en un compromiso de tomar decisiones de inversión que respalden el objetivo de cero emisiones netas para 2050 o antes.
Y por último, están las expectativas de los clientes. El ciudadano medio está cambiando su percepción y su conciencia sobre la amenaza que supone para su vida el cambio climático. Si se hace cada vez más notable su preocupación, es evidente que la atención se desplazará a la fijación de objetivos más que a la de los resultados.