Víctor Andrés García Belaúnde, abogado y político peruano de extensa carrera, ha donado a la Real Fundación de Toledo una serie de documentos relacionados con el escultor Victorio Macho.
Se trata de una cartera de mano con documentos, adquirida en una tienda de antigüedades de Lima. Contiene fotografías inéditas del escultor en su niñez y juventud, junto a otras de su familia, “un auténtico álbum personal de Victorio Macho antes de su reconocimiento como artista”.
Según informa la Real Fundación, “es una documentación importante para el archivo del escultor porque además de cubrir su faceta más personal, nos ofrece información de una etapa cronológica, de la que el archivo tiene ciertas lagunas, o bien porque la documentación nunca existió o por haberse perdido en la Guerra Civil española”.
Conservación y difusión
La donación ha sido motivada tras considerar que la Real Fundación de Toledo es la institución que mejor puede velar por la conservación y difusión de la documentación. Se llevó a cabo aprovechando una visita de García Belaúnde a España.
En Roca Tarpeya fue recibido por Jesús Carrobles, vicepresidente ejecutivo del Patronato de la Fundación, y llegó acompañado de su nieta y un grupo de personalidades de su país. En concreto, José Antonio García Belaúnde, exministro de Asuntos Exteriores y embajador; María del Carmen Alva Prieto, presidenta de la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso y hasta hace unos meses presidenta del Congreso; Alfredo Barnechea, intelectual que se postuló a la Presidencia de la República; y los alcaldes de los distritos de San Martín de Porres y de Jesús María, Julio Chávez Chiong y Jorge Quintana García Godos.
Segunda donación
Se trata de la segunda donación que la institución recibe este año. La primera fue de la mano de Jaime Ucrós, que aportó la maqueta de la figura de La Piedad del Monumento a Menéndez Pelayo, pieza que heredó de su madre Julia Barrós, hermana de Zoila, viuda del escultor.
“La Real Fundación de Toledo está sumamente agradecida por estos actos tan generosos que enriquecen el archivo personal de Victorio Macho y su colección artística, en definitiva, el legado que con tanto empeño dejó el escultor en Toledo para disfrute de todos”.