El Camp Nou se preparó para acoger el esperadísimo partido entre el Fútbol Club Barcelona y el Real Madrid. El fútbol femenino era el gran vencedor antes del pitido inicial. Pero solo uno podía pasar a las semifinales de la Women's Champions League y ese fue el conjunto azulgrana. Después del 1-3 de la ida, en la vuelta volvieron a ganar las culés por 5-2 para el 8-3 global de la eliminatoria.
Hace unos años, el Barça Femenino jugaba en la ciudad deportiva ante poco más de 200 espectadores. Ahora, 91.553 aficionados se dieron cita en el Camp Nou para vivir El Clásico. Récord histórico en todo el mundo. Con un mosaico, mientras sonaron los himnos del Barcelona y de la Champions, reivindicando el fútbol femenino, el duelo dio inicio con figuras como Carles Puyol, Xavi Hernández o Jorge Vilda en las gradas.
Al contrario de lo que sucedió en el estadio Alfredo Di Stéfano, el control en los primeros compases del encuentro fue para el Barcelona. Sin poner en serios apuros a Misa Rodríguez, sí que Ivana Andrés tuvo que emplearse a fondo para sacar, de cabeza, un centro colgado desde la banda. Mapi León también lo intentó desde la frontal al rechace de un córner, pero el disparo de la central no encontró puerta.
A la segunda que tuvo, Mapi León no perdonó. Corría el minuto 8 de partido cuando la defensa firmó el primero en el Camp Nou con un gol desde la línea de banda. En lo que pareció un centro, llegó el 1-0. La central del Barça pilló desprevenida a una Misa Rodríguez que aunque intentó dar unos pasos hacia atrás, acabó viendo cómo el balón entró en su portería.
Con una intensidad más baja que en el partido de ida, el Real Madrid no pudo pelear la posesión al Barcelona. Sin en el Di Stéfano dominaron y evitaron las ocasiones de las culés, en el Camp Nou fue otra historia. Desbordadas, Lucía Rodríguez se llevó la amarilla tras una falta sobre Claudia Pina. Cogió el balón Graham Hansen, pero su lanzamiento se estrelló contra la barrera.
Otra vez Carmona
De lo que podía haber sido el 2-0 al 1-1. En la primera llegada de las blancas al área del Barça, Irene Paredes cometió penalti por una clara mano tras el chut de Olga Carmona. Vio la amarilla la central y ni siquiera lo protestó. Stéphanie Frappart no dudó al señalar el punto de los once metros. La propia Olga Carmona, que ya marcó en la ida, anotó el penalti y puso el empate en el luminoso.
Pitó la afición como pocas veces en el penalti, pero la '7' del Real Madrid Femenino tiró de sangre fría para ajustar el balón al palo ante la estirada de Sandra Paños. Con el empate, el partido entró en una nueva dinámica con más juego en el centro del campo y menos internadas en el área rival.
Al borde de la media hora, Alexia Putellas condujo el balón y le puso un pase espectacular a Hansen. La delantera chutó con el alma para mandar el esférico por encima del larguero de la portería de Misa Rodríguez. El Camp Nou se puso en pie para aplaudir la ocasión. Aunque las cámaras se detuvieron en la figura de la Balón de Oro. La actual mejor del mundo se dolió de la espalda, aunque siguió en el verde.
Fuera por las molestias o por no encontrarse a gusto con el guion del partido, Alexia Putellas no se acabó de encontrar cómoda en la primera parte. El encuentro fue dirigiéndose al tiempo de descanso sin que el marcador se volviese a mover. Empate tras los 45 primeros minutos y las jugadoras del Barcelona yéndose a vestuarios con medio billete de las semifinales en el bolsillo.
Zarpazo de Zornoza
Sin cambios salieron los dos equipos al campo para reanudarse el juego. Y saltó la sorpresa en el Camp Nou. Claudia Zornoza, en el círculo central, levantó la cabeza y vio a Sandra Paños adelantada. Calidad le sobra y por eso no dudó en armar la pierna y mandar el balón en dirección a la portería culé. Golazo de la madrileña para poner al Real Madrid por delante y dejar a las blancas a un gol para empatar la eliminatoria.
Desde abril del año 2019, ningún equipo le había hecho al Barça dos equipos jugando como local. Y lo logró el Real Madrid Femenino. Pero poco le duró la alegría a las de Alberto Toril. Primero las culés pidieron un penalti. No lo vieron así ni la árbitra principal ni el VAR. Después Misa Rodríguez tuvo que tirar de reflejos para evitar que el balón se colase en su portería. Pero Aitana Bonmatí logró devolver la igualdad al marcador.
Remontada culé
Al gol de Aitana Bonmatí le siguió el tanto de Claudia Pina. La joven futbolista repitió ante el Real Madrid, ya que marcó el segundo del equipo azulgrana en el Di Stéfano. Con toda la intención vio el hueco, elevó el esférico y superó por arriba a Misa Rodríguez. El Camp Nou se rompió con la celebración en la fiesta del fútbol femenino. Una fiesta repleta de golazos.
Siguió la fiesta del fútbol. De fútbol con mayúscula. Alexia Putellas apenas había tenido protagonismo. Pero la capitana culé sentenció la contienda con un disparo que llegó a tocar Misa Rodríguez y que no pudo evitar Ivana Andrés que el balón cruzase la línea. Reverencia de la mejor del mundo a su afición. Una afición que coreó su nombre y que manchó después lo sucedido cantando por la independencia catalana.
El show del Barça todavía no había acabado. Toril introdujo a Nahikari y Möller en el campo, pero fue el equipo de Jonatan Giráldez el que volvió a celebrar un nuevo tanto. El quinto de la tarde. Esta vez fue Hansen la que batió a Misa Rodríguez y culminó la manita para confirmar que, sin duda, forman parte del mejor equipo de Europa.
Hubo más intentos. Más emoción. Pero el marcador acabó con el 5-2. 8-3, en el global. La diferencia es grande vista así. Sin embargo, el Real Madrid Femenino logró superar en varios momentos de la eliminatoria al Barça. Algo que no es nada habitual cuando juegan las azulgranas. Aunque este Barcelona parece imbatible en estos momentos. Avanza así hacia las semifinales de la Women's Champions League, buscando su segundo entorchado continental.