El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha subrayado este martes que el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, "no rindió cuentas" ante el Congreso Federal de Sevilla, al que llegó "ya elegido" y sin más intervenciones que la última, en el cierre del cónclave, y "en plan espectáculo".
"La realidad es que el secretario general no hizo esa rendición de cuentas", ha dicho Page en una entrevista en el programa Espejo Público de Antena 3. El líder castellano-manchego, en su tono crítico habitual con el sanchismo, ha cuestionado que la "decisión fundamental" del Congreso, que era la de elegir al secretario general, llegase ya tomada.
En estas condiciones, ha opinado Page, "a partir de ahí todo lo que signifique cuestionar su trabajo, ya es un poco contradictorio" y "el debate es muy difícil que se produzca" y tampoco lo "autocrítica".
Modelo para la resistencia
"Normalmente, los secretarios generales presentan y defienden su gestión, y hay un debate", ha dicho Page, cuestionando que el modelo actual del PSOE y de la Ejecutiva se plantea "como una extensión del secretario general". Un modelo que ha definido como "centralizado" y que considera "extraordinario para la resistencia", aunque, en todo caso, ha deseado "lo mejor" a la nueva Ejecutiva.
"Pero si, además, el candidato a secretario general no interviene hasta el final, sólo para la clausura, si se plantea en plan espectáculo-mitin, el debate es muy difícil que se produzca", ha reprochado el líder de los socialistas castellano-manchegos, que, como se sabe, evitó estar precisamente en la foto de la ovación final y no asistió al discurso de cierre de Sánchez.
En este sentido, el presidente de la Junta ha recordado que el Congreso Federal de Valencia, hace tres años, fue una cita en la que el PSOE "quería volver a la centralidad, plantearse la moderación y huir de las radicalidades", pero "hemos llegado a Sevilla con la intención contraria salida de Valencia", una intención que ha calificado como "un tanto radical".
Todo lo decide Sánchez
Al respecto, el líder autonómico cree que se ha transitado de un modelo en el que el PSOE era "reconocible, con cabeza y otros órganos, con intermediación", de forma que la voluntad del partido "era la suma de mil cosas", a otro en el que "una vez que elegido el secretario general, casi todo lo demás lo decide de él".
Por otro lado, Page ha rechazado la idea de que él sea la única voz crítica que existe en el PSOE actual, ya que ha asegurado que "a poco que uno se dejara caer por el Congreso, se notaban muchísimas corrientes de fondo".
El barón autonómico ha dejado claro, en todo caso, que lo importante del Congreso eran las ponencias, que, a su juicio, "han llegado mucho más moderadas y reconocibles que lo que aventura la gestión del Gobierno".
Riesgo de ruptura
De hecho, ha destacado Page que en el texto aprobado "no aparece la palabra indulto, ni amnistía", lo que a su entender se ha debido a que "se han querido evitar problemas", mientras que en lo relacionado con la financiación autonómica, ha considerado que "han servicio los debates que se han mantenido en público", pues ha augurado que si se hubiera planteado la validación del acuerdo del PSC y ERC "no iba a salir adelante" y que incluso "había riesgo de ruptura".
Asimismo, y ante la pregunta de si tiene miedo de su futuro político ya que se le ve como la única voz crítica dentro del PSOE, García-Page ha matizado que él no es crítico a todo, sino que distingue entre los debates relacionados con la táctica del partido y de política nacional y que "afectan a qué camino emprender y cómo arreglar un problema", como por ejemplo el de la vivienda, y cuando se discute "no qué hacer, sino lo que somos".
"Los pactos con independentistas no han cuestionado qué camino tomar, sino que han supeditado al fin de gobernar hasta la esencia de lo que somos", ha reprochado el presidente de Castilla-La Mancha, que ha señalado que él opina sobre lo que tiene que ver con la comunidad autónoma, como la Constitución y cuestiones de política territorial, y ha lamentado que cuando habla "muy bien del Gobierno no suele ser noticia".
Al final de su carrera
En cualquier caso, Page ha valorado que también otros miembros del partido levantan la voz cuando consideran que "se está tocando el meollo, lo que somos" en el PSOE.
Así, ha sostenido que no es la "única opinión diferente" dentro del PSOE y ha alertado de que "se equivocan mucho en Madrid" si transmiten esa imagen de él y de hecho, "a poco que uno se dejara caer por el congreso, se notaban muchísimas corrientes de fondo".
Con todo, García-Page ha subrayado que a él no se le va a ver "en conspiraciones" y ha afirmado que está "casi al final" de su vida política, de forma que a lo único que aspira es a no tener "que tachar nada" de su currículo.
Elogios a González y Óscar López
Tras elogiar la "enorme capacidad política" del ministro Óscar López, elegido para sustituir a Juan Lobato al frente del PSOE madrileño, Page ha opinado que "dará la batalla, eso lo tengo muy claro".
Finalmente, el titular del Ejecutivo castellano-manchego ha vuelto a reivindicar la figura de Felipe González, señalando que su marcha "fue un drama para todos". "Hay un antes y un después con Felipe González en la historia de España en muchos aspectos, pero la del PSOE por completo".
Preguntado por las palabras del ministro Óscar Puente, que aseguró que no necesitan a González porque ya tienen "al mejor líder y al mejor proyecto", García-Page ha indicado que esta cuestión no le preocupa, porque "no busca protagonismo".