¿Estás aburrido? ¿Estás teniendo una tarde sosa y sin gracia? Gracias a cierto nombre relacionado con los videojuegos en Android podrás tener una sesión de adicción divertida: Ketchapp. Así es Horizon, otro juego de la desarrolladora que pretende saciar tus ansias de casual.
Horizon, la versión más casual de los juegos de naves
En el apartado de la jugabilidad, iremos muy deprisa ya que esto es Ketchapp y no es que sea demasiado complicado. Horizon se maneja en formato vertical y sólo tendremos que tocar y arrastrar la zona inferior de la pantalla para movernos de un lado a otro. Sí, lo habéis adivinado: tendremos que esquivar los obstáculos con nuestra nave.
La nave se moverá de forma automática y tendremos que esquivar tanto los obstáculos como a los enemigos que nos encontremos. Aparte, tendremos que recolectar las monedas que veamos, con las que compraremos nuevas naves. La verdad es que la jugabilidad es su punto más flojo, pero tiene sentido.
Es un juego made in Ketchapp, no hay absoluto misterio por esa parte. La cosa es que vamos desbloqueando mayor puntuación y mayores mejoras cuanta más distancia recorramos, y ese es el punto fuerte de Horizon; su incitación a que sigas adelante y te enganches sólo por la frustración de los controles.
El resto del juego no es especialmente emocionante, ya que aunque los gráficos están bien y son minimalistas a la par que bonitos, la jugabilidad se hace algo repetitiva. Además, siendo la desarrolladora que es, tenemos anuncios y recompensas basadas en ver publicidad. Nada dramático, también es verdad.
Tendremos recompensas que serán naves, estelas y demás. Me ha sorprendido lo adictivo que se vuelve Horizon a medida que lo vas jugando; vas abriéndote cada vez más paso ante los obstáculos y ciertos niveles se vuelven muy dinámicos y divertidos. Además, la curva de dificultad está bien definida, y aunque el juego esté destinado a que te enganches, esa es la característica principal de los juegos de Ketchapp.
Lejos de eso, tenéis Horizon totalmente gratis en la Google Play Store. Sin duda no es un juego que se vaya a llevar algún premio, pero la verdad, es que cumple lo que promete: matar el rato perdido que tenemos en el sofá y que solemos dedicar a rebuscar entre nuestras aplicaciones para ver a qué juego nos podemos enganchar.