Shenzhen, donde nacen los Android baratos
Últimamente en El Androide Libre estamos viendo cómo proliferan dos fenómenos. Por un lado cada vez más gente adquiere smartphones de fabricación china y con componentes de menor calidad que a los que estamos acostumbrados y por otro los comentarios SPAM en los que nos aconsejan comprarlos, así que nos hemos preguntado, ¿y por qué no comentar un poco el fenómeno de los Android baratos? Así que hemos juntado todas nuestras herramientas para hacer el mejor periodismo de investigación y gran calidad, y las hemos ignorado tanto como nos ha sido posible.
En China existe una enorme ciudad (como todas allí, pero esta es un poquito más enorme de lo habitual) que está caracterizada por tener como habitantes a una enorme cantidad de fábricas de tecnología. En ellas, trabajadores que llevan años en esta industria, aunque ahora reconvertidos en fabricantes de smartphones (generalmente estaban acostumbrados a fabricar tecnología básica como teléfonos fijos para casa o juguetes o electrodomésticos baratos). Esta ciudad es Shenzhen y es donde los androides baratos nacen.
En alguna ocasión hemos hablado o comentado la revolución que ha supuesto Android en muchos aspectos, pero quizá la democratización del uso de los smartphones que ha supuesto que el sistema sea libre y gratuito sea el aspecto más importante de todos ellos.
En los últimos años (sobre todo en los dos últimos), emprendedores chinos han empezado a montar fábricas en esta ciudad, comprando componentes para fabricación de smartphones en masa usando técnicas baratas para ello. No están consiguiendo los smartphones de mejor calidad posible, pero no es el objetivo, nunca lo ha sido. La idea es fabricar smartphones que quepan en cualquier bolsillo, no tanto por su tamaño como por su precio. Aún así, estas calidades se están incrementando y cada vez más.
¿Y qué podemos esperar en breve? Pues gracias a la enorme proliferación de estas fábricas y a las ganas de asaltar el mercado que tienen fabricantes como Mediatek, cada vez iremos viendo teléfonos de mejor calidad y con mejores baterías. Sin embargo, en cuestión de I+D tienen un larguísimo camino por recorrer (y además no parecen estar dispuestos a hacerlo) así que de momento, si queremos innovación y espectáculo, no nos queda más remedio que confiar en los fabricantes de siempre y, si necesitamos algo barato y efectivo, confiar en esta nueva ola de fabricantes de bajo coste.
Si queréis contarnos vuestra experiencia con teléfonos de bajo coste que hayáis tenido ocasión de probar, no dudéis en asaltar nuestros comentarios (prometemos intentar echar al bot de SPAM en el momento en que (seguro) intente entrar).