El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (TSJCM), Vicente Rouco, ha pedido la creación de 41 plazas para jueces y magistrados en la región.
Durante su discurso en el acto de apertura del Año Judicial, Rouco ha precisado que desde que llegó al cargo en 2004, Castilla-La Mancha ha pasado de 149 a 215 jueces y magistrados, pero de estas 66 nuevas plazas, solo 13 se han producido en los últimos cinco años cuando "la carga de trabajo se ha multiplicado".
En este sentido, ha asegurado que la plantilla judicial de Castilla-La Mancha es, "una vez más", la última de todos los Tribunales Superiores de Justicia en número de jueces por habitante, con 10,1 jueces por cada 100.000 habitantes.
De igual modo, ha reclamado nuevos edificios como los de los juzgados de Tomelloso (Ciudad Real), Torrijos e Illescas (Toledo), en una situación "especialmente crítica" éste último.
Aumento de los casos
Durante la lectura de la Memoria Judicial de 2023, Rouco ha incidido en el aumento de la presión con un 3,4 % más de casos ingresados en los juzgados de la región respecto al año anterior.
En concreto, ha precisado que en 2023 entraron en los juzgados castellano-manchegos 230.997 asuntos, lo que supuso "mucha carga de trabajo, muchas necesidades y demasiados pocos recursos".
El presidente del TSJCM ha incidido en esa "desproporción" entre "las necesidades que existen" y "una carga de trabajo cada vez mayor" que provoca que "la Justicia no funcione lo bien que podría hacerlo".
Además de este aumento de la litigiosidad, durante 2023 también se produjo un conflicto laboral que llevó al personal de justicia a una huelga que también afectó al funcionamiento.
"Ha sido una conflictividad larga y que ha afectado muy negativamente a la labor de los órganos judiciales, provocando retrasos y aumentando la pendencia de los órganos judiciales", ha señalado Rouco, quien ha especificado que 203.882 casos quedaron pendientes de trámite al término de 2023, un 16,4 % más que en el año anterior.
Otro efecto negativo que a su juicio deriva de esa conflictividad laboral es la disminución de la "capacidad de respuesta", ya que durante todo el año quedaron resueltos 196.497, un 5,5 % menos.
En este sentido, Rouco ha explicado que este dato se ha dado pese a que ha habido un aumento del número de sentencias dictadas, 56.006, gracias al "esfuerzo tan grande que se hizo después de las huelgas para recuperar el atraso".
Civil, audiencias y Mercantil
De todas las jurisdicciones, el presidente del TSJCM ha señalado que la Civil es "la que más está sufriendo" por un crecimiento del 8,75% -103.020 asuntos nuevos- y una tasa de resolución que se ha reducido en un 5,6%.
En cambio, las audiencias provinciados han visto disminuir el número de asuntos ingresados. No obstante, las huelgas "han la remisión de asuntos en apelación en estos órganos judiciales", ha puntualizado Rouco.
En lo Mercantil, ha destacado la recuperación del ritmo de ingreso anterior a la pandemia poniendo especial atención en la provincia de Toledo donde el crecimiento de los concursos ha sido "descomunal" con 550 en total seguida de Guadalajara con 253. Albacete con 251, Ciudad Real con 185 y Cuenca con 92.
Instrucción, Penal y Social
En los juzgados de instrucción, Vicente Rouco ha detallado que "se observa un ligero aumento, del 2,1%", con 86.955 nuevos asuntos, mientras que "la tasa de resolución ha disminuido levemente". Así quedaron resueltos 77.883 asuntos en estos juzgados y 45.141 en trámite.
En los juzgados de lo Penal, la Memoria que ha presentado Rouco destaca la "importante disminución en la entrada de asuntos, del 21,5%", con 4.618 nuevos procedimientos en 2023, frente a los 5.880 de un año antes, una situación que Rouco ha vuelto a atribuir "a la incidencia de la huelga".
Por último, en lo Social, el presidente de TSJCM ha resaltado "las cifras elevadas, con el registro de 12.828 nuevos procedimientos".
Memoria de la Fiscalía
Por su parte, el fiscal superior de Castilla-La Mancha, Emilio Manuel Fernández, ha ofrecido los datos de su departamento donde se ha producido un aumento de los casos de violencia de género pese al descenso de las órdenes de protección.
En 2023, la región registró la muerte de dos mujeres asesinadas a manos de sus parejas o exparejas, una en Ciudad Real y otra en Toledo. Se trata de una cifra que ya se ha alcanzado en lo que llevamos de 2024 y que indica que "hay que seguir luchando".
"Hay que proteger más y acabar en la medida de lo posible con mayor urgencia", ha añadido, alertando de que la violencia de género digital también está al alza, "con más acoso, amenazas e insultos" a través de mensajería instantánea.
En este punto, ha alertado sobre los "problemas" ha supuesto la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal en su artículo 416 respecto a la posibilidad de que las mujeres no declaren contra su pareja o expareja, retoque legislativo que "no está produciendo los resultados esperados".
De esta manera, aunque la víctima ahora "no pueda retractarse" de lo declarado en un inicio, las declaraciones "se vuelven vagas e imprecisas y en ocasiones producen una sentencia absolutoria".
Por último, ha reclamado más especialización de los juzgados, toda vez que en Castilla-La Mancha solo hay dos específicos para violencia machista, uno en Albacete y otro más en Toledo.