En el Real Madrid están tranquilos tras el anuncio realizado en Brasil sobre el futuro de Carlo Ancelotti. El técnico italiano tiene apalabrado dirigir a la Canarinha a partir de 2024, cuando termine su vínculo con el club blanco. No hay nada rubricado, pero sí la firme idea de ambas partes de unir sus caminos con el Mundial de 2026 en el horizonte.
Entre Ancelotti y el Real Madrid hay una relación de confianza y este no es un asunto que genere fricción. Además, el italiano, como hizo ya este año cuando el club le reafirmó en el cargo, antepondría la renovación con la entidad que preside Florentino Pérez si le ponen una oferta sobre la mesa a final del curso 2023/2024.
La sensación, sin embargo, es que tras la temporada que viene se cerrará definitivamente un ciclo. La despedida de Ancelotti se entendería junto a otras esperadas, principalmente las de Luka Modric y Toni Kroos. El Real Madrid, con el compromiso de su entrenador con Brasil, tiene cierta libertad para explorar durante el año opciones para ejercer de director de orquesta del nuevo proyecto.
En el Real Madrid circulan varios nombres, con Raúl como el comodín que espera en el Castilla otro año más, pero los tiros van hacia otros sitios: Xabi Alonso y Zinedine Zidane. El donostiarra y el francés son los favoritos para suceder a Ancelotti en el futuro más probable, con Ancelotti abandonando la 'nave blanca' dentro de un año.
Una apuesta y un seguro. Xabi y Zidane son dos perfiles de entrenador opuestos por el momento de sus carreras, pero gustan como técnicos y, además, tienen la confianza de la directiva para asumir el timón del vestuario del primer equipo.
Xabi Alonso, bajo lupa
Xabi Alonso está dando los pasos indicados para algún día entrenar al Real Madrid. Tras sacarse el curso de entrenador de la UEFA, empezó su carrera en Valdebebas dirigiendo al Infantil A de La Fábrica. Un año después se fue a Zubieta para dirigir al filial de la Real Sociedad y en su segunda temporada al frente lo subió a la División de Plata. Siguió otro año más y luego se tomó un descanso de unos meses.
En octubre de 2022 recibió la llamada de un Bayer Leverkusen en horas bajas. El equipo alemán, histórico de la Bundesliga, era 17º en puestos de descenso. 29 partidos después a las órdenes del técnico de Tolosa, estaba sexto en liga y semifinales de la Europa League. El milagro se hizo realidad al obtener el billete para la próxima edición de la mediana de las competiciones de la UEFA.
Como entrenador, Xabi sigue una filosofía que encaja con la forma de jugar al fútbol del Madrid: sacar el balón jugado desde atrás, a veces arriesgando, para jugar la mayor parte del tiempo en campo rival. Su Bayer es un equipo muy ofensivo (69 goles en 37 partidos) que sabe sacar partido del talento joven (solo el Stuttgart alineó en Alemania un equipo con menos media de edad) y de sus estrellas (principalmente Florian Wirtz y Diaby, ambos vinculados al Madrid).
Xabi aprendió de entrenadores como el propio Ancelotti, Jose Mourinho, Pep Guardiola, Rafa Benítez o Toshack y está triunfando en su primera etapa en la élite. Firmó un contrato hasta junio de 2024, por lo que será el momento para dar otro salto en su carrera y el Real Madrid, que le vigilará durante el curso, aparece como uno de los posibles candidatos.
Zidane, en la recámara
En cuanto a Zidane, el Real Madrid no olvida al entrenador de las tres Champions consecutivas y la liga de la pandemia. La segunda etapa del francés en el banquillo del primer equipo no acabó de la mejor manera, pero las aguas se han ido templando y las relaciones vuelven a ser buenas entre el club y una de las grandes leyendas de su historia.
El Madrid quiere a Zidane cerca. El galo, sea en el papel que sea, es un valor único en el fútbol. Quiere volver a entrenar, pero todavía no ha aparecido el proyecto que esperaba. Le Graët renovó a Didier Deschamps como su última labor al frente de la Federación Francesa y las puertas de Les Bleus se volvieron a cerrar para Zizou hasta 2026.
A nivel de clubes, Zidane ha rechazado el PSG en reiteradas ocasiones y la Juventus, un destino posible para él, decidió apostar por Allegri. Mientras que la Premier League no es un destino que le atraiga, todos los caminos vuelven a conducir al Real Madrid. Sin ocupar un banquillo, volverá a estar a tiro si Ancelotti, por una mala racha de resultados, no acabara la temporada.
Zidane llegaría a un Madrid nuevo, con Vinicius y Rodrygo convertidos en estrellas y jugadores que no tuvo como Camavinga y Tchouaméni -franceses como él- y Bellingham -que le idolatra y ya le conoce-. Eso sin contar la posibilidad de dirigir por fin a Kylian Mbappé, del que recientemente dijo que "algún día" coincidirán como entrenador y jugador. Las puertas se abren lentamente para este viejo y glorioso conocido.