El mercado de las consolas portátiles con Android es tan competitivo, que los fabricantes no tienen más remedio que reinventarse constantemente para llamar la atención. En Retroid lo saben muy bien, siendo una de las referencias gracias a su consola Retroid Pocket 3.

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Al igual que muchas otras marcas, la Pocket 3 estaba claramente inspirada en el diseño de la Nintendo Switch, con una pantalla central rodeada por los controles. Ahora, este fabricante ha presentado un nuevo modelo de consola que busca su inspiración en el pasado, y a juzgar por las primeras reacciones, la apuesta ha funcionado.

Nueva consola portátil con Android

La Retroid Pocket Flip destaca por ser una consola con diseño de tipo concha. Es decir, que podemos cerrar la consola para proteger la pantalla cuando no la estemos usando y también para reducir el espacio que ocupa y hacerla más portátil.

En este caso, es evidente que Retroid se ha inspirado en todo un clásico como la Nintendo DS aunque en este caso, no tenemos dos pantallas, y en la parte inferior se alojan los controles incluyendo dos palancas analógicas; esto último es interesante teniendo en cuenta el reducido espacio disponible. También se incluyen todos los botones propios de las consolas modernas, incluyendo gatillos analógicos y botones superiores, e incluso se incluyen dos botones adicionales que podemos programar para que ejecuten diversas funciones.

Además de la protección de la pantalla y los controles cuando no estemos usando la consola, otra ventaja de este diseño es que podemos poner la pantalla en el ángulo que queramos, en vez de tener que mover toda la consola o jugar en una posición incómoda. La pantalla es de 4,7 pulgadas y tiene una resolución de 1334 x 750 píxeles, con un brillo de 450 nits.

La buena noticia es que este cambio de diseño no viene con un cambio de hardware. La Retroid Pocket Flip se basa en el mismo procesador que el modelo actual de Retroid, un Unisoc T618 de ocho núcleos (dos Cortex-A75 y seis Cortex-A55) acompañado de 4 GB de memoria RAM LPDDR4 y una gráfica Mali-G52.

Eso también significa que esta consola viene con Android de serie, concretamente Android 11, por lo que podremos instalar nuestras apps y juegos favoritos; es también por eso que la pantalla es táctil, aunque con la interfaz propia de Retroid podremos acceder a los juegos usando los controles integrados. También tenemos la opción de usar la conexión micro HDMI para conectar la consola a un televisor, además de conectar un mando, teclado o ratón por USB-C o Bluetooth 5.0. El lector de tarjetas microSD nos permitirá ampliar el almacenamiento para juegos, más allá de los 128 GB que vienen incluidos.

Aunque la Retroid Pocket Flip se promociona principalmente en el espectacular color rojo que han conseguido (que estará limitado a 1500 unidades), también estará disponible en negro y en dos esquemas de color inspirados en consolas de Nintendo: la Super Nintendo y la GameCube.

La Retroid Pocket Flip estará disponible a partir del 21 de marzo en la página oficial con un precio de 159 dólares, y los envíos empezarán el 10 de abril.

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