"Un día histórico". Ésta ha sido la frase más repetida en la comparecencia que el presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-la Mancha, Emiliano García-Page, ha llevado a cabo en el Palacio de Fuensalida junto a las alcaldesas de Toledo y Talavera de la Reina, y a representantes de los municipios ribereños del Tajo para valorar el nuevo plan hidrológico 2023-2027 aprobado por el Consejo de Ministros que fija por primera vez en la historia unos caudales mínimos sobre el río más extenso de la península Ibérica.
García-Page ha reivindicado el uso de ese adjetivo, "histórico", porque como ha recordado "han sido muchos años de lucha en los que las oportunidades se iban quedando en el camino". Por encima de todo, ha celebrado que "el Gobierno de España haya decidido, coherentemente con las leyes, las directivas europeas y las sentencias que hemos ido consiguiendo, operar una decisión trascendente para todos" como que es que "el Tajo vaya a tener un caudal mínimo cuando era el único río de Euorpa que no lo tenía". "Sonroja que hayamos peleado tanto", ha puntualizado.
La decisión del Consejo de Ministros, que implica una firme apuesta por la desalación en detrimento de los aportes del trasvase Tajo-Segura en Levante, supone "terminar con una humillación histórica al río Tajo y a las tierras que baña", para el presidente castellano-manchego.
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En este tiempo, en el que según Page "nunca hemos vendido humo aunque nos hayan acusado de ello", ha asegurado que "no han faltado políticos en Castilla-La Mancha que en lugar de defender a nuestra tierra la han vendido".
En este sentido, ha sostenido que "se llegó a firmar un documento, el memorándum de la vergüenza, que tomaba por tantos a los ciudadanos de nuestra tierra". A los que "lo firmaron y lo aplaudieron siendo de aquí" les ha hecho "una reflexión, que no una petición: sería muy útil para su tranquilidad de conciencia pedir disculpas a la sociedad".
Agradecimiento al Gobierno de Sánchez
García-Page no ha dudado en dar las gracias al Gobierno de Pedro Sánchez por "ser el único Gobierno en toda la democracia que ha sido capaz de anteponer los intereses generales a otros más concretos", "sin mirar hacia otro lado ni hacer trampas con las sentencias del Tribunal Supremo". En este apartado, ha tenido palabras de especial elogio para la vicepresidenta tercera ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera por la "tenacidad" que ha puesto durante todo el proceso.
Llegado a este punto, el presidente castellano-manchego ha puntualizado que en sus negociaciones con Madrid "siempre han dejado claro que en su interés no estaba terminar con el travase, sino preservar la gestión agrícola en el conjunto del Levante español", aunque "es evidente que con medios diferentes y con una base absolutamente diferenciada de lo que ha sido siempre tradicional".
Y es que para García-Page "la gestion del agua en España es uno de los grandes desafíos, un problema de Estado" porque "la situación en el Levante es tan importante y supone tanto que hay que abordarla como un problema de país". Por ellos, ha apuntado que "la solución para una zona más poblada y con mayor poderío que Castilla-La Mancha no se le puede exigir solo a una parte de España".
Respecto a la fijación de los caudales mínimos ha desvelado que "han sido aportados por los técnicos de la confederación, que son quienes tienen que cuidar el río", ya que "nosotros pedíamos que fuesen más altos.
Para finalizar, García-Page ha hecho dos reflexiones, en la primera ha enfatizado que "después de 15 años de peleas para que se fije un caudal mínimo, esto no significa que el mínimo se convierta en el máximo" puesto que "un río no se puede topar".
En cuanto a la segunda, ha avanzado que pese a que "estos días serán difíciles y habrá ruido, tendremos la voluntad de pensar en el conjunto de España para llegar a espacios de consenso en materia de agua". Eso sí, ha subrayado que a partir de ahora, "partirán de una base sólida que hemos conseguido a base de pelear".
"El Tajo desemboca en el Atlántico, no puede hacerlo en dos sitios. Si entre todos nos esforzamos, podremos encontrar mecanismos para que haya soluciones que, costando dinero y esfuerzo, puedan conciliar mejor que lo que ha hecho el trasvase de la época de Franco", ha sentenciado.
Martínez Arroyo:"Las desaladoras son la solución"
Por su parte, el consejero de Agricultura, Desarrollo Rural y Agua, Francisco Martínez Arroyo, ha explicado que siete de los nueve planes de cuenca aprobados este martes por el Consejo de Ministros afectaban a Castilla-La Mancha y "en todos se ha tenido en cuenta nuestra postura", que ha sido "siempre la más solidaria con la cesión de agua para uso de boca y para los regantes, que son clave en nuestra sociedad".
El consejero no ha escondido que se trata de "un día feliz" en el que "se han reconocido los derechos de la España interior que representa Castilla-La Mancha, esa España muchas veces olvidada en la toma de decisiones".
Respecto al fondo de la decisión, ha recordado que "lo que ha hecho el Gobierno central ha sido aplicar las cinco sentencias emitidas por el Tribunal Supremo dejando a los técnicos que aplicasen los niveles de los caudales ecológicos".
Además, ha ahondado en que este nuevo plan de cuenca recoge que "las desaladoras sena la solución para el Levante, una solución lógica" además de recoger una inversión de "mil millones de euros para depurar las aguas del Jarama".
"Es muy difícil conseguir la cuadratura del círculo, pero aquí se ha conseguido y estamos muy orgullosos del trabajo realizado", ha añadido.
La emoción de Milagros Tolón
La alcaldesa de Toledo, Milagros Tolón, no ha escondido que cuando esta mañana ha conocida la aprobación del plan de cuenca se ha "emocionado" por "muchos años de lucha y trabajo". En este sentido ha celebrado que este plan "no solo beneficia a Toledo, Talavera y los pueblos ribereños, sino a toda España porque por primera vez se toma en serio un problema tan grave como el cambio climático".
La primera primera edil ha reconocido sentirse "muy orgullosa de defender el caudal ecológico del Tajo y la reducción del trasvase" porque esto significa "luchar por el principal patrimonio mediambiental de Toledo, su río Tajo".
Más allá de los caudales, Tolón ha celebrado que la decisión del Gobierno central también afecte a la depuración de las aguas procedentes de Madrid "poniendo en funcionamiento tres grandes depuradoras que no están funcionando ahora mismo y que permiten que el Jarama vierta aguas totalmente contaminadas".
La alcaldesa capitalina ha cerrado su intervención haciendo un alegato a "la España seca, a la España interior que siempre ha sido solidaria y que quiere seguir siéndolo defendiendo los derechos de su tierra" y al Tajo "un río se bañaron mis padres y donde por desgracia, ni nosotros ni nuestros hijos han podido hacerlo".
Tita García: "Se ha hecho justicia hídrica"
Desde Talavera de la Reina, su alcaldesa Tita García Élez ha celebrado que en "este día histórico y tan importante se haya hecho justicia hídrica". Bajo su punto de vista, "a través de los caudales ecológicos, se da un golpe al memorándum de la vergüenza, que actuaba en contra de los intereses de Castilla-La Mancha, permitiendo que el río vuelva a serlo y se comporte como tal".
Y es que, a su juicio "se devuelve al río el agua que no se ha debido quitar, desembalsando más metros cúbicos para que el Tajo no presente la imagen que tiene".
Respecto a las críticas desde Levante, ha subrayando que "no nos pueden tachar de insolidarios porque hemos sido solidarios y lo seguimos siendo". Eso sí, ha puntualizado que "avanzamos hacia un objetivo final, decir alto y claro que el trasvase tiene que terminar".
Ribereños: "Hoy se empieza a dignificar al Tajo"
La ronda de intervenciones la ha cerrado Borja Castro, presidente de la Asociación de Municipios Ribereños de Entrepeñas y Buendía, quien ha agradecido al Gobierno regional que "no nos haya dejado huérfanos en este camino, el de empezar a dignificar al Tajo, a nuestros pueblos y a nuestros vecinos".
En el atril de Fuensalida, Castro ha remarcado que "el Gobierno ha cumplido con su obligación de fijar los caudales ecológicos planteando una fuerte inversión en desalación que aminorará la dependencia del Levante del trasvase".
De esta decisión, que ha reconocido "mucha gente la tildará de política" ha subrayado que simplemente se ajusta a "cumplir la ley y la directiva europea".
Por último, el representante de los ribereños ha querido cerrar su intervención con una reflexión: "Éste no es el final de esta lucha, pero con otro Gobierno, quizá la realidad sería otra".