Todas las redes sociales quieren ser TikTok o al menos, conseguir lo mismo que TikTok: atraer a una audiencia nueva y más joven. No es de extrañar que las tiendas de apps se hayan llenado de clones, o que servicios como Instagram se hayan centrado en sus propias versiones como los Instagram Reels.
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Pero es fácil olvidar que TikTok no inventó el concepto. Ya hubo una app, que tuvo cierto éxito, y que apostó por los vídeos cortos como una manera rápida y sencilla de conectar con tu audiencia. Hablamos de Vine, por supuesto.
Vine podría volver con sus vídeos cortos
La idea de Vine es familiar. Era una app para compartir vídeos cortos, de no más de seis segundos, que fue comprada por Twitter en el 2012. Muchos de los ‘memes’ y vídeos virales que hoy se comparten en Twitter y YouTube en realidad fueron publicados por primera vez en Vine, y muchos de sus creadores encontraron la fama en otras plataformas.
Vine era una red social basada en compartir vídeos muy cortos
Ahora sabemos que Vine estaba adelantada a su tiempo, pero en el 2016, no fue una sorpresa que el servicio fuese cerrado. Twitter pasaba por un mal momento: su cofundador, Jack Dorsey, había vuelto a una compañía desesperada por un mayor crecimiento y más vías de ingresos. En ese contexto, el cierre de Vine era una manera de controlar el gasto, pero en perspectiva, si hubiera aguantado un par de años más tal vez podría haber atraído a los mismos usuarios que TikTok. Es difícil decirlo, como también lo es decir si Vine puede tener éxito si vuelve.
Elon Musk parece dispuesto a arriesgarse. El nuevo propietario de Twitter hizo una encuesta en su cuenta, preguntando a sus seguidores si querían que recuperase Vine; las respuestas fueron mayoritariamente positivas, con un 69% de los votos. La posibilidad de que Twitter pudiese luchar contra TikTok con Vine es, como mínimo, interesante para mucha gente, pero no será fácil.
Según fuentes internas de Axios, Elon Musk ha puesto una fecha límite a su equipo de desarrolladores, para que recuperen Vine para finales de año; sin embargo, hay que recordar que el desarrollo de Vine fue parado hace seis años, toda una eternidad en el sector. Es poco probable que el código fuente de Vine se pueda aprovechar tal cual, y de hecho, sería mejor desarrollarlo desde cero para una nueva plataforma. Y eso implica invertir más dinero y contratar a más empleados, ambas cosas que Musk realmente no quiere hacer.