Hay muchas maneras de conseguir energía para nuestro smartphone Android. La más fácil y obvia es enchufarlo a la corriente y olvidarse. También se puede hacer por métodos menos convencionales como la carga inalámbrica o la carga solar. Otro método es utilizar la energía cinética causada por el movimiento para alimentar nuestro dispositivo, algo parecido a lo que vimos en la bici de Samsung.
Utilizando este mismo concepto es como funciona la energía eólica. Ahora un par de investigadores de la Universidad de Texas en Arlington, Smitha Rao y J.C Chiao han ideado un concepto para ayudar a cargar el móvil a través del uso de minúsculos molinos de viento.
Estos molinillos tienen un tamaño de 1,8mm como máximo, 10 de ellos cabrían en un grano de arroz, lo que significa que son suficientemente pequeños como para insertarlos en cualquier lugar, también el móvil, sin que nos demos cuenta.
La eficacia de captación de energía está por verse, pero es una idea muy interesante. La microelectrónica ingeniosa como estos molinillos puede que nunca los veamos perse en los smartphones, pero muchas veces da pie a que se desarrollen ideas alternativas basadas en ellas y que sí repercutan al final en una mejora de la tecnología que utilizamos.
Una aleación de níquel resistente es el material elegido para construir estos molinos de viento y que no sufran ninguna ruptura debido a los fuertes vientos. Una compañía taiwanesa ha conseguido los derechos de explotación de esta tecnología y ya se está buscando la manera de comercializarlo. De momento creemos que es demasiado pronto para algo así, pero los investigadores son optimistas y prevén que gracias a estos molinos de viento podrían construirse paneles gigantescos en las casas para captar energía.
Via UberGizmo