Vallejo, el quinto en discordia: el central quiere ganarse un hueco en la rotación de Ancelotti

La carrera de Jesús Vallejo en el Real Madrid nunca ha sido fácil, pero el ex del Zaragoza no se rinde. El central de 25 años nunca ha gozado de una gran cantidad de partidos ni de minutos en el primer equipo del Real Madrid, pero ahora se encuentra ante el más difícil todavía.

Desde que llegó al equipo madridista, Vallejo tan solo ha jugado 27 partidos y ha acumulado hasta cuatro cesiones. El central debutó y se hizo capitán del Real Zaragoza con tan solo 17 años, lo que aprovechó el Real Madrid para anticiparse al resto de clubes y firmarle.

Sin embargo, durante este tiempo Vallejo ha cogido más experiencia fuera del club que dentro. Cuando el Madrid anunció su contratación le cedió un año más en Zaragoza. Después, marcharía directamente al Eintracht de Frankfurt a préstamo antes de pasar por Madrid.

Jesús Vallejo y Rodrygo durante un partido del Real Madrid Europa Press

En Alemania se vio una de las mejores versiones del defensa aragonés y el Real Madrid decidió hacerle jugador de pleno derecho de su plantilla para las temporadas 2017/2018 y 2018/2019. Una etapa en la que Vallejo vivió a la sombra de Sergio Ramos, Raphael Varane y Nacho Fernández.

Como la situación no cambiaba el club volvió a buscarle una salida en forma de cesión, esta vez hacia Inglaterra. El Wolverhampton fue su destino, pero a mitad de esa temporada, y con muy poco éxito, se revocó su cesión y terminaría la campaña 2019/2020 en el Granada.

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La experiencia en el equipo andaluz fue mejor, por lo que se quedó un año más en el conjunto nazarí. Allí volvió a encontrar Vallejo un buen nivel, por lo que retornó en este último curso al Real Madrid, una campaña en la que, de nuevo, no ha tenido demasiado impacto. Tan solo ocho partidos entre todas las competiciones.

Eso sí, cuando el Real Madrid le ha necesitado, incluso en sus peores momentos, ahí ha estado Vallejo. El zaguero disputó unos minutos importantísimos en la prórroga del partido de vuelta de semifinales de la Champions League frente al Manchester City ante la lesión de Eder Militao, y lo que se vio de Vallejo en esos minutos gustó y mucho.

Minutos de calidad

El internacional sub-21 con España se impuso al acoso de los jugadores 'citizens', especialmente en el juego aéreo, ganando todos los balones de cabeza que disputó. Unos minutos que le dieron confianza tanto a él como al cuerpo técnico.

Aun así, sabe que parte en desventaja con el resto de compañeros que le acompañan en la zaga. David Alaba llegó la pasada temporada y ya es el líder de la defensa. A sus 29 años, el heredero del número '4' en el Real Madrid ya muestra mando en plaza, llegó desde el Bayern con la experiencia de un veterano y los títulos de un campeón e hizo una pareja de centrales de máximo nivel con Eder Militao desde el primer día.

Eduardo Camavinga y Jesús Vallejo persiguen a Lei Wu Reuters

El brasileño es la otra pata del binomio. Militao ha evolucionado a pasos agigantados, especialmente en las últimas dos temporadas. Fue una importante apuesta del club, que le compró en el verano de 2019 por 50 millones de euros procedente del Oporto y, de momento, ha sido una pieza clave en la consecución de los tres títulos de este 2022: Liga, Champions y Supercopa de España.

Dos centrales que suponen una competencia mayúscula pero, por si fuera poco, el Real Madrid ha incorporado a Rudiger. El alemán es uno de los mejores centrales del mundo y ha llegado gratis al Santiago Bernabéu después de brillar en el Chelsea en las últimas campañas. Un fichaje de altura que refuerza la zaga y le deja menos espacio a Vallejo.

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El cuarto en principio debería ser Nacho. Un futbolista que siempre está cuando se le necesita y que, ya sea por lesiones o sanciones, acaba todas las temporadas con cifras importantes de minutos y partidos en sus piernas. En el caso de Nacho le ayuda mucho su polivalencia, ya que puede cubrir las bajas de cualquiera de las cuatro posiciones de la defensa.

Así, Vallejo quedaría en un quinto lugar que podría condenarle al ostracismo del banquillo el resto de la temporada. Desde el club siempre se ha agradecido su actitud y se le ha puesto el cartel de transferible sabiendo que no iba a tener un rol protagonista y cuando parecía que este verano iba a ser el último en Valdebebas, Vallejo ha decidido que prefiere quedarse en el Real Madrid.

Quiere seguir

La ambición del zaragozano es seguir peleando y buscarse su hueco en la rotación. Sabe que la temporada será de una exigencia máxima, el Real Madrid tiene que jugar seis competiciones y lo hará teniendo el Mundial de Qatar justo en medio, entre noviembre y diciembre.

Ese escenario tan cargado puede ser una de las bazas a favor de Vallejo, sabiendo que Ancelotti tendrá que rotar si quiere tener al equipo fresco durante todo el año.

Jesús Vallejo, en el entrenamiento del Real Madrid Real Madrid

Otro de los puntos que puede jugar a su favor es el cambio de sistema. Con la llegada de Rudiger no hay espacio para tantos centrales de perfil titular, pero si Ancelotti opta por un sistema con carrileros el Real Madrid jugaría con tres centrales, lo que le daría más margen para jugar minutos.

La otra situación que le abre la puerta de los minutos es la falta de un lateral izquierdo puro que sustituya a Mendy. Tras la marcha de Marcelo, el francés es el único jugador puro de esa posición, por lo que Ancelotti podría utilizar (ya lo ha hecho en alguna ocasión) a Alaba, Nacho o Rudiger como laterales, un movimiento de centrales hacia la izquierda que también podrían generar un espacio que podría aprovechar Vallejo.

Hasta el momento, Vallejo ha ido a la gira por EEUU con el resto del equipo y se ha entrenado como uno más, sin pensar en un posible futuro a corto plazo lejos del Real Madrid. De hecho, ha tenido sus oportunidades hasta el momento en la pretemporada, aunque no muchas. 30 minutos en el primer amistoso contra el Barcelona en Las Vegas y otros 30 minutos contra el Club América en San Francisco antes de que comience la temporada de manera oficial.