El típico invento estúpido y genial por 6 euros que vas a querer comprar
Un accesorio para conseguir infrarrojos en el móvil es el recordatorio de que no importa lo que necesites, probablemente alguien ya lo ha creado.
6 noviembre, 2018 15:58Las transiciones siempre son difíciles; tener que cambiar nuestras costumbres, sólo porque alguien ha decidido que hay mejores maneras de hacer lo que queremos, sólo servirá para enfadar a mucha gente.
Estamos en medio de una transición semejante, con la muerte del jack de audio en los smartphones. Un puerto que siempre ha estado ahí, fiel y útil hasta su mismo final; un método fácil y directo de conectar nuestros auriculares, sin necesidad de más pasos adicionales. Y eso es justo lo que ahora la mayoría de fabricantes quiere destruir; incluso los que lo defendieron duramente en su momento, como Samsung, probablemente lo abandonarán pronto. No está siendo una transición fácil, no.
Los infrarrojos siguen usándose
Pero no debemos olvidar que esta no será la primera, y ni mucho menos la última vez que tengamos que decir adiós a una funcionalidad que dábamos por segura. Por ejemplo, puede que te hayas olvidado que desde hace ya un tiempo los smartphones más punteros no traen infrarrojos.
El emisor de infrarrojos es de esas tecnologías que ya estaban obsoletas cuando aparecieron los smartphones; pero que son tan usadas que se convirtieron en una pieza imprescindible. Son especialmente útiles para controlar ciertos aparatos a distancia; sobre todo aquellos que no tienen otro tipo de conexión inalámbrica más moderna.
Un ejemplo son los televisores, que incluyen un receptor de infrarrojos; así que podemos convertir el móvil en un avanzado mando a distancia, con todas las funciones que podamos desear. También se usan en aires acondicionados, microcadenas y otros electrodomésticos del hogar. Pero si tienes un móvil moderno y de gama alta, muy probablemente no puedas controlarlos. Sí, es cierto que siguen apareciendo modelos con infrarrojos; aunque la mayoría son de gama baja.
El accesorio más curioso que verás hoy
Por eso este producto que hemos encontrado en Gearbest es tan llamativo; se trata de un adaptador USB-C que añade un emisor de infrarrojos a tu móvil, fabricado por Baseus.
Es uno de los productos más anacrónicos que hemos visto en mucho tiempo. Claramente está dirigido a los móviles más potentes y de gama alta del mercado; ya que usa el conector USB-C y no el microUSB que aún se encuentra en los modelos de gama baja y media. Pero al mismo tiempo, sirve para una función que fue abandonada ya hace tiempo por muchos modelos.
Cómo conseguir infrarrojos en el móvil
Este adaptador está bien pensado; tiene una funda que nos permite proteger la conexión y llevarlo en el llavero, así que no tenemos que tenerlo conectado al móvil siempre, sólo cuando lo necesitemos. Conectarlo es realmente fácil gracias a la conexión USB-C.
Una vez conectado, tenemos que instalar la app oficial en nuestro móvil, para que reconozca el dispositivo y lo podamos usar como mando a distancia; la interfaz no se diferencia mucho de la de otros mandos virtuales, y nos permite controlar diferentes dispositivos.
Uno de los detalles más curiosos viene por culpa del hecho de que los rayos infrarrojos necesitan tener una línea directa de visión con el aparato que queremos controlar; y como la mayoría de smartphones tienen el conector USB-C en la parte inferior, eso significa que tenemos que coger el móvil al revés si queremos usar los infrarrojos. Seguro que nos costará acostumbrarnos. También tenemos un límite de distancia: sólo funciona hasta los 10 metros de distancia.
Muy útil, aunque tengas que coger el móvil al revés
Este es el tipo de producto que será enormemente útil para unos usuarios, y absurdamente inútil para otros. Si necesitas tener infrarrojos en tu móvil sí o sí, puede ser una buena opción; pero la mayoría de personas realmente no lo necesitará o tendrá otras alternativas para controlar sus aparatos.
Claro, que por 6,16 € que cuesta en el momento de escribir estas líneas, realmente no perderás mucho si te pillas uno. Y probablemente la mayoría de las ventas sean de usuarios que se lo compran «por si acaso».