Aplazado el juicio por el asesinato de una mujer en Las Ventas de Retamosa (Toledo)

El juicio por el asesinato de una mujer de 41 años en 2018 en Las Ventas de Retamosa (Toledo) y el intento de asesinato de su hijo, que tenía 12 años, por parte de un hombre contratado por un matrimonio, ha sido suspendido por la incomparecencia de una de las acusadas y queda aplazado hasta el 12 de septiembre.

Fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha han informado de que, si bien sí se ha procedido a la elección del jurado popular como estaba previsto este lunes, el inicio de la vista oral, que iba a durar en principio hasta el 1 de julio, se aplaza hasta el mes de septiembre porque una de las acusadas no se ha presentado.

El Ministerio Fiscal, en su escrito de acusación, ha pedido 44 años de prisión para el autor material del asesinato, que también está acusado de tenencia ilícita de armas y robo, y 40 años de prisión para el matrimonio por inducción al asesinato, así como tres años de cárcel para otros dos acusados de encubrimiento.

El principal acusado y el marido del matrimonio se encuentra en prisión desde 2018, mientras que los demás implicados están en libertad.

La víctima había trabajado para ellos

La víctima había trabajado para la familia del matrimonio acusado pero hubo desavenencias debido a "determinadas conductas extramatrimoniales" de la esposa que ella había presenciado y de las que no quiso informar al marido, que tuvo un "comportamiento amenazador".

De hecho, tenía una pistola con la que amenazaba a esta mujer, que tenía dos hijos menores y que ya había dicho en su círculo cercano que si algo le ocurría sería culpable el matrimonio.

Como consecuencia de esta situación, los patriarcas del entorno de estas personas, de origen merchero, acordaron el destierro del marido y la esposa, de lo que responsabilizaron a la mujer que más adelante fue asesinada.

El matrimonio acusado y sus cuatro hijos se marcharon de Las Ventas de Retamosa y se establecieron en Badalona (Barcelona), porque la esposa tenía una hermana en San Adriá de Besos, la misma localidad en la que pasó su infancia el principal acusado y a escasos 12 kilómetros de Moncada y Reixach, donde este acusado residía junto a su pareja, que también será juzgada por encubrimiento.

Según el fiscal, el matrimonio contactó con ellos para que asesinaran a la mujer y a su hijo, y el 4 de mayo de 2018 el principal acusado viajó hasta Las Ventas de Retamosa en un turismo robado en Getafe (Madrid), interceptó el vehículo en el que iban la mujer y su hijo, logró que ella detuviera el coche y con una pistola efectuó siete disparos por la ventanilla del conductor.

El hijo resultó herido

La mujer falleció y su hijo, de 12 años, resultó herido en una pierna, mientras el autor se marchó del lugar y llegó hasta Torrejón de la Calzada (Madrid), donde tuvo ayuda de otras personas para huir en otro coche, también robado, tras haber incendiado el anterior.

Sin embargo, tuvo un accidente de circulación en la localidad de Fuente Robles (Valencia) y huyó del lugar aunque fue localizado esa misma tarde en la estación de autobuses de Utiel (Valencia) , portando la pistola con cargador (sin municionar) que provocó la muerte de la víctima, según el fiscal una vez estudiados los casquillos.

El dinero acordado por el asesinato fue ingresado en la cuenta de la pareja del autor material; en total, 200 euros el 5 de junio de 2018, 150 euros el 3 de julio y 50 euros el 30 de julio. 

La hija pide justicia

Una vez aplazado el juicio, la hija de la mujer asesinada, en declaraciones a los medios de comunicación a las puertas de la Audiencia provincial de Toledo,  ha manifestado que "al final de todo" solo espera "justicia, nada más".

A preguntas de los periodistas, Sheila Bautista ha dicho que recuerda los hechos "muy mal y triste" y que le parece "todo muy injusto", sobre todo que después de cuatro años y un mes a su madre, de momento, no se le haya hecho justicia.

Ni ha hablado, ni quiere, con los acusados, ha dicho, y sobre el estado de su hermano, a quien también intentó matar el asesino de su madre y que en esos momentos tenía 12 años, ha señalado que está "muy mal", en tratamiento psiquiátrico y que ha tenido ya "varios intentos de suicidio".

Cuando ocurrieron los hechos en 2018, Sheila Bautista ha especificado que ella se encontraba en Madrid con su abuela para pasar las fiestas de la comunidad vecina y que tenía previsto volver el 4 de mayo. No obstante, ha asegurado que se acuerda "perfectamente" de todo y que hay detalles que no puede revelar hasta que concluya el juicio.

En cuanto a que algunos de los acusados se encuentren en libertad, ha apuntado que puede entender por una parte que no puedan estar cuatro años en prisión preventiva pero ha remarcado que le produce "inseguridad y miedo" y que este lunes es el día que ha sentido más miedo porque les ha visto la cara a los acusados.