Desde su explosión hace unos años, el mercado de los robots aspiradores ha evolucionado mucho. Lejos de ser un producto de lujo, hay modelos que se adaptan a todos los bolsillos y a todos los hogares.

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Claro, que puede que eso no sea un problema para ti. Puede que simplemente, quieras lo mejor en limpieza del hogar, y que detalles nimios como el precio o el tamaño no sean un problema. En ese caso, deja de buscar, porque Roborock tiene lo que quieres.

El robot de limpieza más avanzado

El Roborock S7 es el modelo puntero de Roborock, y sólo por eso, ya debería ser digno de mención en cualquier comparativa que queramos hacer. Estamos ante un dispositivo verdaderamente inteligente en todos los sentidos, que no sólo es capaz de reaccionar a nuestro entorno usando los sensores integrados, también es capaz de aprender.

Ahora coge eso, uno de los productos más recomendables del mercado, mejóralo, y súmale la base de carga que lo hace todo por ti. El resultado, es el Roborock S7 MaxV Ultra, la versión más avanzada (y más cara) que ofrece Roborock y que, instantáneamente, se pone fuera del alcance de buena parte de la competencia.

He tenido el placer, el lujo diría yo, de usar este robot aspirador en mi casa; y ha sido toda una lección de humildad. Por primera vez, he sentido como si mi hogar no estuviese a la altura de semejante dispositivo, como si le estuviese ofendiendo por la mera sugerencia de que limpie mis suelos.

Son imaginaciones mías, por supuesto. El Roborock S7 ha sido más que capaz de limpiar mi piso de manera periódica y sin problema alguno; de hecho, en cada ocasión ha sido mejor que la anterior, al ser capaz no sólo de detectar obstáculos, sino también de esquivar los juguetes que mi sobrino dejó en el salón y que fui demasiado vago como para recoger.

La clave está en el sistema ReactiveAI 2.0 de Roborock, que se basa no en uno, sino en varios datos al mismo tiempo. Para empezar, como muchos otros robots, tiene cámaras frontales que le permiten detectar objetos y obstáculos; pero además, también tiene un sistema LiDAR integrado, que le permite escanear el entorno. Por último, la cámara frontal viene acompañada de un sistema de exploración 3D de luz estructurada. Como resultado, muy rara ha sido la vez que he visto que este robot se choque contra algo; un mes después, una vez que ya había aprendido mi entorno, no se choca ni en una ocasión.

Las cámaras y la exploración 3D también se usan para el reconocimiento de objetos, que es la mejor que he probado hasta ahora. El robot ha sido capaz de reconocer zapatillas y de evitarlas (esto último suele ser un problema en otros robots que he probado); no sólo eso, sino que marca su posición para no tropezar con ellas cuando que vuelva al mismo sitio posteriormente.

El S7 MaxV ha sido capaz también de reconocer objetos poco habituales, como cajas de cartón o herramientas. No siempre es capaz de identificarlos, simplemente marcándolos como “obstáculo”, pero eso ya es más de lo que son capaces de hacer otros. Eso no quiere decir que sea perfecto; la detección de alfombras es mejorable, y en alguna ocasión se ha subido a una, y también ha ‘chupado’ una toalla que estaba tirada en el suelo. Pero por lo general, me resulta difícil criticar un comportamiento que, por lo general, es intachable.

Tu casa, en 3D

Semejante cantidad de tecnología es evidente con la aplicación oficial de Roborock, desde la que podemos activar y usar muchas de sus funcionalidades. Por supuesto, tenemos la opción de programar la limpieza y de asociarlo con nuestro asistente personal, pero eso lo hacen todas.

Donde realmente notamos la tecnología propia del S7 MaxV es en funciones como la posibilidad de ver el mapa de nuestra casa en tres dimensiones, demostrando lo que el robot es capaz de “ver”. La app es capaz de detectar automáticamente habitaciones, y nos permite delimitar zonas en la que no queremos que el robot entre. Desde el mapa también podemos comprobar el camino que ha seguido el robot, cómo ha realizado la limpieza, y qué obstáculos ha identificado; y si se nos han perdido las zapatillas, podemos encontrarlas así.

Una de las funciones más interesantes de la app es la visualización remota. Aprovechando que el robot tiene una cámara para detectar objetos, Roborock nos permite conectarnos a ella a través de la app, algo que es ideal para usar el robot como cámara de vigilancia. Al activar la app, tendremos que aceptar que se recopilen algunos datos relacionados con el vídeo, pero la buena noticia es que, por lo demás, Roborock no obtiene los datos del robot.

La política de privacidad de Roborock se puede resumir en: “si no tenemos las imágenes, no podemos perderlas”. En otras palabras, la cámara del robot no se usa para enviar fotos o vídeos a servidores externos y por lo tanto, esos archivos nunca pueden ser filtrados. Eso significa que todo el trabajo de análisis de fotos se realiza a nivel local, algo sorprendente teniendo en cuenta lo bien que funciona. El único caso en el que el robot enviará información es, evidentemente, si activamos la función de visualización remota, ya que el vídeo tiene que llegar a nuestro móvil de alguna manera.

Limpieza sin mover un dedo

Pero vayamos a lo importante, ¿cómo limpia el S7 MaxV? Pues bien, y lo mejor de todo, sin que tengamos que hacer nada. Para empezar, este es un robot aspirador y limpiador, con una mopa integrada en la parte trasera; por lo tanto, es capaz de fregar al suelo al mismo tiempo que aspira la suciedad.

Los resultados en mis pruebas son muy buenos, hasta el punto de que poner el robot de manera periódica ha sido suficiente para mantener la casa limpia; evidentemente, los accidentes están fuera de su alcance, y es recomendable fregar el suelo cada cierto tiempo (ya que el robot sólo puede usar agua), pero por lo demás, son resultados muy buenos, y mejores de lo que esperaba.

Lo mejor es que esta limpieza periódica se puede hacer sin movernos. No es sólo que podamos activar el robot directamente desde la app (y nos avisará con una notificación cuando haya terminado) es que todas las tareas de mantenimiento se realizan de manera automática.

Aquí es donde entra la parte “Ultra” de este S7 MaxV Ultra: la base de carga. En realidad, cargar el robot es sólo una de sus funciones (aunque lo hace bien y con carga rápida); lo realmente interesante es que el robot es capaz de vaciarse y rellenarse por si solo usando esta base.

La base de carga cuenta con tres compartimentos superiores. El de la derecha es el que aloja la bolsa de polvo: el robot se vacía por sí solo y el polvo se mueve a esa bolsa, que sólo debemos intercambiar cada cierto tiempo. Los dos compartimentos restantes son de agua: el de la izquierda es de agua sucia, generada cuando el robot se limpia la mopa automáticamente después de la limpieza, y el central es de agua limpia, que se usa para llenar el depósito del robot cuando se conecta.

Casi todo el proceso de limpieza es completamente automático. El robot es capaz de vaciar el tanque de agua usada y rellenarlo de agua limpia, y de vaciar su compartimento de polvo; incluso es capaz de limpiar su propia mopa, con un proceso de vibración que es la única parte realmente ruidosa del proceso.

Lo único que realmente echo en falta es que la app me avise del nivel del depósito de agua limpia y sucia de la base de carga, ya que es el único momento en el que realmente es necesaria nuestra participación.

La absoluta referencia en robots aspiradores

El Roborock S7 MaxV Ultra es el robot aspirador más completo que he probado nunca. Es una pieza de alta tecnología que viene acompañado de una base de carga que te ahorra muchísimo trabajo.

Realmente no “usas” este robot. Simplemente dejas que haga el trabajo por si solo sin preocuparte de si hay cosas en el suelo, de si has cerrado las puertas que deberías cerrar, si has retirado la alfombra, o si se ha acumulado el polvo y la suciedad. El robot se encarga de todo y, sinceramente, creo que ese es el mejor elogio que le puedo otorgar.

Claro, que semejante lujo no sale barato. El modelo Ultra, que es el que viene con la base de carga de tres compartimentos, se puede encontrar por 1.399 euros en PcComponentes, una cifra fuera del alcance de la mayoría; aunque en mi experiencia, merezca la pena.

La buena noticia es que hay otras versiones disponibles. La versión S7 MaxV Plus, con una base de carga más simple, cuesta 929 euros en Amazon, y también podemos obtener el robot por separado por 799 euros en Amazon.

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