El precio no decide la calidad de un móvil, pero nuestro cerebro no piensa igual
¿Se puede saber si un móvil es bueno o malo probándolo a ciegas sin saber nada sobre sus especificaciones? Uno móvil de 300€ frente a otro de 700€.
25 marzo, 2017 12:01¿Se puede saber si un móvil es bueno o malo probándolo a ciegas sin saber nada sobre sus especificaciones? Uno móvil de 300€ frente a otro de 700€. ¿Pueden llegar a ser iguales?
En cuanto leemos las especificaciones de un smartphone estamos condicionando nuestra primera percepción del dispositivo en sí. Si en su publicidad ponen bien en grande que «su pantalla 2K ofrece una visión realista del mundo», ya estamos recibiendo una ‘carga previa’ que nos predispone. Nuestro cerebro se fija, no hay remedio.
Pero… ¿Y si comparáramos dos smartphones sin mirar sus especificaciones ni el precio? Coger dos dispositivos cualesquiera y comparar sus sensaciones. Ver si realmente transmite la sensación de verse mejor por tener una pantalla 2K o 4K, si ese procesador hace honor a lo que promete, etc. Ya no tendremos ningún dato que nos predisponga.
¿Un móvil es bueno por su precio o por lo que transmite?
Porque es una realidad que hay smartphones con un precio inferior que cuentan con un rendimiento sorprendente. No hay que irse muy lejos ni indagar entre las marcas chinas para toparse con OnePlus o Xiaomi. Dos referentes en la relación calidad-precio.
Galaxy S7 Edge y OnePlus 3T, distinto precio y sensaciones muy parecidas
Imaginad que nos llevamos a las manos el Galaxy S7 Edge y el OnePlus 3T. Dos smartphones con unas prestaciones similares. La diferencia más notable está en el precio, siendo el dispositivo surcoreano casi el doble de caro que el de la marca china.
Samsung Galaxy S7 Edge | OnePlus 3T | |
---|---|---|
Procesador | Qualcomm MSM8996 Snapdragon 820/Exynos 8890 Octa | Qualcomm MSM8996 Snapdragon 821 |
Tecnología de pantalla | Super AMOLED | Optic AMOLED |
Resolución | 1440 x 2560 pixeles con 534ppp | 1080 x1920 pixeles con 401ppp |
Memoria RAM | 4GB | 6GB |
Almacenamiento | 32/64/128 GB | 64/128 GB |
Materiales | Cristal | Metal |
Cámara | 12 MP, f/1.7, 26mm, OIS, LED flash | 16 MP, f/2.0, OIS, LED flash |
Sin conocerlos de nada, una persona que se lleve a las manos ambos terminales tendrá buenas sensaciones. Los dos tienen una buena construcción y materiales que transmiten calidad. Quizás el hecho de contar con la pantalla curvada le da un aspecto más cuidado al S7 Edge. Pero el frío del metal siempre es un buen amigo para transmitir unas buenas sensaciones.
En rendimiento pueden competir de tú a tú. Samsung ha dejado de lado la sobre-explotada capa de aplicaciones que venía arrastrando hasta el Galaxy S5 y ahora todo va más fluido. OnePlus, por su parte, cuenta con una ROM modificada de Android llamada OxygenOS. Desarrollada con el fin de explotar al máximo el potencial del hardware de sus dispositivos.
La pantalla puede ser un factor decisivo a la hora de marcar como bueno o malo
Una pantalla bien calibrada puede ofrecer una mejor calidad que otra con mayor resolución
Probando los dispositivos a ciegas sin conocer sus especificaciones puede que una pantalla FullHD bien optimizada te de una mejor calidad de imagen que una pantalla con resolución QuadHD. En mi caso, he podido probar tanto el LG G4, con una pantalla 2K, como el Xiaomi Mi5S, con resolución FullHD. Y puedo decir que la calidad de imagen que vi en el dispositivo chino me gustó más. Una mejor calibración de pantalla compensaba ese paso por debajo en resolución.
Los materiales pueden transmitir calidad o todo lo contrario
En mi caso, valoro mucho la ergonomía de un dispositivo. Que un móvil me de un buen tacto a la hora de agarrarlo me transmite buenas sensaciones y me da la sensación de cuidado, lo que deriva en pensar que es un terminal bueno. Cualquier fabricante puede hacer un buen diseño y ofrecer esta sensación aunque por dentro tenga el hardware del Nokia 3310. Pero aunque la mona se vista de seda..
Actualmente mi móvil principal es un Sony Xperia X Compact y me encanta su ergonomía para agarrarlo así como el material en el que está fabricado (plástico pero se nota diferente). Esto acompañado de un buen rendimiento y una pantalla que a pesar de ser de resolución 720p, hace que piense que es un buen móvil más allá de los casi 400€ que cuesta en Amazon. Quizás el hecho de ser un móvil pequeño y la mala fama (injusta a día de hoy) que tienen las versiones «lite», puede darme una mala predisposición. Pero probándolo durante más de un día que llevo ya todo esto se desvanece.
Un móvil puede ser bueno independientemente del precio o sus especificaciones
Lo importante reside en que pienso que es un buen móvil a pesar de contar con unas especificaciones por debajo de la gama alta. El procesador no es el último, tiene 3GB de RAM y la cámara no destaca dentro de sus hermanos de la gama Xperia X. Pero me transmite buenas sensaciones a la hora de usarlo, agarrarlo y usarlo en mi día a día. Así que pienso que tengo un buen móvil en las manos. De hecho cuando me lo mandaron, ni miré sus especificaciones y cuando lo tuve en las manos me sorprendió gratamente.
Que un móvil cueste 600€ no significa que sea bueno al 100%
Tampoco el precio es proporcional a lo bueno que sea un dispositivo. Me he llevado a las manos muchos dispositivos. He probado terminales caros con buenas prestaciones como el LG G4 y también smartphones baratos como el Xiaomi Mi5S que contaban con especificaciones top. Ambos me parecían buenos dispositivos a pesar de que el Xiaomi costara la mitad en su lanzamiento que el LG G4.
Sin embargo, cuando probé el Galaxy S5 me pregunté.. ¿Vale en serio este móvil casi 600€ de salida y lo compraron? No me transmitía para nada buenas sensaciones. Los materiales no me gustaron nada al tacto y la pantalla no me parecía que destacara tanto como la vendieron. Mientras que al poco tiempo pude llevarme a las manos un OnePlus One y vi como sí era un buen dispositivo a pesar de costar poco más de 300€.
Pregunto en mi grupo de amigos para una visión más externa
He preguntado en un grupo de amigos que tengo para una visión más externa de este tipo de ‘cata a ciegas’. Un rasgo fundamental que les hace pensar que es un buen móvil es el paso entre aplicaciones. Si pueden pasar de Telegram a Facebook rápidamente, por ejemplo. El problema está en que esto puede deteriorarse a medida que usemos más el móvil. Siendo afectado por las aplicaciones que tengamos y demás.
Rendimiento, materiales, peso y cámara es en lo que más se fija el público general.
También han hecho hincapié en la calidad de la pantalla. Por último, los materiales también son un factor decisivo: «Aparentemente da sensación de más calidad y rigidez«. Algo que también se ha nombrado es el peso: «Que pese poco también me da buena sensación, no sé por qué«. La cámara también es importante para los que le guste la fotografía. Tener una buena calidad de imagen puede ser un indicativo del ‘nivel’ del resto del dispositivo.
Con esto quiero llegar a que si un fabricante quiere calar en este mercado, centrándose en ciertos factores puede ganar la confianza de una mayor cantidad de potenciales clientes.
La reputación te permite subir precios, pero las sensaciones no entienden de eso
Tener una reputación en el mercado te permite subir el precio de tus productos. La gente sabe que comprar tu producto implica pagar por un buen dispositivo. Marcas como Samsung, Sony, HTC e incluso ahora Google con sus Pixel lo saben. Se han labrado una fama y ahora la aprovechan. Al otro lado están las marcas que buscan conseguir dicha fama a partir de una buena relación calidad-precio.
Pero tener un dispositivo más caro en el mercado no implica aportar al cliente unas mejores sensaciones. Hay veces que un smartphone que cuesta la mitad nos gusta más por su estética, características o la forma en la que nos da Android. Hay quienes preferirán un OnePlus 3T antes que un Google Pixel aunque puedan comprarse los dos.