Un cajero automático, el mejor regalo de reyes para tres pequeñas localidades de Guadalajara

Las localidades de Checa, Villanueva de Alcorón y Maranchón, situadas en una de las zonas más despobladas de España en la provincia de Guadalajara, tienen cajeros automáticos desde este miércoles.

La instalación de estos terminales ha sido posible gracias al convenio firmado entre la Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural (Recamder) y Prosegur que permite que los residentes en estas tres localidades ya puedan disponer de servicios financieros sin tener que desplazarse a otras localidades con sucursales bancarias.

Como informa Recamder en nota de prensa, el objetivo de estos cajeros es luchar contra la exclusión financiera que padecen los habitantes de esta y otras comarcas así como asegurar el acceso a servicios bancarios.

En 2022, los municipios de Salmerón y Auñón fueron los primeros de la provincia de Guadalajara que se acogieron a esta iniciativa dentro del mismo convenio que ha devuelto los derechos financieros a los vecinos de Checa, Villanueva de Alcorón y Maranchón.

Todos estos cajeros han sido financiados con fondos europeos que el grupo ADR de Molina de Aragón ha gestionado por concesión de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha y que además han contado con la colaboración de todos los ayuntamientos beneficiados, ya que los consistorios han cedido las instalaciones donde se ubican los cajeros y se han hecho cargo de las obras de adaptación a los mismos.

"Creemos que era un servicio básico y necesario a la población", aseguraba el presidente de Recamder, Jesús Ortega. En esta línea, también valoró positivamente las actuaciones llevadas a cabo por los miembros que conforman la Red Castellano Manchega de Desarrollo Rural asegurando que "los Grupos de Acción Local nos dedicamos a mejorar la calidad de vida de los ciudadanos".

Los cajeros a Checa, Villanueva de Alcorón y Salmerón llegan después de más de seis meses sin ningún tipo de servicio financiero en las localidades tras el cierre de las últimas sucursales bancarias. Esto obligaba a los vecinos de una decena de municipios a desplazarse a Sacedón, Cifuentes y Molina de Aragón a realizar sus transacciones habituales.