Juega a la Mega Drive en tu Android y revive los juegos de tu infancia
Te enseñamos a llevar la Mega Drive o Sega Genesis a tu Android. Mandos, juegos, emuladores... Viaja en el tiempo hasta tu infancia.
22 enero, 2017 20:34Hoy en día tenemos un gran abanico de opciones para jugar, de todos los gustos y estilos. Pero si algo suena, se ve y se juega como en los 80/90, el niño que llevamos dentro desea jugarlo.
Muchos no sabrán que los primeros videojuegos se cargaban usando cintas de casete, los colores eran blanco, negro o monocolor y el sonido era una serie de ruidos que surgían de un altavoz.
Han ido evolucionando con el tiempo, pero vamos a llevar nuestro Delorean a una fecha en concreto, 29 de Octubre de 1988, ese día en Japón apareció entre nosotros una consola de 16 bits y su creador era Sega. Hablamos de la Sega Mega Drive (o Sega Genesis). Y hoy vamos a ver como podemos disfrutar de la experiencia de jugar con ella en nuestros dispositivos Android.
Sega Mega Drive, un poco de historia
Al ser una consola de 16bits pertenece a la cuarta generación de consolas. Fue la tercera consola de SEGA y sucesora de la Sega Master System, salió al mercado en 1988 en Japón, un año después en 1989 en Estados Unidos y al año siguiente en 1990 en Europa.
Una de las curiosidades de la Mega Drive, es que su hardware es una adaptación de la placa usada en Arcade System 16. Por lo que fue uno de los primeros intentos de llevar la experiencia Arcade a nuestros salones. Estas son sus especificaciones:
- Procesador primario Motorola 68000 de 16bits a 7,61 MHz PAL | 7,67 MHz NTSC.
- Procesador secundario Zilog Z80 de 8bits a 3,55 MHz PAL| 3,58 MHz NTSC.
- 64Kb de RAM principal | 64Kb de RAM video | 8Kb de RAM sonido.
- Chip de sonido FM Yamaha YM2612 de 6 canales.
- Chip de sonido adicional PSG Texas Instruments SN76489.
- Procesador gráfico Yamaha YM7101
Hoy dichas especificaciones causarían risa, pero en aquella época era un hardware bastante respetable, ahora veamos cómo podemos emularlo.
Buscando un emulador de Sega Mega Drive
Lo primero que necesitamos es encontrar un emulador, con dicho emulador podremos jugar a los juegos de nuestra protagonista. Al ser una consola de hace tanto tiempo, en ordenadores han ido depurándose hasta llegar a nuestros dispositivos Android.
Hay disponibles bastantes alternativas, pero hemos seleccionado tres, que son considerados los que nos ofrecen una experiencia cercana a la consola original. El que destaca sobre todo es MD.emu pero al ser de pago, quizá eche atrás a más de uno, así que lo hemos acompañado de otras dos opciones gratuitas. Para conseguir una emulación satisfactoria los requisitos son bastante asequibles, por lo que cualquier dispositivo medianamente moderno no debería de tener ningún problema.
Sin el mando adecuado la sensación se pierde
Yo soy usuario de Mega Drive, la tengo guardada en su caja original, así que tengo en mi memoria la sensación de jugar usando sus mandos. Olvidaos de gatillos, vibración y demás cosas modernas. El mando de la Mega Drive constaba de una cruceta, tres botones -hubo una versión de 6 botones- y el botón de start, un detalle sobre los mandos, existió una versión inalámbrica.
Luego con el tiempo he ido jugando en emuladores, pero al poco tiempo dejaba de jugar porque no me transmitía la misma sensación, ya sea jugando con teclado o usando un mando de la Xbox original. Así que decidí buscar alguna solución para poder usar el mando original o alguna réplica moderna. Ya en su día hice un adaptador para usar el mando original en ordenador, pero por más que busco, nuestros dispositivos Android no tienen puerto paralelo. Así que mi única opción pasaba por tres letras, USB.
Necesitaremos un adaptador USB OTG y además de configurar el emulador para hacer buen uso del mando
Buscando por la red, en mi empeño de tener la misma sensación y experiencia de juego, encontré dos posibilidades. La primera opción es usar un adaptador y así poder conectar los mandos originales a nuestro smartphone o tablet. La segunda opción es usar una replica del mando original, que pese a no ser 100% exacto, si que nos da esa sensación retro a la hora de jugar.
Sin juegos, no hay diversión
Ya tenemos emulador y mando, hasta ahí todo correcto, pero una consola sin juegos no es nada. En internet es sencillo encontrar una lista de los juegos de Mega Drive, tenemos disponibles desde plataformas, pasando por deportes y RPG. Aunque hay una serie de títulos que deberías jugar y darles una oportunidad a esta gran época que fueron los 16 bits.
- Sonic The Hedgehog 1, 2, 3 y Knuckles: Sonic y Mega Drive son una pareja que siempre permanecerán unidos. Su trilogía a la que se unió el cartucho ampliable Sonic & Knuckles, nos ofrecen horas de diversión y sobre todo velocidad.
- Alex Kidd in the Enchanted Castle: Es la primera aparición en Mega Drive de, hasta la llegada de Sonic, personaje referente de SEGA. Un plataformas en el que no se permiten errores.
- Aladdin: Virgin hizo un juego a la altura de una gran película, se usó la tecnología Digicel para pasar los dibujos en papel al juego. Si te gustó la película, disfrutarás con este juego.
- Castlevania The New Generation: El primer juego de la saga Castlevania en una consola de SEGA, exprimia nuestra consola tanto gráficamente como musicalmente.
- Comix Zone: Un título de acción revolucionario en la época, en el que debemos recorrer la historia a través de un comic, existían tres finales según nuestras deciciones a lo largo del juego.
- Golden Axe: Un juego que fue trasladado directamente de las recreativas a nuestro salón. Un Beat ‘em up clásico con espadas, magia y dragones, que más se puede pedir.
- Gunstar Heroes: Juego catalogado dentro del género Run & Gun, lleno de acción que junto a unos personajes carismáticos, un gran sentido artístico junto con una estética propia, lo convierten en esos juegos imprescindibles.
- Street of Rage 1, 2 y 3: Beat ‘em up lleno de acción, envuelto en un sólido argumento, que nos ponía en la piel de tres personajes. El número de enemigos, objetos y situaciones no te dan un respiro. Recomendable jugarlo con un amig@.
- Landstalker – The Treasures of King Nole: Si tuviéramos que jugar a un único RPG en nuestra vida, este juego sería una grandísima elección. Puzles, una curva de dificultad bien equilibrada, perspectiva isométrica, todo acompañado de una banda sonora que llegó a editarse en CD.
- Flashback: Un juego sorprendente en su época, en el que se le plantea al jugador una trama bastante seria, niveles en los que se exige lo mejor de uno. Si a esto le sumamos un nivel gráfico tan cuidado, hasta en el más mínimo detalle, junto a unas animaciones soberbias, lo convierten en un juego al que hay que jugar.
- Super Street Fighter II: Edición Super del juego de lucha por excelencia de la época. Nueva gama de colores, más ataques disponibles, más melodías y un gran aumento en la velocidad de juego. Todo eso junto a la incorporación de cuatro nuevos luchadores, lo hacían el objeto de deseo de todo amante de los juegos de lucha.
- The Revenge of Shinobi: Si existía una palabra mágica para los amantes de las artes marciales, esa era la palabra Ninja. Estamos ante la segunda entrega de la trilogía Shinobi, con una dificultad bastante elevada, shurikens y algún que otro enemigo especial -uno de ellos es conocido como El Caballero Oscuro-.
- Thunder Force IV: Shoot ‘em up o también llamado el clásico matamarcianos, de dificultad endiablada, lleno de acción y disparos a raudales. Goza de un acabado técnico destacable.
- Virtua Racing: Juego que recorría los circuitos de la recreativa basada en System 1, pero SEGA estaba dispuesta a romper las dos dimensiones en Mega Drive y vaya si lo hizo. Estamos hablando de una consola de 16 bits que gracias al chip SVP podía ejecutar un juego en el que podíamos cambiar de vista, los daños afectaban en el juego y posibilidad de jugar 1 vs 1. Sólo por lo adelantado a su época es un juego al que darle una oportunidad.
- Dynamite Heady: Un juego que te gana desde el primer momento, un juego con estilo propio, que nos introducía de lleno en la ambientación de la historia. Destaca su protagonista que se puede decir que, pierde bastante la cabeza.