Ayer Apple reconoció de forma pública que estaban reduciendo el rendimiento de dispositivos con baterías en mal estado a propósito. ¿Tiene derecho un fabricante a reducir el rendimiento sin que nosotros lleguemos a tener voz ni voto?
Que está pasando con los iPhone antiguos
Esta misma mañana lo contaban nuestros compañeros de Omicrono. En las últimas semanas varios usuarios experimentaban como sus viejos iPhones estaban percibiendo caídas drásticas de rendimiento. Algunos incluso llegaron a descubrir que cambiando la batería de nuestro móvil por una nueva el móvil volvía a rendir. Desarrolladores como el equipo del popular benchmark Geekbench lo confirmaron con datos.
Apple ha realizado unas declaraciones al popular medio The Verge, Apple ha confirmado que esto es cierto, e incluso han tenido la gracia de llamarlo característica. La versión oficial es que el objetivo de Apple es ofrecer la mejor experiencia de uso, y que cuando una batería no se encuentra a un nivel de carga adecuado, una carga de trabajo puede derivarse en apagados repentinos. Reducir el rendimiento es la medida que han optado para el iPhone 6, 6S y SE desde hace un tiempo. El iPhone 7 ha recibido esta «característica» en iOS 11.2.
No lo llames característica, llámalo traición
No hace falta ser un conspirador de la popular obsolescencia programada para saber que Apple está haciendo este movimiento a propósito. No es casualidad que los iPhone 8 y X no tengan esta «característica», pero que si la vayan a recibir en un futuro (si, nosotros también estamos pensando en la salida de los nuevos iPhones).
Como amante de la tecnología, he opinado sobre las cosas que considero que Apple hace bien, incluso dentro de El Androide Libre (sigo enamorado de mi iPad Pro, por cierto). Y precisamente como Androide Libre que soy quería resaltar que eso a lo que Apple ha llamado feature, en español se traduce como traición.
Me trago lo de que para Apple la experiencia de usuario es primordial. Precisamente por ese mismo motivo, los equipos destinados a UX (Experiencia de Usuario) son expertos en conocer las sensaciones de los usuarios de a pie al interaccionar con un móvil.
Introducir el concepto de un modo de ahorro de energía para cuando la batería está dañada es excelente, pero el problema que ha causado tanto revuelo es la ausencia de transparencia. Existe una opción que aparecerá a los usuarios que sean víctimas de este cambio, pero solo aparece cuando la batería está en problemas, y se activa a traición. Ellos saben claramente que lo que percibirá el usuario de a pie es que ya va lento, que va siendo hora de cambiar de móvil. Porque el mensaje informativo aparece, pero de forma oscura y rastrera
Ahorro de batería en iOS estaría genial, pero no así
Ahora en serio, la idea de una característica en si me parece fabulosa, pero me resulta familiar. Ay, si se me había olvidado, resulta que en Android tenemos desde hace años un modo de ahorro de energía. Si nos salimos del estándar al que todos los usuarios tenemos acceso, fabricantes como Sony, Xiaomi, Huawei o Samsung incluso nos permiten tener un mejor balance personalizado entre rendimiento y autonomía. Reducen el rendimiento, pero podemos activarlos y desactivarlos a capricho, o incluso programar circunstancias.
Da la casualidad de que hoy, mi compañero Iván Linares hablaba de cuatro cosas de iOS que le gustaría tener en Android. Un punto muy interesante que ha comentado es lo poco que nos convence a muchos las notificaciones de iOS, donde Android está a otro nivel. Quería complementar ese artículo con mi humilde opinión.
Es cierto que iOS es un sistema muy centrado en la experiencia de uso, pero eso no significa que sea perfecto. Llevo años analizando ya las versiones de Android, desde Android 6.0 a 8.0 Oreo, y a pesar de las críticas que muchos han hecho a Google (en resumen, muchos piensan que si no hay cambios visuales, no es una actualización de verdad), considero que en cada nueva versión de Android, mi experiencia de uso ha ido mejorando.
Existen pequeños detalles en Nougat que hacen que no quiera tocar versiones anteriores ni con un palo, y conforme pasen los meses sentiré lo mismo por Oreo, sin darme cuenta (posponer notificaciones está genial).
Pero ¿sabéis que es lo que no me sucede? Mi Nexus 4, el cual ha cumplido ya cinco años sigue comportándose a un rendimiento excelente. No es como si el sistema haya dejado de funcionar para que me compre el Pixel 2 XL. Y os puedo asegurar que si la batería era mala en sus días, el deterioro hace que sea peor.
En Android estamos protegidos de este tipo de amenazas ¿Verdad?
Me he desviado de la pregunta un poco, sigamos con lo importante. No, esto que ha hecho Apple es impensable que suceda en Android. ¿Por qué?
El primer motivo se encuentra en los índices de satisfacción del iPhone. Según varias estadísticas, son los más altos del mercado, y muchos de sus usuarios valoran iOS muy por encima de Android. Esto permite que Apple pueda hacer lo que le de la gana, porque su target principal de consumidores se lo va a tragar.
Y oye, hasta cierto punto entiendo que alguien que se ha gastado un dineral en aplicaciones se niegue a moverse a un ecosistema completamente distinto, y tener que volver a comprar todas las aplicaciones, ya que es la misma barrera que tiene un usuario de Android para largarse a iOS.
A los usuarios de Android no nos tiembla el pulso para cambiar de marca, y eso es bueno.
El punto clave aquí, es que en el resto del mercado móvil no existe esa lealtad a nuestras aplicaciones compradas. Algo que es genial de Google Play es que si compro una aplicación, la podré seguir utilizando si cambio a un móvil de otra marca que use Android.
Parecerá una chorrada para muchos, pero el hecho de que las barreras para cambiar de un Android a otro hace que un fabricante no pueda permitirse perder a un cliente. A día de hoy estoy muy contento con el OnePlus 5, pero si OnePlus empieza a molestarme no me temblará el pulso para cambiarme en mi próximo móvil a Xiaomi, Samsung, Sony, Google, Huawei. Los fabricantes de Android deben competir más por mi fidelidad, y lo agradezco, porque hace que el mercado sea más competitivo.
El deterioro de un móvil es inevitable, pero el control es nuestro
Más allá de la competencia entre marcas, existe otro motivo de peso por el cual podemos asegurarnos de que esto no vaya a pasar en Android. Aplicaciones como CPU Z o AIDA 64; entre muchas otras; nos permiten conocer si nuestro móvil está rindiendo por debajo de lo esperado, además de conocer el estado de la batería.
Incluso si no queremos que la batería se desgaste, podemos reducir el consumo de nuestro móvil de forma manual para retrasar los ciclos de carga. Podemos elegir cuando y como queremos cuidar nuestro móvil a largo plazo.
Está bien asumir que con el uso y el paso de los años nuestro móvil se degradará, pero en Android tenemos la libertad de elegir por nuestra cuenta cuando estamos percibiendo una mala experiencia de uso, y no un ajuste que se mantiene secreto hasta que le venga en gana.
¿Es justo que los fabricantes hagan este tipo de movimientos?