Sony y la oportunidad de oro del MWC: todas las claves
Dicen que los astros se alinean, y Sony tiene su oportunidad de oro de cara al Mobile World Congress. ¿La aprovechará? Eso esperamos.
25 febrero, 2018 09:00El Mobile World Congress de Barcelona es la oportunidad perfecta para que Sony, la firma china, brille con esplendor (sea bueno o malo el esplendor). La cuestión es si la aprovechará.
Aunque no os lo creáis, el hecho de que Sony haya exprimido al máximo su ya anticuado diseño Omnibalance tiene su parte buena. Y no, no me refiero al diseño en sí. Me refiero a que tras tantísimo tiempo siendo alguien sin peso en el apartado del diseño, ahora se espera mucho de Sony.
Y como he dicho muchas veces, a veces los astros se alinean. Sony y el MWC son la combinación perfecta para que de ahí salgan titulares avanzando lo que sería un cambio de estrategia mítico en Android. Mítico por varios motivos.
Omnibalance: diseño hecho historia
Si vemos terminales de años pasados, veremos la tendencia de diseño que han ido sufriendo los smartphones con el progreso del tiempo. De hecho, es gracioso ver cómo algunos que se aferraban a estéticas características de la marca han dejado paso a la innovación y mejorar, como en el caso de Samsung y su botonera frontal.
Y aunque algunos más o menos, la única de todas las firmas tradicionales que se ha adherido como un clavo ardiendo a su estética propia ha sido Sony. El Xperia Z originario inauguró en su día un diseño que para la época era genial, sobre todo porque abría las puertas a que la empresa fuera la pionera en incluir la protección IP68 contra el agua y el polvo. Aquí lo tenéis:
Sí, han ido puliendo el diseño para adaptarlo lo mejor posible a los tiempos modernos. Pero incluso en los Xperia Z originarios y en los modelos posteriores se ve que el cambio ha sido el justo y necesario para no quedarse más anclado de lo debido. Y este diseño, sin ser feo del todo, tiene una contrapartida que choca diametralmente contra la tendencia actual: los marcos de pantalla.
En la era de los «todo pantalla», los marcos de Sony quedan totalmente descartados. No soy partidario especialmente de menospreciar a un dispositivo por esta nimiedad, pero la optimización de las pantallas es un tema en auge y el diseño Omnibalance tiene el pecado de sufrir más de lo necesario en este apartado.
La tendencia de pantallas súper optimizadas obliga a Sony a abandonar el diseño Omnibalance después de años
Y de hecho, ya tienen nuevo diseño, por lo menos planteado. Se llamará plate+human (nombre curioso) y ya hay unas primeras imágenes de lo que podemos ver por parte del fabricante japonés en el Mobile World Congress.
¿Una revolución en diseño?
Según las filtraciones del prototipo del Xperia XZ2 podemos ver que efectivamente Sony dejará de lado el diseño Omnibalance y se decantará por uno llamado plate+human, que combinará la curva con la rectitud que tanto les ha caracterizado. Una foto supuestamente real así lo confirma:
Tomando esta imagen como una realidad de lo que será el próximo trabajo de Sony (todo apunta a que sí), hay varias cosas que tener en cuenta. La primera, es que a priori no vemos una optimización de los marcos tan acusada como en los casos de Samsung o Apple. ¿Seguirá apostando Sony por la precaución?
¿O hará igual que Samsung y dejará dichas mejoras recaer en el modelo más caro? Dejando de lado las especulaciones, una cosa está clara: hablaremos bastante de Sony tras este movimiento mítico. Y digo mítico precisamente por eso, porque es un cambio de paradigma que hacía falta desde hace muchísimo tiempo.
Ahora es cuando le toca a Sony discernir entre dos alternativas: si quiere que hablen bien de ella, o que hablen simplemente. No es un misterio; la MWC será un escaparate y todo el mundo se peleará por tener la mayor notoriedad posible, máxime estando de por medio la presentación del Samsung Galaxy S9 y S9+.
Entonces ¿cómo aprovechará su nuevo diseño Sony? ¿Lo anunciará al mundo como una revolución de diseño, o simplemente mostrará su cambio de opinión como suficiente estrategia de habla? Aquí es donde el punto crítico se forma, ya que en este movimiento cuentan mucho los usuarios finales.
El público llano tiene mucho que decir
Si coges un smartphone de Sony, le pegas una pegatina a los logos y le preguntas a alguien que ya lleve un tiempo en el mundillo de Android que qué dispositivo es, no le costará absolutamente nada resolver el misterio. Tú ves un Sony, e inmediatamente sabes que es un Sony.
Esto se podría considerar como algo beneficioso, pero si realmente Sony tuviera que ofrecer algo en términos de diseño. Pongamos el ejemplo contrario; cogemos un Samsung Galaxy S8 y lo usamos junto a unos amigos, dará igual si adivinan o no qué smartphone es (aunque lo adivinarán). Su primera impresión será un: «¡Madre mía, menudo móvil!». Es el efecto ¡WOW!
El ser reconocido a primera vista está bien si realmente tu diseño es capaz de encandilar más que ser reconocido
Sony puede conseguir que su nuevo dispositivo tenga un efecto ¡WOW!. Pero obviamente como todo en esta vida, puede gustar a alguien y puede NO gustar a alguien. El balance radica en cuántas de esas personas dirán que les gustan, y cuántas no. Y Sony debe buscar ese efecto, ese efecto ¡WOW! que propicien a la gente que vea el smartphone a comprárselo.
Porque aunque Sony tiene puntos muy fuertes como los aspectos multimedia o el soporte de actualizaciones y software, estos entresijos preocupan a un público no mayoritario frente al que quiere un smartphone bonito. Y es aquí donde Sony tiene que potenciarse.
Sony, los astros se han alineado
Sony tiene todos los ingredientes necesarios para tener toda la atención posible frente a sus rivales. Tiene la expectación de ver qué diseño relevará a Omnibalance, el hype de saber si una empresa tan arraigada en sus costumbres da el paso a las nuevas tecnologías y sobre todo tiene la ausencia de varios grandes que le dará más protagonismo si cabe.
Porque recordemos que no tendremos ni el LG G7, ni el Huawei P20 y tampoco se espera que el Xiaomi Mi 7 haga su aparición en el MWC. Sí, está el Samsung Galaxy S9 pero aparte de ser el terminal del momento, su diseño no será más que una corrección de los fallos del S8. Si lo haces bien, tienes la oportunidad de brillar.
A si que juega bien tus cartas, y demuestra a todos de lo que eres capaz. Porque aunque hablar de ti siempre está bien, no siempre lo es cuando esas habladurías no dicen palabras halagüeñas. Si vas a cambiar, hazlo bien.