Las últimas "bofetadas" de Pedro Sánchez a Page que resuenan en Castilla-La Mancha

El portavoz del PP en las Cortes de Castilla-La Mancha, Francisco Cañizares, ha puesto de manifiesto la "nula fuerza" que a su juicio tiene el presidente autonómico, Emiliano García-Page, con el Gobierno estatal de Pedro Sánchez, quien a su juicio está pagando la "traición" del líder regional con "bofetadas" a la Comunidad Autónoma.

En rueda de prensa, Cañizares ha acentuado que "el gran éxito" hasta el momento es haber conseguido que no vengan inversiones a la región", en referencia a la paralización del proyecto del Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos nucleares en Villar de Cañas.

Ahora, ha dicho, "Sánchez dedicará seguramente ese dinero a contentar a sus socios de Gobierno separatistas e independentistas". "Esa es la gran tristeza para Castilla-La Mancha", ha lamentado Cañizares, quien ha agregado como ejemplo de otra "bofetada" de Sánchez a Page el hecho de que "se marcara como objetivo acabar con el trasvase y al día siguiente aprobaran otro más".

Según Cañizares, García-Page "se ha dedicado más a los enredos" que a gobernar, lo que como consecuencia "perjudicará" a los intereses de la región.

Otro ejemplo expuesto por Cañizares son las obras de la circunvalación de Puertollano, donde ya se estaban "moviendo máquinas" pero "se han parado" desde que gobierna Pedro Sánchez.

Ha insistido en la "carencia de fuerza" de García-Page para con el Gobierno estatal, como a su juicio demuestra el hecho de que los castellano-manchegos con puestos de responsabilidad en el Ejecutivo de Sánchez "son contrarios" al presidente autonómico.

"Casos de corrupción"

De otro lado, Cañizares ha puesto el acento de nuevo en los "casos de corrupción" que en la región afectan a miembros socialistas, como son los casos de Puertollano o "el descontrol en las cuentas públicas de Guadalmez".

En este punto, se ha preguntado si hay algún otro miembro del PSOE implicado en la operación del caso Cerrú. "¿Los que fueron detenidos coinciden con algunos de los imputados por el asunto de la plaza de toros?", ha cuestionado.

En caso de ser así, "esto deja claro que no son casos aislados ni temas puntuales. Esto retrata una situación endémica en el Ayuntamiento de Puertollano, algo que García-Page tendría que solucionar ya".

Según sus palabras, la ciudad de Puertollano está en "declive" por estar en manos de un Gobierno socialista con estos antecedentes.

Por contra, ha comprometido el trabajo de su partido para que a Castilla-La Mancha "le penalice lo menos posible los gobiernos de García-Page y de Pedro Sánchez". "Trabajaremos por que Castilla-La Mancha avance, pero por desgracia está en situación de inferioridad", ha lamentado.

Un PP "desaparecido"

Por su parte, la portavoz del PSOE de Castilla-La Mancha, Cristina Maestre, ha lamentado que el PP de la región esté "desaparecido" a causa del proceso congresual que culmina este fin de semana para dirimir la Presidencia a nivel nacional, algo que considera "malo" para la Comunidad Autónoma.

En rueda de prensa, ha indicado que el Gobierno regional "necesita" en la oposición a un partido "centrado en defender Castilla-La Mancha".

"Una cosa es estar en un proceso de primarias y estar reñidos y otra es estar desaparecido. No sé si están en fase de pánico o aterrados por verse al borde del precipicio en función de lo que pase", ha agregado.

Además, Maestre ha celebrado las "diferencias" que a su juicio "ya se empiezan a notar" en beneficio de la Comunidad Autónoma desde el cambio de Gobierno en La Moncloa, aseverando que con Pedro Sánchez al frente del Ejecutivo ya se ha empezado a "atender" a la región, mientras que bajo el mandato de Mariano Rajoy "sólo se invertía en basureros" en territorio castellano-manchego.

Según ha dicho en rueda de prensa, se ha dejado atrás un Gobierno "cuya mayor inversión para la región era un basurero nuclear" y que "no invertía nada más en Castilla-La Mancha, empeñándose en un ATC que nadie quería", ha recordado. Para la dirigente socialista, el cambio principal es que se paraliza el proyecto después de "muchos años peleando" desde la región para que no se ubicara en Cuenca.

En este punto ha recordado que el proyecto ha venido acompañado de "escándalos" y "oscuridad" en torno a algunas concesiones. "Eso es lo único que ha habido aquí con el PP. Lo de siempre, lo malo para Castilla-La Mancha y muchos listillos que querían aprovecharse".

También ha tenido palabras para hablar del trasvase, apuntando que los socialistas castellano-manchegos "no han cambiado" el discurso y siguen rechazándolo de plano. "Estamos optimistas porque pensamos que el Gobierno de Sánchez sí que va a apostar por un uso racional del agua y de las infraestructuras para racionalizarla, entre ellas las desaladoras", ha señalado.