Cómo gestionar el WiFi para que gaste menos batería
Os contamos las claves para gestionar de una forma óptima la WiFi en suspensión para optimizar la batería y el consumo de datos.
17 octubre, 2016 11:00A menudo, debido a la tarifa que tenemos contratada, hay usuarios quedándose sin datos. Por eso es común que intentemos conectarnos a cuantas más redes WiFi mejor, incluso en nuestros locales de confianza.
También es cierto que la conexión WiFi tiende a consumir bastante batería, especialmente en los casos que estemos conectando/desconectando bastante frecuente, quizá debido al nivel de señal que recibimos de la WiFi.
Gestionando la WiFi en suspensión
Para gestionar la optimización de batería y consumo de datos, acabamos en muchas ocasiones pensando que lo mejor es tener la WiFi desconectada y activarla al llegar a casa (o trabajo o sitio similar). Así podríamos por ejemplo ahorrar batería si estamos paseando por la calle, pues probablemente no utilizaremos el WiFi en ese momento.
Pero también tenemos una alternativa si no queremos tener que estar activando o desactivando la WiFi, incluso aunque tengamos un acceso directo para ello. Esta opción se llama WiFi en suspensión.
La WiFi en suspensión nos permite que sea el sistema operativo quien deshabilite la WiFi cuando entre el dispositivo en modo suspensión. Es decir, que tan pronto como no estemos utilizando el dispositivo, directamente el sistema operativo deshabilite la WiFi y en ese caso sólo utilizaremos los datos móviles como acceso a Internet.
Para ello, debemos ir a:
Ajustes – WiFi – Ajustes avanzados
¿Cuánta batería gasta cada opción?
Y tendremos tres opciones:
- Siempre: Esta opción básicamente deshabilitará la gestión automática de la WiFi y siempre que la tengamos activa, estará funcionando. Es la opción que más batería puede llegar a gastar, pero la que menos datos móviles consumirá (si tenemos activa la WiFi).
- Sólo si se está cargando: Puesto que la opción de deshabilitar la WiFi al suspender el dispositivo aparece debido al consumo de batería, esta opción nos permite que siempre que estemos cargando el dispositivo se mantenga la conexión WiFi (dado que no es un problema la batería en ese momento), pero se deshabilitará al suspenderse el móvil sin cargar. Se trata quizá de una de las opciones más equilibradas.
- Nunca: Esta opción nunca utilizará la WiFi al suspender el teléfono. Será la opción que más puede optimizar la batería a costa de un posible mayor consumo de datos (puesto que siempre debemos recordar que muchos de los servicios de nuestras apps en segundo plano se siguen ejecutando en modo suspensión).
Como veis, no hay ninguna opción que sea la perfecta, sino que deberemos pensar en nuestra situación concreta. Por ejemplo, hace poco tiempo estuve de viaje en otro país y puesto que no quise generar gasto consumiendo datos móviles, los tenía desactivados y utilizaba la red WiFi de mi oficina en aquel país. En esta situación, si por ejemplo tuviera la opción Nunca activa, no podría recibir ningún email o mensaje de WhatsApp (u otro tipo de mensaje) siempre que estuviera mi móvil en suspensión. Por eso jugar con estas opciones resulta muy útil según nuestras circunstancias.
Aparte de eso, siempre podemos utilizar aplicaciones de terceros específicas para la gestión de la conexión WiFi, como por ejemplo WiFi Saver o WiFi Manager, la cual nos ofrecerá más alternativas ya no sólo pensando en posibles modo suspensión (o pantalla inactiva), sino ofreciendo la mayor información posible de nuestra WiFi.