Dentro de unos años, puede que nos olvidemos de que Nvidia hacía tarjetas gráficas para videojuegos. La compañía se ha convertido en una de las más valiosas del sector tecnológico gracias a la capacidad de sus chips en otras tareas aparte de jugar; así que su apuesta por la Inteligencia Artificial con el lanzamiento de Blackwell es comprensible, como también lo es usar el poder de la IA para diseñar robots humanoides.

Blackwell es la nueva gama de GPUs de Nvidia, aunque su CEO, Jensen Huang, prefirió llamarla “plataforma”; no en vano, es donde se basará el futuro de la compañía a partir de ahora, y donde los mayores gigantes tecnológicos ya han pillado sitio.

Y es que las GPUs basadas en Blackwell serán las que ejecuten los modelos de lenguaje y los algoritmos de compañías como Google, Tesla, Microsoft, Meta, Dell, Amazon, OpenAI, y muchas más que ya han confirmado que serán las primeras que las aprovecharán. Eso supone que todas las plataformas más importantes, incluyendo Google Cloud, AWS, Microsoft Azure y Oracle Cloud, estarán basadas en estos chips.

El chip que lo controlará todo

El motivo por el que todos estos gigantes han llegado a la misma conclusión de apostar por Nvidia es evidente: Blackwell es la plataforma más potente del mercado, punto. Estamos ante el sucesor directo de Hopper, pero a efectos prácticos es como si Nvidia se hubiera saltado un par de generaciones; como dato, Blackwell cuenta con 208.000 millones de transistores, una cifra espectacular comparada con los 80.000 millones de Hopper.

Para conseguir semejante cifra, Blackwell está compuesto en realidad por dos GPUs separadas, cada una con 104.000 millones de transistores; están conectadas por un enlace único de 10 TB/s para funcionar como si fuese una única GPU de manera efectiva. Los chips están basados en un proceso de fabricación N4P de TSMC, el más avanzado en la escala de los 4 nanómetros, y cuentan con memoria integrada para alcanzar una tasa de transferencia máxima de 16 TB/s.

El superchip GB200 de Nvidia basado en la plataforma Blackwell Nvidia

Todo esto se traduce en que el modelo más puntero de la gama, el GB200, es la GPU más potente del mundo, especialmente si hablamos de tareas relacionadas con IA. Comparado con Hopper, es hasta 30 veces más rápido en inferencia de IA (basado en aprendizaje automático), y tiene una potencia de 20 petaflops en FP4, dejando atrás a cualquier otro rival del mercado.

El GB200 está compuesto de dos GPUs B200, y de la pieza más interesante: una CPU Grace integrada, mejor capaz de hacer los cálculos necesarios para ayudar a las GPUs. Nvidia también ofrecerá las B200 y B100 por separado, sólo con las GPUs, dependiendo de las necesidades del cliente.

Pero tal vez lo más sorprendente, es que Nvidia haya conseguido todo esto reduciendo el consumo energético; Blackwell es su GPU más eficiente, reduciendo 25 veces el coste energético. Un modelo con 1,8 billones de parámetros hubiera necesitado 8.000 GPUs basadas en Hopper y con un consumo de 15 MW; la misma tarea puede ser ejecutada con sólo 2.000 GPUs de Blackwell consumiendo sólo 4 MW.

Earth 2 es un gemelo digital de la Tierra creado por Nvidia Nvidia

Para demostrar el potencial de esta tecnología, Nvidia ha hecho algo sorprendente: crear otra Tierra. El proyecto “Earth-2” es un gemelo digital de nuestro planeta, que simula la meteorología y el clima a escalas que nunca se han visto hasta ahora. Esta Tierra digital se puede acceder a través de la API de Nviida, para que cualquiera pueda crear simulaciones para estudiar el efecto de eventos climáticos, desde tornados y mega tormentas a simples nubes bajas.

Para la mayoría de los usuarios, los efectos de este lanzamiento se notarán en los próximos lanzamientos de compañías como Google o Microsoft, con funciones basadas en IA más avanzadas y basadas en una mayor cantidad de datos.