La culpa fue de los “baby boomers”
Escribía hace meses sobre la “posverdad”, ya saben, eso de distorsionar deliberadamente una realidad, para manipular creencias y emociones con el fin de influir en la opinión pública y en actitudes sociales. Pues bien, esa misma sensación de manipulación social de la realidad es la que muchos estamos sintiendo al personalizar, por parte de políticos y medios de comunicación y difusión, una posible quiebra de las pensiones, en una generación. Es una especie de decir, sin decir, que la culpa será de los “baby boomers”.
Por si alguno no ha escuchado hablar de ellos, los “baby boomers” somos, pues me incluyo, aquellos nacidos en España entre 1955 y 1975. Al parecer, como si de un gol eurocopero diario de Iniesta se tratara, nuestros progenitores se dedicaron a tener niños como churros, así, a lo loco, y claro, ahora, nos empieza a tocar jubilarnos y al Estado pagarnos las pensiones.
Ya lo ha dicho nuestro ministro Escrivá, habrá que subir medio punto lineal a todos los trabajadores y empresarios de forma que se pueda recuperar el dinero de la llamada 'hucha de las pensiones' y se puedan afrontar, a partir del año 2023, las pensiones de la generación del 'baby boom'.
Vamos a ver si yo me aclaro. Yo pensaba que cuantos más ciudadanos trabajando, con mejores sueldos, salarios o ingresos, más cotización y más ingresos en la “hucha de las pensiones”, por lo que si los que hasta ahora no se han jubilado, es que siguen cotizando e ingresando en esa hucha de pensiones. A ver si va a resultar que en vez de ser los “baby boomers” los culpables, vamos a ser los héroes que las han mantenido hasta ahora.
En definitiva, a alguien hay que culpar. Me pregunto si no serán las malas políticas concatenadas que han ido destruyendo empleos y puestos de trabajo en vez de crearlos, las dificultades a las medianas y pequeñas empresas, la precariedad laboral, la bajada de salarios, las dificultades para que un joven acceda a su primer puesto más allá de los veintisiete o treinta años y además con un reconocimiento laboral y económico muy por debajo de su nivel de cualificación, el envejecimiento de la población y las escasas ayudas a las familias o en favor de la natalidad, e incluso el saqueo de las mismas huchas en aras de fines más necesarios, y así un largo etcétera.
Pus no, el problema no es pagar a los “baby boomers”, es quién pagará a los que vinieron y vienen después. De momento estos “baby boomers” van a pagar 400 euros en videojuegos y plataformas digitales a todos los nacidos en 2005, y residentes en 2022, que no se nos olvide, aunque Escrivá siga preocupado por nuestras pensiones.
¡A ver si la culpa va a ser del Chá, chá, chá!
Satur Acosta (ANPE)