La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado que un solo equipo, formado por un médico y una enfermera, tuvo que atender el pasado 2 de noviembre a un total de 97 pacientes, seis de ellos graves, en el Punto de Atención Continuada (PAC) del centro de salud de Fuensalida (Toledo).

Una situación que generó "momentos de gran tensión ante la demora en la asistencia sanitaria" y que obligó a la Policía Local de Fuensalida a acudir al lugar para "calmar a los allí presentes".

Por ello, CSIF reclama que el PAC de Fuensalida "cuente con al menos dos equipos con un facultativo y personal de enfermería, ya que de manera habitual tiene una alta frecuentación, sobre todo en fines de semana y festivos".

El sindicato, que ha informado de que el actual equipo del PAC se encuentra a la espera de mantener una reunión con la Gerencia de Atención Primaria de Toledo, ha recordado también que "dotar de equipos suficientes a los PAC es una obligación del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (SESCAM), no solo para ofrecer la adecuada atención asistencial, sino también para evitar situaciones como las vividas el pasado fin de semana".

El pasado mes de octubre el alcalde de Fuensalida, José Jaime Alonso, ya dirigió un escrito dirigido a la directora general de Atención Primaria del SESCAM, María Ángeles Martín, y al delegado provincial de Sanidad en Toledo, Jaime David Corregidor, un refuerzo del servicio médico en el centro de salud de esta localidad toledana y que se incrementase el número de profesionales "a la mayor brevedad" para asegurar "una correcta atención a los usuarios".

Según el consistorio, los vecinos consideran que, "colapsados por el aumento constante de la población, las citas médicas se retrasan en el tiempo, ocasionando graves perjuicios para los usuarios", lo que "se agrava intensamente con situaciones de bajas sin cubrir, personal médico que se encuentra de vacaciones sin designar sustituto alguno que atienda su consulta o la próxima jubilación de uno de los médicos de familia".