Carlo Ancelotti tiene a su disposición una plantilla muy completa para la temporada 2022/2023. Un equipo que, a pesar de haber ganado la Liga, la Champions y la Supercopa de España, no se ha conformado y ha traído dos refuerzos de altura, Aurelien Tchouameni y Antonio Rudiger.
En la mayoría de los puestos hay dos futbolistas por demarcación y de máximo nivel, por lo que la competencia será feroz, sin embargo, uno de los dilemas de Ancelotti no será solo los cambios hombre por hombre. La polivalencia de muchos de sus jugadores y la flexibilidad en los esquemas del italiano dando al Real Madrid multitud de opciones para desarrollar su pizarra.
Así, una de las grandes dudas para esta temporada será ver cuál es la disposición del centro del campo y del ataque, en especial de la banda derecha. En defensa parece que la línea de cuatro seguirá como hasta ahora, pero con la llegada de Rudiger y la polivalencia de Alaba también se valora la opción de los tres centrales y dos carrileros.
Antonio Pintus, Carlo Ancelotti y Luis Llopis, en Valdebebas
La temporada pasada el Real Madrid de Ancelotti 2.0 parecía partir con un 4-3-3 que durante los últimos años había sido casi inamovible en el Real Madrid. En este caso el inicio del año dio a Benzema, Bale y Hazard como titulares y a Rodrygo, Vinicius y Asensio como los primeros suplentes en las bandas, además de Mariano y Jovic como delanteros suplentes.
Sin embargo, esa disposición no duró demasiado tiempo. Pronto llegaron las lesiones de Bale y Hazard, que les apartaron del equipo y no consiguieron volver a entrar con regularidad el resto del curso. Además, Vinicius evolucionó mucho y muy rápido para asombro incluso de su propio entrenador, que hizo que el extremo izquierdo del ataque blanco para el carioca.
Valverde, el comodín
El futbolista charrúa ya había sido utilizado en el pasado como un cuarto centrocampista por la derecha. Una opción algo más conservadora en ataque, pero que le daba toda la libertad en ataque y liberaba de tareas defensivas a Vinicius y Benzema. Además, Valverde apoyaba físicamente a Modric, Kroos y Casemiro, centro del campo indiscutible de Ancelotti, pero que debido a la edad de sus integrantes necesitaban unas piernas frescas como las de Valverde para dar apoyo.
Sin embargo, Valverde también sufrió en la primera mitad de la campaña los infortunios de las lesiones, lo que afectó a su rendimiento. Así las cosas, Ancelotti fue alternando el 4-4-2 y el 4-3-3 dependiendo de los futbolistas que estuvieran disponibles.
Carlo Ancelotti celebrando la victoria con el Real Madrid
La parte positiva para el italiano era que el Real Madrid iba ganando distancia respecto al segundo clasificado en la Liga y la fase decisiva de la Champions aun parecía lejana. Pero cuando esta llegó, con toda su exigencia por los rivales y por lo apretado del calendario, Ancelotti tuvo que tomar una decisión.
Salieron ganadores de esta terna Valverde y Rodrygo, el primero como titular y complemento principal de la 'CMK', y el segundo como revulsivo en los segundos tiempos y jugador vertical que tuviera capacidad de ayudar en la faceta goleadora a Vini y Benzema.
[Un Real Madrid 'made in Los Ángeles': Ancelotti pasa examen a la galaxia]
El plan no pudo salir mejor, Valverde fue decisivo en toda la Liga de Campeones (asistencia en la final incluida) y Rodrygo fue decisivo en las eliminatorias contra Manchester City y Chelsea, en las que salvó al Madrid con sus goles.
El que se quedó algo atrás fue Asensio, futbolista que no ha acabado de romper en el Real Madrid y que ahora mismo vive un presente incierto. Forma parte de la plantilla, pero si llega una buena oferta el club optaría por la venta, ya que el jugador no ha renovado y acaba contrato en 2023.
Nuevas posibilidades
Ahora, con el inicio de la nueva temporada, todos parten de cero y algunas caras han cambiado. Bale y Jovic ya no están, Hazard parece recuperado y ha llegado Tchouameni para reforzar la medular, lo que le abre todas las puertas a Ancelotti.
La primera opción del entrenador podría ser volver al 4-3-3 con Vinicius, Rodrygo (o Asensio) y Benzema en ataque. En esa ecuación también podría entrar un Hazard que puede jugar en cualquiera de las posiciones de la delantera.
Carlo Ancelotti, en el banquillo del Wanda Metropolitano
De hecho, el belga parece una opción para el 'falso 9', aunque otra posibilidad sería que Ancelotti jugara con un 4-4-2 en forma de rombo (como hizo Zidane en la segunda parte de la 2016/2017 con Isco) en la que Hazard actuara de mediapunta por detrás de Vinicius y Benzema.
La última, y por la que Ancelotti se decantó en el último tramo de la pasada campaña, es la de usar un 4-4-2 clásico. Y aquí la lista de nombres y opciones de Ancelotti es larga: Casemiro, Tchouameni, Modric, Camavinga, Kroos, Valverde y Ceballos. Siete futbolistas que completan un centro del campo de primer nivel.
[Un Real Madrid de seis competiciones: así se prepara el equipo para su temporada más exigente]
Ahora entramos en el periodo de ensayo y error, ya que este mismo fin de semana el Real Madrid debutará en partido amistoso, pero no es un amistoso cualquiera, lo hará frente al FC Barcelona. El equipo culé llega más rodado tras jugar dos partidos, y el objetivo del Real Madrid es ir ganando sensaciones partido a partido.
Después de jugar contra el Barça, Ancelotti tendrá dos amistosos más (ante América y Juventus) para probar todas sus piezas y que esté todo listo para el 10 de agosto, cuando se juegue la Supercopa de Europa, y para el debut liguero frente al Almería, cuatro días después.