Qualcomm demanda a Apple y reclama que el iPhone se deje de vender
Qualcomm afirma que el iPhone infringe varias de las patentes de la compañía. Y reclaman a los tribunales que el iPhone deje de venderse por ello.
10 julio, 2017 11:40Qualcomm, la empresa que desarrolla los procesadores Snapdragon, acaba de demandar a Apple en EEUU. Afirman que el iPhone infringe varias de sus patentes, y reclama que se prohiba su venta.
Qualcomm y Apple llevan un tiempo batallando en los tribunales. La compañía de la manzana y la compañía de los procesadores tienen varias disputas en los tribunales desde hace varios meses. Y se trata de una disputa tan larga, y que tiene lugar en tantos países, que sólo sabremos cómo termina dentro de varios años.
Pero esa disputa legal acaba de dar un paso más allá, porque Qualcomm acaba de presentar otra demanda contra Apple. Y esta última demanda no sólo busca dinero, reclama algo más grande: prohibir las ventas y distribución del iPhone. Es decir, Qualcomm quiere prohibir el producto estrella de Apple en los EEUU.
Qualcomm demanda a Apple por infringir seis patentes
Las patentes por las que Qualcomm demanda a Apple son seis, y la mayoría tienen que ver con ahorro de batería y conexiones a la red. Estas patentes se han obtenido en los últimos 4 años, Qualcomm afirma que no son obligatorias en ningún estándar de la industria y que Apple las está utilizando sin pagar ni un dólar por ellas.
Qualcomm, en la nota de prensa que han difundido entre los medios, va incluso más allá. Afirman que sus creaciones están en el corazón de cada iPhone, y que son vitales para su funcionamiento. Y, además de pedir una compensación económica, reclaman que el iPhone deje de distribuirse y venderse en EEUU.
La compañía de procesadores estima que la investigación comenzará en agosto, y que el juicio llegará el año que viene. Por otra parte, y según Digital Trends, Apple se defiende declarando que el negocio de Qualcomm es ilegal. Afirman que algunas de esas patentes son inválidas, y que la compañía no ha cumplido con la obligación de cobrar precios justos por su tecnología.