Por una Universidad de Castilla-La Mancha independiente y suficientemente financiada
No creemos que la recuperación de la Sindicatura de Cuentas sea una buena idea, pero sí estamos totalmente de acuerdo con el rector de la Universidad de Castilla-La Mancha, Miguel Ángel Collado, cuando reclama independencia del poder político y financiación estable y suficiente para la institución académica que dirige. Ya hemos editorializado al respecto en diversas ocasiones y volvemos a insistir en ello: la Universidad regional es uno de los pilares imprescindibles de Castilla-La Mancha como comunidad autónoma y necesita, por tanto, no sólo una clara y bien definida independencia sino además un modelo de financiación que no esté sometido a los vaivenes de la coyuntura política y sea perfectamente estable y garantizado.
Valoramos, por tanto, de forma muy positiva la posición del rector Collado de reclamar de la Junta esos valores de independencia y financiación, al margen de que consideramos que pueden y deben existir otros mecanismos de control financiero de la Universidad regional distintos de la Sindicatura de Cuentas y que permitan garantizar ese modelo independiente que defiende la propia institución universitaria. El Gobierno de Castilla-La Mancha y particularmente el consejero de Educación, Ángel Felpeto, tienen ahora la responsabilidad de establecer un sistema económico para la Universidad regional que garantice esos principios y libere a la institución de la pesada carga de la inestabilidad y el sometimiento a la pura coyuntura.
Confiamos, en este sentido, en que Felpeto y Collado terminarán entendiéndose y que encontrarán la fórmula para poner fin al actual choque entre ambas instituciones. Hay que garantizar la viabilidad, la financiación, la calidad, la estabilidad y el futuro de la Universidad de Castilla-La Mancha y hacerlo de una forma responsable y respetuosa con los valores que toda institución académica debe tener.