Hace unas semanas empezó la tormenta. Numerosas páginas del territorio ruso saltaban a portada de los medios occidentales ante una hazaña inesperada: fotos filtradas, vídeos e incluso unboxings del Google Pixel 3 XL, tercera generación de los Pixel de Google que todavía no se ha presentado.
Tras tantísima información y tantas filtraciones Google no se ha pronunciado al respecto y se mantiene en un silencio bastante extraño. Las teorías vuelan: ¿es falso el Pixel que muestran esas imágenes? ¿Ha sido realmente un patinazo por parte de Google? O más aún: ¿es esto una estratagema comercial? Analizaremos todas las teorías que hay sobre la mesa.
Hay teorías, y con razón
Lo normal sería pensar que, dada la profesionalidad de las filtraciones y de su extensión, esta puede ser completamente verídica. Entonces, ¿por qué dudamos? Precisamente por eso, por lo masiva y profesional que ha sido esta filtración. ¿Recordáis la que hubo acerca del iPhone 4? Aunque en una empresa se pueden cometer errores, parece extraño que Google haya tenido tal fallo.
Además, hay otros puntos a tener en cuenta. Primero, sólo se ha filtrado el XL. Luego, la ausencia de respuesta por parte de la gran G puede tener muchas interpretaciones, como que, o bien está expectante y silente ante el 4 de octubre, fecha en la que posiblemente aparecerá la presentación, o bien lo hacen para crear hype y misterio.
Por ello, pondremos todas las posibilidades encima de la mesa. Y no sólo las analizaremos, también pondré mi granito de arena y me mojaré, apostando por una de ellas. La verdad es que, de ser todo esto una estratagema por parte de Google, hay que admitir que les está saliendo redonda.
Primera teoría (y la oficial): el mercado negro ha sido la culpable
Según una extensa y concisa exclusiva del medio 9to5Google especializado en Android, la causa de esta filtración se debe al mercado negro. La teoría principal, que es la que se forja en torno a este suceso, es que un vendedor del mercado negro ucraniano vendió un lote de Pixel 3 XL en preproducción a 2000 dólares la pieza, provocando que los medios se lanzaran en pos de la exclusiva.
Una fuente de 9to5Google aseguró que tanto los equipos legales y de seguridad de Google como los de Foxconn’s, empresa ensambladora de la gran mayoría de dispositivos actuales, están envueltos en el caso de las filtraciones y lo están investigando.
Es la teoría más aceptada, y tiene todo el sentido del mundo. Si bien es cierto que cuesta pensar en que alguien sea capaz de robar un lote de Pixel 3 XL en pre-producción de esa forma, tiene mucha lógica que, tras la venta, todos los medios actuales se quisieran llevar la exclusiva. Hablamos de una filtración en la que realmente da igual quién saque primero la primicia: el hecho de que se produzca pondrá a cualquier medio en portada por lo surrealista de la situación.
Lo único que escama de esta teoría es la virulencia de las filtraciones. Obviamente si tienes acceso a dispositivos como estos, lanzarás toda la información posible sin dudarlo. El caso es que estamos viendo unboxings, reviews completas y sets de fotos profesionales dignas de un medio reputado. ¿Realmente había un lote tan grande de Pixel 3 XL y más estando a 2000 dólares la pieza? Recordemos también que comprar en el mercado negro es ilegal, y estos medios pueden enfrentarse a un delito ¿sólo por esta exclusiva?
De todas formas, insistimos en que esta es la opción más realista. Esto es debido a que el mercado negro es enorme y, por muy increíble que parezca, el estar produciendo un producto (valga la redundancia) de estas características tiene un cierto riesgo que en este caso se ha podido transgredir.
Segunda teoría: esto es un trolleo de Google
Al principio sólo salieron pequeños unboxings amateurs mostrando el teléfono y sus accesorios. Ahí es cuando la primera teoría cogió más fuerza, ya que era lógico: no sería la primera vez que un teléfono que aún no ha salido posa para la cámara en un unboxing de un empleado con pocos escrúpulos. Cuando la cosa se volvió más surrealista ya empezaron las dudas.
La cosa se iba tornando cada vez más extraña. Primero, teníamos a personas ajenas a Google (o por lo menos desconocidas) paseándose por ciertas ciudades usando un Google Pixel 3 XL sin ningún tipo de pudor. Esto se vio más veces, hasta el punto de que observamos a varios usuarios usando estos teléfonos lejos del territorio ruso, foco de la filtración inicial.
No contentos con ello, hace poco vimos cómo un usuario de Lyft, plataforma rival de Uber, se dejaba un Pixel en el mismo asiento del coche. Llamadnos conspiranoicos, pero… si has adquirido un dispositivo en el mercado negro a 2000 dólares la pieza, ¿en serio te lo dejas en un coche? Y más aún: si tienes un Pixel, es porque algo involucrado estás en el asunto. ¿Entonces?
Hay más. En las fotos que vemos de usuarios en el metro o en el bus usando el Pixel no apreciamos que precisamente lo escondan. Vale, nadie va a reconocer un Pixel a primera vista y más si hay mucha gente, pero no vemos que lo usen escondiendo su forma. Además, qué casualidad que haya usuarios con el móvil en mano para sacarles una foto.
A esto se le suman detalles que vemos en los análisis o en los unboxing. En el más famoso que hay, el que descansa sobre estas líneas, vemos a una mujer rusa en unas tomas muy extrañas usando el teléfono. Esta usuaria ha hecho un unboxing demasiado profesional, con efectos de iluminación, pose, con una ambientación dedicada…
¿Podría ser esto un trolleo de Google y que este Pixel 3 XL fuera falso? Pensadlo por un momento. Imaginad que este teléfono hubiera sido creado específicamente para estas filtraciones y que Google hubiera orquestado todo este tema para darle publicidad a la marca y luego, en la presentación, mostrar otro dispositivo y proclamar la gran sorpresa.
Esta teoría está tomando cada vez más fuerza, aunque hay un detalle que la desmonta: esta táctica de marketing es muy arriesgada y, sobre todo, muy costosa; seguramente funcionase si el teléfono fuera más famoso. Si Samsung hiciera esto con un Galaxy S, o Huawei con un P, podría tener muchísimo sentido. Pero los Pixel son teléfonos de nicho. Ve a la panadería y pregúntale al encargado/a sobre un Pixel y tendrás la respuesta.
Tercera teoría: Google, la has liado parda
La tercera teoría que se baraja es la más simple: que todo esto haya sido un cúmulo de errores de Google. Que realmente hayan perdido un lote de Pixels y que estos se hayan desperdigado por el mundo. Y no solo eso, sino que podría ser que, debido a su pasivididad, hubiera permitido que usuarios se movieran por ahí usando un Pixel, sin ningún tipo de cuidado.
Google es muy joven como fabricante de hardware, y ya sabemos los errores que cometió en el pasado en sus primeras andanzas. Sí, lo lógico sería que la gran G no hubiera permitido este suceso, pero, sabiendo que una empresa puede cometer errores, la posibilidad de que Google la haya pifiado en proporciones bíblicas es cada vez más cercana.
Aquí se genera un debate. Hay los que piensan que Google hace bien estando callada, esperando a que todo el revuelo se pase de cara a la presentación de los Google Pixel 3, además de que realmente tampoco es que pudieran hacer mucho. Esto va de la mano con el pensamiento de que, si hicieran algo, darían por verídicas estas filtraciones y su imagen pública empeoraría.
Otros, como yo, pensamos que es muy extraño que Google esté tan callada. Si bien la envergadura de esta filtración no es tan grande como la que se daría de estar ante un Galaxy o un Mate, pienso que, tratándose de medios especializados, Google podría haber tomado acciones legales contra no sólo el vendedor ucraniano en caso de existir este, sino contra los medios que publicaron las noticias.
¿Por qué? Porque, de ser este el Pixel 3 XL, ¿qué nos queda el 4 de octubre? Parte de las ventas de un dispositivo se generan por la expectación, el todopoderoso hype. Si este es el teléfono, a Google se le ha partido la presentación en 2; y será toda una decepción que supone mala imagen de cara al mercado, peor incluso de la que podría llevarse por atacar a los autores de la filtración.
Aunque todo esto son conjeturas. Queda más de un mes para que sepamos qué ocurre con todo este asunto. Personalmente, me quedo con la teoría del trolleo de Google. Como estrategia de marketing es arriesgada, pero brillante. Y qué decir: el logro de «trolleo del año» es un buen premio que por supuesto impulsaría algunas ventas. La cuestión es: ¿tú qué piensas?