En el Real Madrid existe cierta preocupación tras lo visto en la Supercopa de España. El equipo atraviesa por un 'valle' de rendimiento, naturales en enero para el club blanco, pero que puede tener fatales consecuencias si no se ataja a tiempo. Uno de los focos se pone sobre una de sus estrellas: Luka Modric.

Es una realidad que el croata está fundido. En Arabia Saudí se ha podido comprobar. En las semis frente al Valencia salió desde el banquillo y en El Clásico, siendo titular, duró solo 64 minutos en el campo. Es el jugador del Real Madrid de los que fueron a Qatar al que más están afectando las secuelas mundialistas.

En el Mundial disputó 653 minutos, más que ningún otro madridista. Jugó incluso más que Tchouaméni (621'), finalista siendo titular con Francia durante todo el torneo. Modric lideró a Croacia hasta el bronce, pero su físico ha pagado las consecuencias en este mes de enero. No hay que olvidar que en Qatar jugó dos prórrogas.

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Modric fue de los últimos en incorporarse al Madrid tras el parón. El plan fue que se incorporara poco a poco. Jugó tres minutos contra el Valladolid y se quedó en casa para el partido de Copa contra el Cacereño. Luego fue titular en la derrota contra el Villarreal, un encuentro que para el croata guarda muchas similitudes respecto al del Barcelona de este domingo.

Tanto en La Cerámica como en El Clásico, Modric no ganó ningún duelo. Es una estadística que pesa y define su estado de forma. En ambas derrotas le costó encontrarse sobre el campo, participando poco en la creación del juego. Ante el Villarreal también fue cambiado poco después de cumplirse la hora de partido.

Los minutos de Modric

Modric, a sus 37 años, cuajó una buena primera parte de temporada y es el nivel que debe volver a encontrar. Ese nivel que hacía natural y lógica su renovación de contrato, que acaba en junio, por una temporada más. Lo sigue siendo y así se ve en el Madrid, que continúa viendo al croata como una figura clave dentro y fuera del campo. Solo hay que llegar a un acuerdo, que no se prevé complicado de cerrar.

El debate está en cómo gestionar los minutos de Modric mientras pasa por este bache. Las últimas veces que ha jugado de titular junto a Kroos no ha funcionado y Ancelotti tiene varias alternativas, aunque este domingo eligiera sustituir a Eduardo Camavinga en el descanso antes que al '10' o al '8'. Los veteranos fueron quitados más tarde.

Una opción es Fede Valverde, quien está temporada ha abandonado más de la cuenta el centro del campo para jugar de extremo. El uruguayo, aún así, es el futuro de la medular blanca. También Camavinga, aunque volviera a ser cambiado en el descanso, aparece como alternativa.

La mejor noticia para el centro del campo del Madrid, sin embargo, será la vuelta de Tchouameni. El francés se perdió la Supercopa por una lesión en el sóleo y el equipo le echó en falta en el pivote. A partir de su vuelta, con una mejoría progresiva de Modric y un Kroos brillante durante toda la temporada, el centro del campo titular del Madrid volverá a reconstruirse para el tramo final del curso.