Vuelta a la rutina. Se acabó el primer parón internacional de la temporada, el último antes de la disputa del Mundial de Qatar, y los clubes recuperan la normalidad. Al Real Madrid ya regresaron algunos internacionales el miércoles y este jueves lo hacen el resto, entre ellos Marco Asensio.

Antes de que Luis Enrique diera la lista, no muchos tenían esperanzas de que Asensio estuviera en ella. El motivo principal era la poca participación que había tenido en el Real Madrid: solo 47 minutos de los 810 que lleva disputados el equipo blanco en lo que va de temporada. Pero le llegó la llamada de la Selección.

Suele ser al contrario. Tener oportunidades y hacerlo bien en el club lleva a jugar con la selección. Con Asensio, esta vez, no. No jugar y estar en entredicho no evitó que fuera con España. En el parón ha sumado más minutos que todos los que lleva con el Madrid en nueve partidos. ¿Será un punto de inflexión para él?

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Asensio quiere volver a entrar en la rueda de los minutos en el Real Madrid. Ahora mismo, de los que cuentan -es decir, excluyendo a Mariano y compañía-, es el último de la lista. Anímicamente estaba dolido, frustrado, como dejó ver con su enfado durante el partido contra el Mallorca. La convocatoria de la Selección le hizo venirse arriba.

Luis Enrique le puso de titular el pasado fin de semana en el partido que enfrentó a España contra Suiza. Con el '10' a la espalda, Asensio jugó siendo el más adelantado del equipo. Es en esa zona en la que ha perdido la batalla en el Madrid contra Rodrygo o Hazard, los que han sustituido a Benzema durante su ausencia.

España perdió y los siguientes días, hasta que llegó el triunfo contra Portugal, se puso en duda la categoría del equipo. No la de Asensio, uno de los 'salvados' de la quema. Aún así, en Braga se quedó en el banquillo sin jugar. Es una prueba de lo inestable que es la situación actual de Marco, que jugó casi media hora y marcó un golazo contra el RB Leipzig y a los cuatro días apenas disputó cuatro minutos en el derbi madrileño.

Pero Asensio no se deja llevar. Quiere luchar en el Real Madrid y estar en el Mundial de Qatar, viéndose más cerca de esto tras entrar en la última lista antes de la del campeonato. Antes de saber si hay o no billete para él, le toca volver a ponerse el mono blanco de trabajo.

Un mensaje

Su zurdazo en Champions y su conducción en el gol de Alba ante Suiza son dos toques de atención de Asensio. A sus críticos, los que ven justo que tenga un papel 'residual' en el Madrid. No a Carlo Ancelotti, que cuenta con él y si no le ha podido dar más minutos es porque cree que hay otros por delante. La competencia es tan dura en el Madrid que para el italiano es difícil ser justo con todos.

Le será complicado a Marco ganar la batalla a Fede Valverde y Rodrygo, dos futbolistas con mejor rendimiento en el campo y claves en la planificación de futuro del club. No le queda más que pelear en cada oportunidad que tenga. En juego no está solo para él la llamada para el Mundial o su presente en el Madrid, también el futuro de su carrera.

En apenas dos días, a Asensio le quedarán solo dos meses para ser libre de poder negociar con quien quiera. Termina contrato con el Real Madrid en junio 2023 y el club blanco tiene claro que no le ofrecerá mejores condiciones que las actuales. Si Marco quiere seguir, no tendrá subida.

Sin una oferta sobre la mesa como la que él pide, Asensio ha de acumular minutos para llegar al mercado en una posición de privilegio. Tras el parón, está de vuelta en el Madrid para recuperar el crédito perdido.