Probamos el Nokia 5, metal y buenos acabados para un móvil económico
Hablamos sobre nuestras primeras impresiones con el modelo intermedio dentro de la nueva gama de móviles de Nokia, el Nokia 5.
1 marzo, 2017 12:20Nokia quiere atacar la gama media con sus nuevos smartphones. Hablamos de tres dispositivos, dos nuevos y uno que no; que llega al fin a Europa tras un primer lanzamiento en el mercado asiático. Los móviles en cuestión son los nuevos Nokia 3, Nokia 5 y Nokia 6. Terminales que apuntan a hacerse hueco dentro de la gama media.
Ya hemos hablado del Nokia 3, el pequeño y más básico de la gama. También os hemos contado las primeras impresiones con el Nokia 6, el modelo top dentro del nuevo catálogo de Nokia. Ahora es el turno del modelo intermedio. Un dispositivo que se coloca por debajo de los 200 € y que da más que el Nokia 3 pero se queda un paso por detrás de su hermano mayor, el Nokia 6. Hablamos, del Nokia 5.
Del plástico al metal, el frío del metal da mejores sensaciones
Este smartphone es el eslabón entre el Nokia 3 y Nokia 6. El Nokia 5 cuenta con un acabado en metal pulido con un tacto agradable. Me recordó bastante al metal que encontramos en dispositivos como el Xiaomi Redmi Note 3. Da una sensación muy parecida. Bordes redondeados hacen que sea cómodo de agarrar y la pantalla es un poco más grande que el Nokia 3, llegando hasta las 5,2 pulgadas pero conservando la resolución HD.
Especificaciones con claros y oscuros, pero con nota media aprobada
Antes de entrar a hablar detenidamente de sus especificaciones, os dejamos aquí todas los detalles que tenemos sobre el interior de este Nokia 5:
- Pantalla de 5.2 pulgadas y resolución HD (1280×720 píxeles).
- Procesador Qualcomm Snapdragon 430.
- 2 GB de memoria RAM y 16 GB de almacenamiento. MicroSD.
- Cámara principal 13 Mpx con enfoque PDAF, 1,12 um, f/2, flash de doble tono
- Cámara frontal 8 Mpx AF, 1,12 um, f/2, FOV 84 grados
- Wifi 802.11b/g/n y Bluetooth 4.2. Radio FM.
- Batería de 3.200 mAh.
- DualSIM
- Acelerómetro, giroscopio y brújula.
- Sensor de huellas
- Colores: Azul, Cobre, Negro y plateado.
Una de las diferencias más importantes la encontramos en el ‘corazón’ de este Nokia 5. Pasamos de tener el fabricante Mediatek en el modelo más básico a contar con el Snapdragon 430 de Qualcomm en este modelo y en el siguiente. Mismo procesador que el Moto G5. En temas de memoria, tenemos la misma RAM que el Nokia 3: 2GB.
Ya hemos dicho tanto en el Nokia 3 como en el Nokia 6 que el software incorporado es muy limpio y cercano a lo que Google ofrece en sus Pixel. Por lo que la carga de procesos se reduce y aún con 2GB de RAM y un procesador como el Snapdragon 430, tenemos una sensación de dispositivo fluido. El paso entre aplicaciones es rápido, moverse entre los menús, etc. Todo va realmente bien.
Sensor de huellas a partir del modelo intermedio
Algo que agradecemos que se incorpore en este modelo, que el Nokia 3 no tiene, es sensor de huellas. Está situado en el botón central de la botonera que encontramos justo en la parte inferior del panel frontal. De este modo se aprovecha el total de la pantalla. Ya tenemos una de las principales diferencias de diseño entre el Nokia 5 y su rival directo, el Moto G5: Botones capacitivos o en pantalla. Aunque sigue resultándonos raro que Motorola opte por un sensor de huellas en el frontal y botones en pantalla..
Hemos probado la cámara de este Nokia 5. Sobre el papel tenemos un sensor de 13MP y cuando lo hemos probado nos hemos quedado satisfechos. La calidad no es la misma que la tenemos en el Nokia 6 pero sí que puede satisfacer las necesidades de los que les guste la fotografía. Cumple bien al menos en las fotos que tomamos desde el mismo stand.
Nokia, si la distribución es buena, puedes ser un quebradero de cabeza para el resto
Como conclusión final diremos que el camino que ha elegido Nokia con este modelo es el acertado si pretende luchar en el mercado de la gama media. Un terminal fabricado en metal, un sensor fotográfico a la altura, software limpio y unas especificaciones suficientes dan como resultado un digno candidato para llevarse un buen trozo del pastel.