Mucho cuidado si tienes mascotas y auriculares inalámbricos: se los pueden comer

Los auriculares TWS cada vez son más populares en España, y es que gracias a sus cada vez más asequibles precios y su tamaño tan compacto y cómodo de llevar son una de las mejores opciones para llevar la música siempre con nosotros.

Sin embargo, estos dispositivos pueden tener un peligro inesperado en el hogar que hasta ahora muchos no nos habíamos percatado, y es que nuestras mascotas y niños más pequeños pueden llegar a comérselos por accidente.

El inesperado riesgo de los auriculares TWS: tu mascota se los podría comer

Afortunadamente no escribo esto porque mi perro se haya comido mis auriculares, pero se trata de un riesgo que quizás muchos no habíamos considerado hasta ahora. Es posible que ya lo tuvieses en cuenta, ya que es algo que podrías pensar «es tan obvio que sería absurdo comentarlo». Pero una de mis teorías sobre la vida (y también para hacer artículos) es que, cuando algo es tan obvio, es que quizás no lo sea.

Así pasó por mi cabeza cuando Motorola compartió con nosotros consejos para evitar que tus mascotas se coman tus auriculares. Por un momento pensé que me tomaban el pelo, pero ahora no dejo de mirar mis auriculares y ver que tienen el tamaño ideal de una golosina que podría comerse cualquier niño o mascota. Aquí hay dos asuntos importantes, y es que además de no querer quedarte sin auriculares, mucho menos quieres que tu mascota sufra intentando comérselos inocentemente.

Las baterías integradas de estos auriculares pueden provocar quemaduras en la garganta, lengua y estómago, lo que hace que tener una rutina para evitarlo sea muy importante. Los consejos son muy sencillos, pero nunca están de más tenerlos en cuenta, que serían los siguientes:

• Sigue una rutina clara: Guarda los auriculares en su estuche después de utilizarlos. No los dejes en cualquier lugar, incluso si están en una mesa y encimera, porque podrían caerse por accidente.
• Cuando no los utilices, guarda los auriculares en un cajón o cualquier lugar que sea inaccesible para los animales.