Los móviles son las principales cámaras de la mayoría de los usuarios. Algunos seguro que tiene en un cajón su vieja cámara compacta y otros es posible que sigan usando una réflex. Pese a eso, la relevancia de las cámaras de los smartphones ha crecido como pocos esperaban hace 10 años.
Es por eso que necesitamos que los teléfonos sean lo mas versátiles posibles y que no nos quiten posibilidades, sino que nos las den.
Vaya por delante que soy un gran defensor de la versatilidad en los móviles por encima de la calidad y que si bien me encantaría tener ambas siempre prefiero sacrificar la segunda ligeramente para tener más de la primera.
De cuando las dos cámaras se quedaron cortas
Cuando Apple mostró al público el primer iPhone con doble cámara me alegré. No porque fuera a comprarlo, sino porque sabía que se había abierto una veda. No era el primer smartphone con cámara pero sí fue el que puso de moda el zoom óptico.
Por fin podíamos hacer fotos cercanas si perder el detalle que eliminábamos al usar un zoom digital. Vale, no fue tampoco el primer smartphone con zoom pero no creo que en la época del Nokia N91 eso fuera tan relevante.
Así pues, los demás fabricantes empezaron a darle relevancia a esto y fueron muchos los que optaron por dos sensores. La mayoría usó un angular normal y un telefoto pero marcas como LG se diferenciaron usando un gran angular.
Pero a medida que usaba móviles con una configuración u otra me di cuenta de que no quería elegir. Tener dos cámaras se me quedaba corto. Necesitaba más.
Huawei lanza un móvil con tres cámaras y casi acierta
A principios del año pasado Huawei presentó el primer smartphone con tres cámaras en la parte trasera, el Huawei P20 Pro. En ese caso optaron por usar el sensor normal que ya tenían sus antecesores y un telefoto, pero en vez de un gran angular mantuvieron también el sensor en blanco y negro.
He estado usando medio año ese móvil como principal y no puedo decir nada malo de su cámara. O casi. Habiendo probado el gran angular de los LG me hubiera gustado tenerlo. Y ahí es donde llega el Huawei Mate 20 Pro, un móvil que, ahora sí, lleva los tres grandes sensores a la parte de atrás.
La era del ToF
Pero estamos ya en 2019 y hay algo con lo que no contábamos. Los fabricantes están empezando a pensar que es buena idea usar un sensor ToF en la parte trasera de los móviles para mejorar el modo retrato, poder crear mejores aplicaciones con realidad aumentada y demás.
Esto implica que hay un cuarto sensor en juego que algunas marcas están empezando a montar, pero a costa de no poner alguno de los otros tres. Un ejemplo es Honor, con el Honor View 20. Otro es OPPO, en el RX17 Pro.
La última que parece que se suma a esta tendencia es Xiaomi, que ha publicado una imagen en sus redes sociales en las que da a entender que montará un sensor normal, un gran angular y un ToF ¿Qué ha pasado con el zoom óptico?
De acuerdo, la mayoría de personas ni sabe que su móvil lo tiene y no lo usa pero los que lo valoramos lo echamos de menos, por mucho que la fotografía computacional haya mejorado mucho.
Nokia puede ser la referencia del futuro, con permiso de Huawei
En 2018 Huawei se ha posicionado como la marca de referencia, no porque sea la mejor, sino porque sin duda es la que mas ha avanzado con respecto al año anterior.
Se especula con que el Huawei P30 incluya cuatro cámaras y quiero pensar (por favor que así sea) que lo que hará será mantener las tres del Mate 20 y sumar el ToF. Nada que objetar a eso.
Nokia por su parte anunciará el Nokia 9 con cinco cámaras en el MWC de este año y, mas allá de que ponga un sensor de medición de profundidad como hizo Samsung en el A9, está claro que con cinco sensores no deberíamos echar ninguno en falta.
Sin ir tan lejos mucho me temo que para garantizar que la versatilidad de las cámaras no disminuye tendremos que pedirles a los fabricantes que al menos pongan cuatro sensores detrás.
PD: Y ya puestos, dos delante, al estilo del Pixel 3.