El apartado fotográfico se ha convertido, sin duda alguna, en uno de los más importantes en los móviles. Es cierto que estos dispositivos han sustituido a una gran cantidad de aparatos de nuestro día a día, desde lo GPS a las agendas, pero ninguno ha aumentado su uso de manera tan elevada.

Es por eso que muchos fabricantes se están centrando en las cámaras a la hora de presentar nuevos smartphones. Al principio vimos una clara carrera por tener más Megapíxeles pero de unos años aquí la tendencia es otra, es la de poner más sensores dentro de un mismo móvil.

¿Podría ser esta una nueva carrera inútil que simplemente busque tener una nueva herramienta de marketing? Sí, pero también podría ser el mayor cambio en esta industria desde que se implementó la cámara en el móvil.

Los sensores son como los objetivos en las cámaras réflex

El motivo por el que defiendo esta postura es sencillo. Cuando usamos una cámara profesional depende de lo que vayamos a fotografiar el que usemos un objetivo u otro. No es lo mismo fotografiar un insecto que un estadio de fútbol.

En los móviles no es posible cambiar de lente por lo que es necesario contar con un sensor diferente para cada tipo de fotografía que vayamos a tomar. Es decir, si queremos usar un zoom óptico deberemos tener un sensor con esta tecnología y si queremos hacer una foto con gran angular necesitaremos tener otro diferente.

Esto, sobre todo, aporta versatilidad ya que el tipo de imágenes que podemos tomar será muy diferente y no necesitaremos recurrir a acciones de software para obtener estos resultados.

También en la parte delantera

Pero no es esto algo exclusivo de la zona posterior de los móviles y ya son varios los terminales que cuentan con más de un sensor en la parte delantera. La última en sumarse a la moda es Google con los Pixel 3, con un sensor normal y otro gran angular.

Pero ya empezamos a ver el siguiente paso, el de móviles con tres cámaras frontales.

No todos los fabricantes lo hacen bien

Pero esa es la perspectiva adecuada, ya que no todos los fabricantes la ejecutan bien. Hemos visto cómo muchas marcas chinas llevan años poniendo dos sensores en la parte trasera de sus teléfonos aunque sólo se use uno de los dos.

Otras marcas importantes, como Samsung, han anunciado terminales con 4 cámaras detrás, como el Galaxy A9. En este caso eso no es necesario dado que uno de los sensores sirve sólo para tomar datos de profundidad, algo que se puede hacer con los otros tres. El motivo por el que se han puesto cuatro es simplemente para poder decir que han sido la primera marca en poner cuatro sensores detrás.

2019 sera el año de la cámara múltiple

Huawei ya ha anunciado que en 2019 presentará un terminal con cuatro cámaras detrás, pero no estará sola. También se espera que el Samsung Galaxy S10 de mayor categoría implemente hasta seis, dos delante y cuatro detrás.

Aunque es posible que sea Nokia la que de un paso adelante con el Nokia 10, que se espera venga con cinco cámaras en la parte trasera como hemos visto en las numerosas filtraciones de este modelo.

Esperamos que esta tendencia siga creciendo y dispongamos siempre de la mejor forma de sacar una imagen gracias a poder usar el mejor sensor para ella.