Ya se sabe la pena que piden para el acusado de matar a su padre en Socuéllamos
La Fiscalía pide 13 años y medio de prisión para el acusado de matar a su padre tras una discusión en mayo de este año en Socuéllamos (Ciudad Real), calificando los hechos como constitutivos de un delito de homicidio doloso.
Para determinar la pena, la Fiscalía ha tenido en consideración la atenuante de trastorno mental y los agravantes de parentesco y de abuso de superioridad, según se desprende del escrito del Ministerio Fiscal, al que ha tenido acceso Europa Press.
El escrito además explica que los hechos se remontan al 14 de mayo de este año, cuando antes de las 3.30 horas, C.I.G. mantuvo una discusión con su padre, D.I.A., en la cocina de la vivienda donde el acusado convivía con sus padres y dos de sus hermanas. Se da la circunstancia, continúa el escrito, que el acusado mantenía una mala relación con su progenitor, de 81 años de edad, y ya habían tenido una discusión el día anterior.
Tras la pelea, el padre se dirigió a su dormitorio, que estaba situado en la planta baja de la vivienda, y fue seguido por el acusado, que llevaba en la mano una navaja que había cogido en la cocina. Ya en el dormitorio, el escrito sitúa que hubo un primer forcejeo entre padre e hijo, y en el transcurso del cual este último se puso encima de su padre sobre la cama, agarrándole del cuello. Finalmente cayeron ambos al suelo donde prosiguió la pelea, momento en el que el acusado cogió nuevamente la navaja y asestó al anciano al menos cuatro golpes dirigidos al cuello ocasionándole dos heridas incisas en el lado izquierdo del cuello, una de 6,5 centímetros y otra de dos, además de otras dos superficiales de tres y otra de 1,5 centímetros, así como diversas lesiones.
De este modo, el anciano sufrió un shock hipovolémico como consecuencia de la herida de 6,5 centímetros, que seccionó el paquete vascular del lado izquierdo del cuello, lo que le ocasionó la muerte, que se sitúa entre las 3.30 y las 4.00 horas del 14 de mayo.
Tras lo sucedido, el escrito asegura que el acusado huyó de la vivienda a través de una ventana cuando notó la llegada de la Guardia Civil y que fue detenido a primera hora de la tarde del 14 de mayo, concretamente a las 16.35 horas en un edificio en obras muy próximo a la vivienda donde ocurrieron los hechos. El acusado se halla en prisión provisional desde el día siguiente a lo sucedido.
El escrito especifica que el acusado padece un retraso mental ligero que, unido al consumo de unas cervezas, esa misma noche, aunque no le impedía conocer la ilicitud de sus actos y actuar conforme a dicha comprensión, si que limitaba ligeramente su capacidad para comprender las consecuencias de sus actos.
Además precisa que la diferencia de edad entre padre e hijo, unida a que este último portaba una navaja, determinó una situación de desventaja física para el primero de ellos, que facilitó al acusado la ejecución del hecho.