Justo y legal, pero extemporáneo

Leo con cierto estupor, sorpresa e indignación que la Concejalía de Tráfico del Ayuntamiento de Toledo ha impuesto una multa de 500 pavos a la Asociación de Vecinos “La Mezquita”, organizadora oficial de la Carrera Nocturna de Toledo que habitualmente se celebra en octubre. Parece que el motivo es que los atletas, o muchos de los atletas que participaron en ella, echaron fuera del contenedor previsto para ello las botellas del avituallamiento instalado entre los dos puentes de San Martín.

El Ayuntamiento dejó un bidón de basura a los organizadores accediendo a su petición, pero muchos botellines de agua se dejaron por el suelo, etc. Este parece ser el motivo de la sanción, según me dice el organizador principal, Rubén Lozano Guerra. Ya hace dos o tres años tuvo otro problema en el Valle y le quisieron cortar la carrera. Yendo a los hechos, cabe decir que la sanción se ajusta a la legalidad y es justa. Pero dicho esto, cabe decir que no sólo ha sucedido en esa carrera. Sucede en todas, pues son cientos los botellines que se usan y el atleta, pendiente de correr no de ser limpio o sucio, en ese momento, lo arroja a los extremos de la vía para que lo recojan después. Es decir, es una práctica habitual que todo aquel que ha corrido una carrera de este tipo o es habitual, sabe que se actúa así. Nadie se escapa a ello. Sin embargo, creo que no hay antecedentes de que a algún organizador o responsable subsidiario se le haya multado por ello.

Me pregunto, el Ayuntamiento no sabe que en el Paseo de Recaredo, en la Peraleda, en varios lugares más, se hace el botellón con frecuencia, dejan muchísima más mierda y que se sepa, no se ha multado a nadie. Para más inri la carrera Nocturna es de carácter solidario y gran parte de la recaudación se destina a financiar una enfermedad rara como es Nieman Pick. ¿Los consumidores, no de botellines de plástico sino de cristal se salvan y están exentos de pagar multas? ¿Con qué criterios, pues grosso modo parece que existe cierto afán de fastidiar?

Me consta que Lozano ha recurrido la multa, y espero que por las circunstancias que concurren  en el caso y le rodea, la autoridad lo tenga en cuenta y al final no tenga que pagar. Ello, no exime que se pidan responsabilidades a los atletas, que se les penalice en la inscripción con un euro más o lo que haga falta, pero, repito, aunque la sanción me parece que es justa y legal, resulta bastante extemporánea, pues nadie ha pagado nada por tal motivo. Creo que se han pasado un poquito.