A Google se le escapó hace unos días que está trabajando en una API de Fitness para Android, una serie de herramientas para mejorar la creación de aplicaciones destinadas a detectar rutinas de movimiento, ejercicio diario y en definitiva aquellas apps que ofrezcan información contextual relacionadas con el deporte. Esta API permitiría a los desarrolladores integran mejor los datos obtenidos a través de los distintos sensores y conseguir resultados más precisos que los que tenemos hoy en día.
Nuevos sensores, más datos
El Nexus 5 ya añadió dos nuevos sensores, un detector de pasos y un contador de pasos. Dos sensores que podrán accederse directamente desde esta nueva API de Fitness que no sabemos exactamente cuando estará disponible. En la descripción de la API , Google especificaba que se permitirá el acceso a dispositivos de fitness, relacionados con la salud y nuestras actividades; esto significa que las apps podrán acceder a los datos producidos por estos sensores, ya sean los datos brutos o los procesados.
Actualmente esta información se realizaba a través del GPS. Pero el método se está quedando anticuado. Los fabricantes de hardware físico como Fitbit o Nike quieren encontrar nuevas formas de aprovechar el hardware del dispositivo y sincronizarlo con nuestro smartphone Android. Imaginemos una pulsera con contador de pasos y GPS, el aparato perfecto para luego poder ver todo nuestro recorrido en el smartphone, cuantos pasos hemos hecho, la velocidad, etc…
Esta nueva API no sería si no la evolución de lo que hasta ahora se conseguía mediante el GPS. Dispositivos como el bastón para ayudar a las personas mayores podrán ser mucho más precisos a partir de ahora. Una demanda que exigía el mercado y que Android debe soportar como SO multidispositivo que es.
Una nueva API de fitness tiene sentido para ayudar a conectar estos datos . Este tipo de APIs realmente no necesita ser actualizada con cada versión nueva de Android, pero puede ser fácilmente integrada a través de Google Play Services, que ya se actualizan de forma automática sin necesidad de descargar nada.
Google tiene una aplicación llamada «MyTracks» pero básicamente es una copia limitada de RunKeeper o MapMyFitness, dos apps que utilizan el GPS para rastrear nuestros paseos, caminatas o recorridos en bicicleta.
Este servicio necesita activar tanto el GPS como los datos para poder conectarse a internet y realizar todos los cálculos. Con la API de Fitness no haría falta ni siquiera estar conectados, pues el propio teléfono puede trabajar con los sensores de contadores de pasos de manera independiente.
Oportunidad para innovar
Una API que permite coordinar, organizar y exportar todos estos datos se convertirá en algo primordial en el momento en que los wearables se pongan de moda y todos queramos salir a la calle con nuestro nuevo dispositivo. Afortunadamente, la tecnología que viene nos volverá más sociables y nos sacará de nuestras habitaciones, un lugar del que empezamos a salir cuando pasamos del sobremesa al portátil, y de estos a los móviles.
La tecnología cada vez es más móvil y una API que mejore la recepción de movimientos es señal de que saldremos más de casa, seguiremos conectados a internet, pero fuera. Esta tendencia también se ve en Apple, que con su co-procesador de movimiento M7 se adelantó a Google a la hora de facilitar las cosas. La API de Fitness es la respuesta de Google al Apple M7, y a partir de ahora todos los fabricantes que incorporen un CortexM3 en sus chips para controlar los movimientos podrán beneficiarse de esta herramienta de Google.
No todas las mejoras en los smartphones están destinadas a conseguir más potencia. La movilidad también es un tema clave que no van a dejar de lado.