Piden a los vecinos de un pueblo de Castilla-La Mancha "rodeado" por el COVID que no salgan de casa
El Ayuntamiento de Ledaña (Cuenca) ha pedido a sus vecinos el autoconfinamiento voluntario para contener la incidencia de la pandemia en la localidad, tras registrar una de las mayores tasas de contagios de la provincia y de la región en la última semana.
En declaraciones a Efe, la alcaldesa de Ledaña, la popular Clara Plaza, ha explicado que desde hace unos días ha reclamado a sus vecinos que no salgan a la calle si no es estrictamente necesario, mientras que a la Consejería de Sanidad ha solicitado que decrete el nivel 3 de medidas especiales “para que la gente se contenga”.
En la última semana se han registrado 26 casos nuevos, pero el número de positivos ronda el medio centenar en esta localidad de algo más de 1.500 vecinos, según ha detallado Plaza.
Plaza ha explicado que la guardería está cerrada tras el positivo de las trabajadoras y a los niños les han realizado las pruebas PCR, tras desplazarse allí una unidad del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha (Sescam), según ha precisado.
Desde este viernes han suspendido todas las actividades extraescolares, han cerrado la biblioteca y en el Ayuntamiento está en servicios mínimos presenciales.
Plaza ha reconocido que muchos de sus vecinos “se han relajado” tras la baja incidencia de la pandemia hasta este mes de noviembre, y ha apuntado que se han celebrado cumpleaños y alguna comida de jóvenes.
También ha señalado que Ledaña está ubicada en La Manchuela conquense, una comarca “rodeada” por la pandemia, dado que muchas de las localidades del entorno están en nivel 3 de medidas especiales desde hace semanas.
Entre ellas, Quintanar del Rey, Casasimarro o Motilla del Palancar, en Cuenca, y Villamalea y Madrigueras en Albacete.