Ni el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ni el presidente de Castilla-La Mancha, el socialista Emiliano García-Page, han escondido nunca su sintonía institucional y personal. Ambos dirigentes políticos entienden el servicio público desde un mismo prisma, el de la moderación y la centralidad, y nunca se ha escuchado una mala palabra del uno sobre el otro... sino todo lo contrario. Pero las últimas declaraciones que le ha dedicado el castellano-manchego al expresidente de Galicia y actual jefe de la oposición en España han generado un importante revuelo.
Durante una entrevista con el periódico El Mundo, García-Page ha asegurado sin ambages: "Es muy difícil que la sociedad española vea como insolvente a alguien que ha sido avalado no solo por las urnas, sino que desde Galicia ha mantenido un tipo de relación institucional con el Gobierno de España más que razonable en los últimos años". "No comparto ni me identifico con ese apelativo de insolvente, ni creo que sea acertado", ha añadido el presidente de Castilla-La Mancha, que también ha defendido que "los gobiernos no pueden buscar el papel de víctima".
Una nueva muestra de afecto hacia Núñez Feijóo que, en esta ocasión, también supone una crítica abierta a la estrategia de desgaste que ha iniciado Pedro Sánchez contra su máximo oponente político y previsible rival por la Moncloa en las próximas elecciones generales. Hay que recordar que el presidente del Gobierno, durante el cara a cara que mantuvo en el Senado con el líder de la oposición, sustituyó el debate energético y económico por otro sobre la historia del PP y la supuesta falta de competencia e integridad de su oponente.
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Tal y como publicó EL ESPAÑOL, Sánchez aprovechó en el Senado la potestad de disponer de tiempo ilimitado para hacer una réplica a Núñez Feijóo muy dura, descalificándole como político, como gestor y como aspirante a la Presidencia del Gobierno. "Insolvencia y mala fe" fueron las expresiones utilizadas reiteradamente en su segunda intervención para descalificar al líder del PP y hacer oposición de la oposición. Algo que no gustó en absoluto al socialista García-Page, uno de los barones díscolos del PSOE sanchista.
Agradecimiento de Feijóo
"Se lo agradezco mucho al señor Page. El señor Page sabe mucho de esto", ha señalado este lunes el propio Núñez Feijóo al ser preguntado al respecto por los periodistas tras un desayuno informativo protagonizado por el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno. En la misma línea, el coordinador general del PP, Elías Bendodo, ha apuntado además que los 'populares' echan de menos "al PSOE serio de toda la vida en 40 años de democracia" y ha diferenciado el "sanchismo" del socialismo. "Cuando vuelva el socialismo seguro que nos podemos sentar con ellos", ha agregado el número tres del PP ante los medios.
Sin embargo, la presidenta de la Comunidad, Isabel Díaz Ayuso, se ha expresado en términos muy distintos casi simultáneamente. Durante una intervención en esRadio ha asegurado que el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, está intentando dejar "entrever que él no tiene nada que ver" con las decisiones del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, simplemente porque llega el final de su legislatura y eso le beneficia electoralmente.
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"Vas a ver a pocos socialistas ahora mismo alzar la voz por mucho que por lo bajini bien que se abochornen de lo que está sucediendo, como hace hoy el señor Page, que intenta extender el asunto dejando entrever que él no tiene nada que ver con las decisiones de Pedro Sánchez", ha sostenido. En este sentido, ha hecho hincapié que Sánchez fue la persona que le puso "ahí" y que "durante cuatro años, salvo honrosas ocasiones", no ha dicho "absolutamente nada".
Castigo en las urnas
García-Page, en la misma entrevista en la que se ha referido a Núñez Feijóo, también ha ahondado en las declaraciones que el pasado lunes realizó durante un foro turístico organizado en Toledo por EL ESPAÑOL - El Digital CLM, donde aseguró que "el 95 % de los problemas de deterioro del PSOE tienen que ver con sus socios y pactos". Ahora, además, ha al PSOE que si el Gobierno de España sigue "con las mismas compañías", en alusión a los socios parlamentarios, "es evidente que va a haber un castigo" en las urnas.
"Le he dicho alguna vez al presidente que el toreo natural es por la izquierda, aunque para conseguir triunfos necesitas torear con las dos manos", ha declarado el castellano-manchego García-Page, que ha calificado como "negativo" el "permanente debate entre miembros del Gobierno", algo que "no genera certidumbre" a los ciudadanos.
"Hay que dejar las reglas claras al socio minoritario", ha asegurado García-Page, que durante la pasada legislatura fue el primer presidente autonómico de España en incorporar a miembros de Podemos en su Ejecutivo. Sin embargo, ha puntualizado: "No tuve más remedio que aceptar que quisieran entrar en el Gobierno cuando inicialmente nos habían repudiado, pero les dejé claro desde el primer momento que mi objetivo era ganarles y echarles". En 2019, el socialista ganó las elecciones autonómicas en Castilla-La Mancha con una contundente mayoría absoluta y Podemos se quedó fuera del Parlamento regional.