El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha aprobado el techo de gasto no financiero para el próximo año, primer paso para poner en marcha la tramitación de los Presupuestos Generales de la Comunidad Autónoma. Así, el tope de gasto se irá a 7.562 millones de euros, un 14,2 % más, lo que supone contar con 942 millones más que en el presente ejercicio.

En rueda de prensa, el consejero de Hacienda y Administraciones Públicas del Gobierno de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha detallado que son 6.176 millones de ingresos propios, un 4,1 % menos que en 2020. De estos, 5.303 millones vienen de las entregas a cuenta y la liquidación de 2019, dato comunicado a la región por parte del Ministerio de Hacienda.

Otros 873 millones de euros con los que contará la región vienen a cuenta de los ingresos por impuestos que gestiona de manera autónoma --sucesiones, donaciones, transmisiones patrimoniales o algunas transferencias del Estado como el fondo de compensación-- lo que supone una variación a la baja del 15 %.

Ruiz Molina ha recalcado que la situación "no tiene precedentes" debido a la crisis económica derivada de la sanitaria, extremo a tener en cuenta para la elaboración de los presupuestos.

Malas previsiones

En cuanto a las previsiones económicas, se ha roto la tendencia de crecimiento sostenido que venía experimentando la región en los últimos años. De 2015 a 2018 se había aumentado un 11,8 % en términos económicos, con una media similar al resto de comunidades autónomas.

Las previsiones de 2019 ya contemplaban desaceleración de la economía como la incertidumbre del Brexit, la guerra comercial entre Estados Unidos y China o el estancamiento de países emergentes, según ha explicado.

Por ello, las tasas de crecimiento de la economía a nivel regional, nacional y mundial se rebajaban antes de sufrir el impacto de la crisis del coronavirus.

El objetivo es poder contar con el presupuesto aprobado a inicio de enero de 2021, sin descartar tener que prorrogar las actuales cuentas por un "breve espacio de tiempo".

Es un techo de gasto "absolutamente diferente" porque incluye conceptos novedosos con respecto a años anteriores, todo por la "excepcionalidad" económica en la que se incurre debido a la actual crisis sanitaria.

La respuesta que la Unión Europea está dando en cuanto al gasto público es una de las grandes diferencias que recogerá este presupuesto, tal y como ha dicho.

Con todo, se ha utilizado la "máxima prudencia" para acertar en las decisiones a tomar. Por eso, se calcula que el PIB caerá un 8,35 %, tres puntos menos de lo se prevé que caiga la economía nacional según el marco aprobado por el Consejo de Ministros, que la estima en el 11,2 %.

Todo ello consecuencia de la estructura de la región. Se ha tenido en cuenta que los sectores afectados por restricción de movimiento y reducción de la actividad, como puede ser turismo y hostelería, tienen menor peso en la economía regional que en el peso nacional, razón por la que los efectos son menores.

Los sectores que han aguantado mejor, como agricultura o industria manufacturera, tienen más protagonismo en Castilla-La Mancha que en el resto del país, lo cual amortigua la caída.

Además, el peso de la administración pública es más importante que en el conjunto del país, otra de las razones que hacen que la caída no sea tan severa como en el plano nacional.

También en 2021 se estima una crecimiento del 4,2 % con un diferencial de 3 puntos con respecto a la previsión del Gobierno nacional, del 7,2. Esto es porque si la caída es menor, el levantamiento tiene que ser más suave. "Hemos sido más conservadores que otros estudios que prevén un crecimiento del 5 %".

Casi 400 millones de euros desde Europa

Si bien el incremento del déficit en el que incurrirá el Gobierno regional será del 2,2 %, ha recordado el consejero que la mitad se financia por parte del Estado, razón por la cual solo será achacable a la región el 1,1 %, 445 millones.

De los 12.000 millones que recibirá España por parte de la Unión Europea con cargo a los fondos 'Next Generation', ha reparado en que 10.000 irán a parar a las comunidades autónomas. A la región le debería corresponder un 4,9 % de ese total en los próximos dos ejercicios, en total 392 millones de estos fondos "que irán a sanidad, educación, mantenimiento del empleo y a fomentar la inversión empresarial, las líneas de gasto permitidas en este recurso".

Aún así, esta financiación puede variar a tenor de los proyectos a presentar ante la Comisión Europea para poder captar más fondos, razón por la que esta cifra no se ha incluido en el techo de gasto, pero sí entrará "alguna estimación" en los presupuestos de 2021.

Ha abundado Ruiz Molina en que pese a las afirmaciones del PP de que se subirán los impuestos, queda demostrado que "no habrá aumento de la presión fiscal", cumpliendo así el "compromiso de legislatura".

"Lo ha dicho Page y lo digo yo como consejero. No se va a aumentar la presión fiscal. Nuestras previsiones es que se reducen los ingresos que gestionamos en un 15 %. El PP tendrá que aclarar por qué lo dice", ha abundado.

Ruiz Molina, que ha dicho que espera que las cuentas salgan por "unanimidad" en las Cortes, ha asegurado que no tienen "ni trampa ni cartón".