García Molina habla sobre Fernando Barredo, su máximo 'enemigo interno' en Podemos CLM

El líder de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina, explica que el futuro en el partido de Fernando Barredo, que fue suspendido cautelarmente de militancia tras ser acusado de colocar a la esposa de un empresario a cambio de 6.000 euros, "depende de la investigación judicial".

"Hay una investigación policial en marcha, hasta que no tengamos los resultados de la investigación policial no se puede tomar una decisión", asevera en una entrevista con Efe García Molina, quien se enfrentó a Fernando Barredo en el proceso de primarias del partido para elegir secretario general.

Ante la petición de dimisión del Círculo Podemos de Toledo a todos los miembros del Consejo de Coordinación al considerar que la sanción no fue "ajustada a la normativa del partido", García Molina considera que "el tema es muy complicado porque hay una investigación policial y porque seguramente habrá juicios".

Por ello, insiste en que "cuando haya una resolución judicial se obrará en consecuencia, sea a favor o en contra de la persona suspendida".

"Cuando se aclare, si se resuelve positivamente para la persona afectada, se le reincorpora y ya está, como se hace en todos los partidos, en eso no somos distintos", afirma.

Si bien, apunta que "si realmente hay una resolución contraria" al código ético "ya no habrá suspensión cautelar" y "a lo mejor estamos hablando de medidas más contundentes".

Con ello, defiende que lo que han hecho ha sido "aplicar la ley de partidos, ni siquiera de Podemos", de modo que "cuando hay causas que pueden sugerir que hay algún tipo de conducta que puede ser cuestionable para el código ético o para el partido, se hace una suspensión cautelar hasta que se aclare".

"Esa situación todavía no se ha aclarado", insiste el líder regional de Podemos, quien subraya, no obstante, que "en Podemos Castilla-La Mancha los procesos internos ya han pasado" y "la gente votó".

Contundentes resultados

"El resultado fue claro", afirma García Molina, quien fue reelegido tras lograr el 57,22 % de los votos emitidos por los inscritos en la formación morada en la región, mientras que el diputado David Llorente reunió el 33 % de los apoyos y Fernando Barredo, el 9,02 %.

Con todo, afirma que su objetivo ahora es "gobernar la región, seguir creciendo y seguir haciendo leyes en el Parlamento".

"De verdad, creo que haríamos todos bien en dejar los asuntos internos un poco en paz hasta que llegue el próximo momento, hay algunos que parece que están solo concentrados en eso", opina.