Dos derrotas consecutivas en la Liga Endesa eran un balance demasiado duro para el Real Madrid en este tramo final de la competición regular. Los de Chus Mateo tenían una gran oportunidad para desquitarse y recuperar sensaciones en el WiZink Center ante el Girona, así que se pusieron manos a la obra desde que salieron a la cancha. [Real Madrid 98-70 Girona: estadísticas y narración]
La derrota en El Clásico del pasado fin de semana había dejado al Real Madrid en desventaja en la pelea por el liderato, pero los blancos son conscientes de que todavía queda margen para enmendar ese error, algo que pasa por ganar todos y cada uno de los partidos que restan hasta el final del tramo regular. El Girona no opuso demasiada resistencia así que seguirá mirando de reojo a los puestos de descenso.
El ambiente era frío y el Real Madrid podía caer en la trampa de la relajación, así que estuvo listo para evitarlo. El arranque fue prometedor y el trabajo fue coral para empezar a abrir brecha en el marcador. Aunque para brecha la que tuvo que curarse Rudy Fernández en la frente después de un golpe involuntario a lo largo del partido.
Con el paso de los minutos la renta favorable a los locales no hizo sino ir aumentando poco a poco hasta dispararse por encima de los 20 puntos ya en la segunda mitad. El resto fue coser y cantar para el Real Madrid, y sólo con decir que hasta Tavares se animó a encestar un triple sobran el resto de palabras.
Sin fisuras
Quizás el Real Madrid podía tener la mente puesta en su próximo compromiso de la Euroliga contra el Partizán, pero como antes del dos viene el uno, debía centrarse en el campeonato doméstico. No hubo distracciones, desde el primer momento el equipo de Chus Mateo se mostró muy serio, enfocado en lo que tenía por delante y quiso encarrilar todo sin dar lugar a la sorpresa.
El primer estirón de los blancos fue contestado por un Girona que se resistía a darse por vencido tan pronto, aunque el 19-11 con el que finalizó el primer cuarto comenzó a marcar el camino de lo que estaba por llegar. La sorpresa llegó con el parcial de 0-7 favorable a los catalanes para volver a apretar el marcador, con cuatro puntos de Marc Gasol incluidos, algo que le hizo volver a cambiar el chip al Real Madrid.
Rudy Fernández y Sergio Rodríguez acudieron al rescate con un gran acierto desde el exterior antes de que se sumaran al festival Randolph y Yabusele. Tampoco quería perderse la fiesta Musa, que con cinco puntos contribuyó a dar el estirón. Ante ese acelerón, comenzó a flaquear un cuadro catalán que terminó siendo víctima de un 14-7 como colofón al cuarto.
En la reanudación de nuevo Marc Gasol quiso tirar del carro, pero Yabusele y Causeur aparecieron para frenar esta reacción y mantenerlo todo bajo control. A partir de ahí, el Real Madrid pasó a anotar con una facilidad pasmosa y eso le permitió entrar al último cuarto 20 puntos arriba (71-51).
Estaba ya todo decidido, así que los blancos pudieron divertirse sobre el parqué en los últimos 10 minutos. Tanta era la fiesta, que Tavares sorprendió al personal marcándose un triple frontal que se celebró como si se tratara de un título. Una victoria cómoda para el Real Madrid que le permite seguir en la lucha por el liderato.
Real Madrid 89-70 Girona
Real Madrid: Williams-Goss (8), Causeur (10), Abalde (6), Cornelie (2), Tavares (7) -cinco titular-, Llull (1), Yabusele (15), Musa (13), Randolph (12), Rudy Fernández (9), Sergio Rodríguez (6).
Basket Girona: Colom (8), Fjellerup (9), Taylor (6), Miletic (7), Marc Gasol (14) -cinco titular- Hill (6), Prkacin (6), Sorolla (4), Jenkins (5), Garino (1), Vila (2), Figueras (2).
Parciales: 19-11, 25-21, 27-19, 18-19.
Árbitros: Fernando Calatrava, Juan de Dios Oyón y Héctor Báez. Sin eliminados
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada de 28 de la Liga Endesa disputado en el WiZink Center de Madrid ante 6.117 espectadores.