La roja y la falangista
La roja y la falangista son dos hermanas pertenecientes a la aristocracia española: Constancia y Marichu de la Mora Maura, hijas de Germán de la Mora Abarca y Constancia Maura Gamazo y nietas de Antonio Maura y Constancia Gamazo, familias enraizadas en la política y en los negocios y representantes de una alta burguesía característica de los años treinta del siglo pasado.
Lo normal es que ambas y en circunstancias más “normales” hubieran tenido simpatías políticas por partidos conservadores o liberales, pero en la España de los años treinta lo “normal” estaba muy lejos de la realidad cotidiana y si ya su tío Miguel Maura, desde una postura de derecha liberal, “dio la campanada” con su integración en el Gobierno Provisional de la República que nació del 14 de abril de 1931, las dos hermanas representarían la polarización extrema que en muchas familias, desde la aristocracia a los sectores más populares, se dio en aquellos años. Bien es verdad, que viniendo de la clase social de la que venían las dos hermanas, la rareza es que una de ellas, Constancia, acabara como militante del Partido Comunista de España, mientras la otra, Marichu, se integraba de una manera más natural en el contrapunto fascistoide que fue la Falange Española de José Antonio Primo de Rivera; al fin y al cabo, un aristócrata rodeado en un primer momento de hombres provenientes de las clases altas madrileñas.
En ambos casos, la periodista e historiadora Inmaculada de la Fuente traza dos retratos marcados por dos personalidades bien diferentes. Constancia, una mujer independiente, con un matrimonio pronto fracasado y que encuentra en Ignacio Hidalgo de Cisneros, que acabará la Guerra Civil dirigiendo la Aviación Republicana, el hombre de su vida y con el que compartirá exilio hasta su temprana muerte en Méjico en un accidente de automóvil, y, Marichu, la falangista de primera hora, cercana al círculo fundacional de Falange y musa inspiradora de Dionisio Ridruejo, con el que acabará compartiendo evolución política en los últimos años de su vida. Dos trayectorias, en fin, que solo se podían dar en una España de pasiones, extremismos y soluciones totalitarias y fáciles.
Como es normal, la vida de Constancia ha llamado siempre mucho más la atención sobre los historiadores y aficionados a las cosas de la Guerra Civil. Ella misma obtuvo un cierto éxito con un libro de memorias publicado en inglés en 1939 y que fue traducido a diversos idiomas, y al español con el título de “Doble esplendor. Autobiografía de una mujer española” y del que existe una edición actual publicada por la editorial Gadir en 2004. Tampoco faltan documentos y bibliografía y referencias sobre ella como queda patente en la completa bibliografía que la autora nos da al final del libro, aunque las referidas a Marichu tampoco se queden atrás.
En definitiva un ejercicio de “vidas paralelas” que sirve a la autora para narrar una época de nuestra historia a través de dos hermanas que personifican, como en tantos otros casos, el drama personal que supuso la gran tragedia española del siglo XX.
Inmaculada de la Fuente. La roja y la falangista. Dos hermanas en la España del 36. Editorial Planeta, 2006. 454 páginas. Bibliobús de la Sierra de San Vicente.