Se acerca el final de la temporada y con ello se va calentando la planificación del Real Madrid de la plantilla del curso que viene, el 2022/2023. Todo gira en torno al fichaje de Kylian Mbappé, ya cerrado, y el de Erling Haaland, en plena disputa, pero habrá más novedades. A expensas de las posibilidades que surjan en el mercado, el club blanco tiene un plan para completar el equipo.

Con todos los esfuerzos puestos en las dos grandes estrellas, el Madrid se reforzará con menos ruido en otras zonas. Es donde entran en juego los cedidos, los posibles repescados y hasta algún canterano, futbolistas que conllevarán poco o ningún gasto económico para equilibrar las cuentas junto a las importantes salidas que también se esperan en verano.

El primer nombre en la palestra es el de Fran García. EL BERNABÉU ya adelantó que el de Bolaños de Calatrava es el elegido para reforzar el lateral izquierdo ante la baja de Marcelo. El debate estaba entre él y el canterano Miguel Gutiérrez, pero la balanza se ha decantado por el primero por su rápida adaptación demostrada en su primer año en Primera División. 

Recuperar a Fran García saldrá barato. El Rayo ejerció el pasado verano una opción de compra por el 50% de los derechos del jugador, manteniéndose la otra mitad en posesión del Real Madrid. Con una cláusula de 10 millones de euros, su fichaje costaría como mucho cinco 'kilos' a la entidad merengue si no se negocia un precio inferior.

Los cedidos: Kubo y Odriozola

Otro verano más habrá que estudiar la situación de los cedidos. La pandemia ha ido reduciendo la lista de jugadores a préstamo que años atrás era mucho más nutrida. Esta temporada el Real Madrid tiene cuatro sin contar a gente de la cantera. Uno tiene otro año más de cesión, que es Brahim Díaz (Milan), y a otro se le buscará seguro otro préstamo tras dos años de mala experiencia, Reinier Jesus.

Los dos que restan tienen opciones de quedarse en el Madrid pasado el próximo verano. Uno es Take Kubo. Tras encadenar varias cesiones en Primera (Mallorca, Villarreal, Getafe y otra vez Mallorca), puede tener por fin su momento en el primer equipo merengue. Lo que se lo ha impedido hasta ahora ha sido el cupo de futbolistas extracomunitarios que completaban Vinicius, Rodrygo y Militao. El club espera que lo de Vinicius se acabe resolviendo pronto y se le haga sitio así a Kubo para probarse con la camiseta blanca.

Más fácil es lo de Álvaro Odriozola. Al lateral derecho le ha venido bien su cesión en la Fiorentina. Ha encontrado la estabilidad en su rendimiento y eso, sumado a la madurez en el campo que dan los años, le puede dar otro billete de vuelta al Real Madrid. Los problemas del equipo blanco en su carril diestro -ante las lesiones y el bajón de rendimiento del titular, Carvajal- le abren la puerta para el próximo año.

Hueco para la cantera

Habrá más huecos de menor calado a tapar. El Madrid confía en su cantera para llevar a cabo dicha labor y que algunos jugadores de La Fábrica vayan creciendo bajo la dinámica del primer equipo. El caso más claro es el del puesto de cuarto central, que dejará vacante Jesús Vallejo y probablemente ocupará Rafa Marín o Mario Gila, los titulares de Raúl en el Castilla.

En la baraja hay más canteranos con opciones. Por ejemplo, un Antonio Blanco para el que se esperaba ya presencia este año y que sí podría tenerla el curso que viene como reemplazo de Casemiro si no hay fichajes en esa zona. Otros como Sergio Arribas podrían salir cedidos para coger experiencia en Primera, caso también del mencionado Miguel Gutiérrez, y algunos podrían quedarse todavía en el filial, como Peter Federico.

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