Son tiempos adversos para Google, el buenrrollismo del que disfrutaba en la opinión publica esta empezando a ser empañado por varios nubarrones que se acercan cada vez mas en dirección a Mountain View.
Desde siempre Google ha sido el adalid del buenrrollismo en Internet, todo era de color de rosa, y el gran enemigo era Microsoft con su Windows y su costumbre por cobrar por casi todo. Pero ni Microsoft es tan malo, ni Google es tan bueno, ambas son empresas que quieren ganar dinero y sus movimientos, unos mas que otros, suelen causar controversia y ahora es a Google a quien le toca recibir criticas desde todos los frentes.
Descontenta a los usuarios
El primer palo que le están dando viene desde la comunidad, y es la restricción del código de Honeycomb a ser publicado. Cada vez que Google libera una versión de Android su código se hace publico, ya que siguiendo la licencia junto con los binarios se ha de publicar las fuentes de código.
Mucha gente se esta rasgando las vestiduras invocando a San Ignucio y a la GPL desde que se supo que Google había cerrado el código de Honeycomb, craso error, Android no se publica mediante licencia GPL, se publica bajo licencia Apache, y la licencia Apache no exige la publicación del código si se hacen modificaciones sobre el original. En Android el único componente que sigue la GPL es el kernel, aunque la GPL sea vírica no se extiende al resto del sistema ya que solo usa el kernel como capa de abstracción de hardware, el resto de Android esta hecho “desde cero” prácticamente.
Así que no se tienen fundamentos “legales” para echar nada en cara a Google, que a la vista de los usuarios avanzados y cocineros de Android no quede bonito es una cosa, pero Google no esta haciendo nada “malo”.
Por otro lado entiendo este movimiento, Honeycomb es la gran apuesta de Google para meterse en el mercado de las tablets de lleno y hacerle frente al iPad y cerrando el código lo ha blindado hasta que el sistema este maduro. Imaginaos por un momento que se publica el código, la versión final de Honeycomb aun no esta depurada, y empieza a llegar tablets desde el lejano Oriente con un Honeycomb sin acabar, con fallos de rendimiento y que no es lo que se esperaba.
A nivel de marketing generaría desconfianza, un usuario prueba una tablet con un Honeycomb sin terminar y su experiencia es negativa será reticente a comprar cualquier otra tablet, por mucha Motorola Xoom que sea, que lleve Honeycomb, generando una mala publicidad sin fundamento. Así que en parte entiendo que Google blinde el código de Honeycomb antes de la salida oficial de sus tablets, ahora bien, si una vez lanzado siguen con esta política seria el primero en alzar la voz.
Descontenta a los desarrolladores
La siguiente crítica, con bastante razón, viene de parte de los desarrolladores y es debido a que la página Web del Market en la que los desarrolladores suben sus aplicaciones lleva con problemas desde hace casi 4 días. Cuando un desarrollador intenta subir una actualización de su aplicación al Market acaba dando un error 404 de página no encontrada. Además de dar varios errores más como mensajes a los desarrolladores que no puede modificar la aplicación porque no les pertenece cuando es suya. También hay errores en las estadísticas e incluso de pagos con Google Checkout, algo que esta dificultando la labor de los desarrolladores para proveer a Android de nuevas aplicaciones o actualizaciones de las existententes.
Es una época idónea para que el Market de Google comience a dar fallos, justo cuando la tienda de aplicaciones de Amazon acaba de llegar a Android y con la gran cantidad de Markets alternativos que existen amenazando la hegemonía del Market de Android.
Creo que Google debería cuidar más a los desarrolladores que publican en su tienda de aplicaciones ya que 4 días de fallos en el servicio me parece excesivo.
Descontenta a las empresas colaboradoras
Otras criticas vienen de las empresas colaboradoras de Google, ya que esta empezando a obligar a sus partners a firmar cláusulas de no fragmentación. Esto provoca que Google sea el que decida que cambios o no se pueden introducir en el sistema, como por ejemplo Sense en el caso de los Htc o cualquier capa que se le ponga al sistema operativo.
Esto provoca que cualquier cambio que quieran realizar sobre una nueva versión de Android tendrá que estar listo mucho tiempo antes del lanzamiento. Esto redunda en los usuarios y provocara que no salgan teléfonos con Android 1.6 o que las actualizaciones de algunos terminales se demoren tanto.
Esta cláusula además es un blindaje contra Facebook, ya que el supuesto Facebook Phone se rumoreaba que iba a usar Android de base con una modificación hecha por los programadores de Facebook. Esto hace que cualquier cambio de Android que se quiera comercializar tendrá que ser aprobada desde Mountain View pudiendo censurar cualquier modificación que no les convenga o no les guste.
Es normal que una empresa de las dimensiones de Google, con todos los proyectos que tiene en marcha y con la gran mayoría de empresas y usuarios con los que esta implicada, genere descontento y se abra algunos frentes. Pero no hay que olvidar que esto no es una religión, es negocio, y que hay que mantener la actitud crítica con Google, para bien y para mal.